Dara-san of Reiwa tendrá anime en 2026: la comedia de terror más peculiar de la era Reiwa salta a la televisión
Hay anuncios que llegan con un aura extraña y maravillosa, y el de Dara-san of Reiwa es exactamente así. Kadokawa ha confirmado que el manga surrealista y lleno de humor negro de Haruomi Tomotsuka dará el salto al anime en 2026, y la sensación inmediata es que estamos ante una de esas series destinadas a convertirse en cult favorite. Su mezcla de terror, comedia absurda y personajes que se mueven entre lo grotesco y lo adorable promete una experiencia diferente, de esas que solo Japón sabe entregar con tanto descaro.
Una apuesta atrevida para 2026 con un equipo creativo muy sólido
El anime estará dirigido por Tadato Suzuki, conocido por su trabajo en Gushing Over Magical Girls, mientras que Asahi Production se encargará de la animación. La elección tiene mucho sentido: el estilo de Suzuki encaja de maravilla con ese tono que combina tensión, humor y un toque incómodo que el manga explota con maestría. Los diseños de Koichi Kikuta prometen trasladar al anime esa mezcla entre lo terrorífico y lo entrañable que caracteriza a Dara-san, mientras que la banda sonora de Rei Ishizuka apunta a potenciar los contrastes emocionales del relato.
Lantis estará al frente de la producción musical, lo que suele ser una garantía de temas memorables que ayudan a elevar la identidad de la serie.
Un manga que nació en redes y creció hasta convertirse en un fenómeno peculiar
La historia de Dara-san of Reiwa empezó en Twitter en 2019, cuando Tomotsuka publicaba sus primeras páginas sobre esta extraña “diosa de la desgracia”. Su estética incómoda y su carácter brusco pero inesperadamente simpático conectaron rápido con los lectores. Con el tiempo, la obra llegó a Comiket en formato de volúmenes autoeditados, hasta que Kadokawa decidió incorporarla a su catálogo y publicarla en ComicWalker a partir de 2022.
Que un manga con origen tan independiente y tan marcado por la personalidad de su autor llegue al anime es un hito bonito, porque mantiene esa sensación de proyecto personal que ha ido creciendo gracias al boca a boca y a la rareza encantadora de su protagonista.
Una historia que mezcla horror, humor y ternura de la forma más imprevisible
La premisa es tan sencilla como efectiva: dos hermanos se pierden en un bosque durante una tormenta y terminan encontrándose con Dara-san, un ser que asegura ser una “diosa de la mala suerte”. Su figura es grotesca, su actitud es exagerada, y su propio discurso parece sacado de un relato de terror… hasta que la conoces mejor. La clave de esta historia es ese contraste constante entre el miedo inicial y la calidez que aparece en los momentos menos esperados.
El manga juega con esa frontera entre lo que asusta y lo que hace reír, recordando a esas historias orales que los niños escuchan con una mezcla de terror y fascinación. Dara-san es un ser incómodo, pero también profundamente humano, y ahí está gran parte de su encanto.
Un anime que puede sorprender por su sensibilidad bajo el caos
Aunque desde fuera pueda parecer simplemente una comedia de terror, Dara-san of Reiwa tiene un trasfondo emocional muy cuidado: reflexiona sobre lo desconocido, sobre los prejuicios que proyectamos en aquello que no entendemos y sobre cómo las relaciones inesperadas pueden cambiar nuestra mirada del mundo. Es una obra que te invita a reír y a estremecerte, pero también a empatizar.
El salto al anime le permitirá explotar aún más esa dualidad: sombras densas, planos inquietantes, reacciones exageradas, silencios incómodos, explosiones de humor absurdo… todo en un equilibrio que puede dar muchísimo juego en televisión.
Un 2026 que suma otra propuesta original y con mucha personalidad
Con siete volúmenes publicados y un fandom que crece gracias a su estilo tan particular, el anuncio del anime posiciona a Dara-san of Reiwa como una de las series más llamativas del próximo año. Su combinación de misterio, comedia y horror ligero promete una experiencia distinta dentro del panorama de estrenos, algo que siempre se agradece entre tanta producción homogénea.
Y si mantiene el espíritu juguetón y emotivo del manga, es muy probable que se convierta en una sorpresa que conecte con quienes buscan historias raras pero llenas de corazón.