Ahora, dentro de su línea Marvel Essentials, con un formato mucho más sencillo y, por lo tanto, asequible a todos los bolsillos, nos encontramos ante un tomo único editado en rústica con tapas blandas y tamaño de 15 x 23cm. En su interior encontramos 200 páginas a todo color compuesto por los números originales de Civil War 1-7, vendiéndose a un módico precio de 9,99€.
Hace mucho que las cosas se torcieron: con House of M los mutantes quedaron reducidos a una ínfima parte de lo que eran por culpa de la bruja escarlata; los nuevos guerreros, un grupo de adolescentes con superpoderes, fueron masacrados justo en su propio reality show y el descontento general hierve en la sangre de los que quedan, pendiendo de sus cabezas el futuro de sus identidades secretas.
Es entonces cuando el gobierno de los EE. UU. aprueba una Ley de registro de superhéroes, diseñada para que los individuos superpoderosos actúen bajo la regulación oficial y sujetos a unas leyes, pero admitiendo ante dicho registro sus verdaderos nombres y vínculos con la sociedad y familiares. A esta ley estarán a favor Iron Man, Capitana Marvel y Mister Fantástico, quienes considerarán que todos necesitan estar bajo una misma juridisticciión, y quien decida no estarlo tendrá que acabar en prisión.
Mientras que los superhéroes que se oponen al acto, liderados por el Capitán América y con grandes héroes como Daredevil o Nick Furia, se encuentran en conflicto con la juridisticción, por lo que decidirán formar un equipo propio llamado los Vengadores Secretos que actuará a espaldas de los Vengadores.
El choque entre los dos bandos no tardará en producirse y la Guerra se llevará a demasiadas personas por delante, quieran ellos o no.
Nos encontramos ante uno de los mejores cómics de superhéroes que podemos encontrar en el mercado, siendo de esas obras que cambian el destino de todos los personajes que en este participan y presentando al lector el conflicto entre libertad y seguridad que siempre han sufrido los enmascarados, pero ahora de una forma mucho más directa y cruda.
Aquí los héroes no dudarán en utilizar tácticas rastreras, en venderse a quien pueda otorgarles su preciado objetivo y en general, el rebajarse más de lo que están habituados solo por creer que son quienes tienen razón, una dura reflexión que nos ofrecerá escenas terribles y magnificas. Ahora bien, ¿se queda este concepto únicamente en el cómic, o es una pequeña crítica a la sociedad de estados unidos, constantemente vigilada con cámaras de seguridad, escáneres en aeropuertos y terror constante?
Por otro lado, solo podemos admirar ese arte que es una gozada y disfrute visual tanto por el desfile de personajes que en este aparecen como por las escenas de batalla. ¿Qué podemos decir de ese maravilloso gancho de derecha de Iron-Man? Aunque no podemos olvidarnos de esas merecidas portadillas alternativas de cada capítulo, realizadas por Michael Turner y Peter Steigerwarld que se merecen a su vez una ovación, aunque acaben pasando más desapercibidas.
En conclusión, pocos comics hay en el universo Marvel tan míticos como Civil War y desde luego la editorial Panini no se equivoca en decir que debe de estar en su biblioteca de Must-Have, porque este evento marca un antes y un después en personajes y lectores, siendo necesaria su lectura para todos los amantes del mundillo de los superhéroes.