Cada 1000 años, los dioses de todas las mitologías se reúnen en un congreso del Valhalla dónde deciden si la humanidad merece seguir existiendo o no. De manera condescendiente, valoran las acciones realizadas por la civilización y realizan una votación, y esta vez la cosa está bastante clara: guerras, contaminación, destrucción de la naturaleza…
La decisión de los dioses está tomada, pero cuando parece no haber esperanza, la valquiria Brünhilde da un paso al frente y se acoge a una enmienda que puede salvarles: El Ragnarök, un torneo en el que 13 dioses se enfrentan a 13 humanos para que estos puedan alargar esta condena 1000 años más.
Sintiéndose desafiados los dioses aceptan, dando paso al plan de Brünhilde, que convocará a los 13 humanos más fuertes de la historia para que regresen y luchen en favor de la existencia de su raza.
En el volumen 21 de "Shuumatsu no Valkyrie", la narrativa nos sumerge en dos emocionantes y épicos duelos que continúan la feroz batalla entre dioses y humanos. El primer enfrentamiento culmina el duelo entre Apolo y Leónidas, mientras que el segundo introduce una nueva batalla entre dos maestros de la espada: el dios japonés Susanoo-no-Mikoto y Shoji Okita, el legendario asesino del Bakumatsu y capitán de la primera división del Shinsengumi. Además, en las sombras, personajes como Buda, Odín y Brunhilde trazan planes que giran en torno a Sigfrido, el héroe sellado en el Tártaro.
La primera parte del tomo se centra en el desenlace del enfrentamiento entre Apolo y Leónidas. Apolo, el venerado dios olímpico del Sol, revela su arma definitiva, utilizada previamente en las guerras de la Titanomakia: el Rayo de Luna de Artemisa. Este poderoso arco dispara flechas de luz que deslumbran y devastan todo a su paso. Leónidas, el legendario rey de Esparta, no se queda atrás y despliega su mítico escudo espartano, símbolo de su rebeldía y fuerza inquebrantable. El combate entre estos dos titanes es una explosión de técnicas y habilidades, en el que ambos guerreros se reconocen mutuamente y se enfrentan en un último y trepidante asalto. La tensión es palpable y el resultado del combate deja en vilo tanto a dioses como a humanos, impactando a ambos bandos de manera profunda.
El siguiente combate nos presenta a dos maestros de la espada: Susanoo-no-Mikoto, el dios japonés conocido por liquidar la amenaza de Orochi y reconocido como el dios de la espada, y Shoji Okita, el temido asesino del Bakumatsu. Susanoo-no-Mikoto es venerado por su habilidad incomparable con la espada y su capacidad para enfrentar a los más poderosos enemigos. Por otro lado, Okita, con su destreza y precisión, ha ganado fama como uno de los espadachines más letales de la historia. Este duelo no solo es una confrontación de habilidades físicas, sino también de técnicas y estilos de combate que reflejan siglos de tradición y honor samurái. La batalla entre estos dos maestros de la espada promete ser tan intensa como las anteriores, añadiendo otra capa de profundidad y emoción a la narrativa.
Mientras estos duelos se desarrollan, en las sombras, personajes clave como Buda, Odín y Brunhilde están tramando sus propios planes. Estos planes parecen tener como epicentro a Sigfrido, el héroe sellado en el Tártaro. La intriga y la conspiración en torno a Sigfrido sugieren que hay fuerzas mayores en juego, y que el destino de la humanidad y los dioses podría depender de su liberación o destrucción. Estos subtramas añaden un nivel adicional de complejidad y anticipación, manteniendo a los lectores al borde de sus asientos.
El volumen 21 de "Shuumatsu no Valkyrie" mantiene la esencia de la serie: combates épicos, personajes carismáticos y una narrativa llena de giros inesperados. El autor, Shinya Umemura, y el ilustrador, Takumi Fukui, continúan demostrando su maestría en la creación de una historia que no solo entretiene, sino que también explora temas profundos como el honor, la venganza y el destino. El dibujo de Azychika complementa perfectamente la narrativa con su estilo detallado y dinámico, capturando la intensidad y la emoción de cada combate.