Uno de los grandes éxitos de Mark Millar dentro del mundo editorial es la espectacular Superman: Hijo rojo, una vuelta de tuerca a la habitual historia del hombre de acero, que ahora se publica dentro de la colección Grandes Novelas Gráficas de DC por ECC Comics.
El formato que nos presenta la editorial de este tomo único, es un bonito cartoné de tapas duras con un interior formado por 160 páginas a todo color que recopilan lo que sería la edición original de Superman: Red son USA. Para aquellos que se quieran hacer con esta pequeña maravilla, la tienen a la venta por 23€ en librerías especializadas, tiendas de cómic y a través de la web de la editorial.
En este extraño mundo paralelo, la Unión Soviética revela que cuenta con una arma secreta de lo más inesperada, Superman. Esto trastoca el desarrollo de la Guerra Fria y convierte a la carrera de armas nucleares en una carrera de super-seres.
Tras haber crecido en Ucrania, Superman es amable y justo, pero también comunista, y se pasa todo el tiempo posible detectando y previniendo accidentes en la URSS. Su opuesto estadounidense es Lex Luthor, un genio científico que trabaja para S.T.A.R. Labs y que se ha casado con Lois Luthor ;y a petición de su contacto con la CIA, el agente Olsen, Luthor planea destruir a Superman
Con el fin de reunir material genético para su primer intento, Luthor provoca que un satélite Sputnik caiga en picado hacia Metrópolis, provocando que Superman acuda para desviar su curso. Bien, podría parecer un intento fallido, pero este contacto es el suficiente para que Luthor consiga la información genética necesaria y cree a un Superman Bizarro.
Mientras tanto, la tensión dentro de la jerarquía militar rusa se nota en el ambiente, Pyotr Roslov, el Jefe de la NKVD e hijo ilegítimo de Stalin desaprueba el uso de Superman, quien a su vez no pretende liderar el partido, lo que le hace ganar más adeptos. Superman Bizarro demuestra ser más inteligente que su creador, y Rusia ve como todos sus líderes, poco a poco, terminan enfrentados entre ellos y contra el enemigo.
Estamos ante lo que en DC Comics llaman "una historia imaginaria" con los mismos personajes de siempre, pero un trasfondo diferente. En este caso, Mark Millar pone el pie en el fuego y nos presenta un cómic con un trasfondo político muy marcado, que cuenta con un giro de tuerca final y nos habla de supers y de humanos, así como de la avaricia del hombre.
Curiosamente, podría haber creado una historia mucho más catastrofista, con dramas, nazis y mucha más ciencia ficción, pero decidió llevarlo al territorio más humano y en su lugar nos muestra un mismo superman, pero ligeramente radicalizado.
En cuanto al arte, encontramos el dibujo de Dave Johnson, claramente muy marcado por el estilo habitual de los artistas recurrentes de Superman, pero que a la vez es capaz de otorgar su punto innovador gracias a las expresiones faciales, ligeramente más marcadas, serias y al ambiente más opresivo en general. Esto sumado al excelente color de Kilian Plunkett encontramos un cómic claramente marcado por los rojos, los tierras y el aspecto vintage que tan bien le queda.
Así pues, este tomo único se sale de lo habitual que podemos leer de Superman, pero es una gran obra en la que se nota que Mark Millar disfrutó creando. Tanto el trasfondo militar, como la actitud de los personajes está muy bien reflejada y nos ofrece un tomo de 10.
