Hoy llegamos con el sexto tomo del manga Sigue las nubes al Nornoroeste, una obra de Aki Irie que nos encanta, aunque su periodicidad haya pasado a ser anual ahora que la publicación de Norma Editorial ha alcanzado el ritmo japonés.
Este nuevo tomo que tenemos en nuestras manos cuenta con un formato en rústica con sobrecubiertas extraíbles realizadas en papel texturizado que tienen un tamaño de 13 x 18.2cm. En su interior podremos encontrar 212 páginas en blanco y negro llenas de misterio, enigmas y unos personajes muy particulares que nos llevarán a través de su trama entre Islandia y Japón. El precio del tomo es de 9€ y está a la venta en librerías, tiendas de cómics y a través de la web de la editorial.
Es imposible, sencillamente imposible, el hermano de Kei, Michikata, dicen que ha muerto en las heladas aguas de Islandia, no hay más pistas sobre el porqué o como, ni razones que quepan en la mente de Kei para que alguien quisiera asesinarlo o para que el mismo se suicidara.
Sin embargo, el moreno sabe que hay algo que no está bien y pronto descubre que hay piezas que no encajan, por lo que decide investigar por su cuenta. Gracias a su don y a un misterioso desconocido, descubre que nada de lo que le han contado sobre su hermano es verdad, por lo que no le quedará más remedio que confiar en sus propios sentidos para dar con él.
Mientras tanto, su abuelo decide llevárselo de vuelta Japón con la esperanza de lo que hay roto en su corazón ante la perdida de su hermano, pueda ir arreglándose poco a poco. Es aquí donde entenderá que hay que aceptar el descanso cuando se necesita, donde ve la importancia de ser agradecido con las pequeñas cosas y perseverante en aquellas que le hacen feliz. Pero sobre todo es donde se da cuenta de que él tenía razón.
Así, siguiendo sus instintos más primarios, creyendo en las pistas que el mismo ha conseguido y en aquello que está al alcance de su mano, finalmente le tocará dar un paso más allá de simplemente creer y admitir ante su abuelo sus verdaderas sospechas. Michitaka está vivo.
La trama se intensifica en un tomo que deja espacio para la reflexión, el duelo y la aceptación de lo que está por venir. En este caso, Kei tiene que aceptar la posible muerte de su hermano, entender que realmente nunca le ha llegado a conocer y reflexionar sobre los sucesos ocurridos a su alrededor. Una forma muy interesante de sobrellevar esta trama y darle más profundidad y realismo, a la vez que permite un tiempo para reflexionar.
Por otro lado, tenemos que lamentarnos porque muchos de los personajes que nos han acompañado estos seis números, aquí ya no aparecen. El abuelo de Kei apenas está un par de viñetas y las chicas de la serie simplemente se quedan a un lado para dejar espacio a la trama más intensa. Ya veremos como sigue desarrollándose en tomos futuros.
En cuanto al arte, en este tomo Aki Ire nos ofrece una preciosa panorámica de uno de los lagos de Islandia completamente helado. Es sencillo, precioso y tiene ese aire melancólico que tan bien le sienta a la escena. Una verdadera preciosidad que, sumado al detallismo que encontramos en sus obras, nos deja siempre encantados.
Ahora solo queda esperar un año entero, aproximadamente, para el lanzamiento del que será el séptimo tomo y con el que esperamos encontrar a Kei en pleno auge detectivesco y haciendo uso de todas sus habilidades, sean paranormales o no.