La editorial Ivrea no se detiene en su tarea de publicar el emblemático manga Kingdom, una serie que en Japón ya cuenta con 71 volúmenes publicados y que ha causado gran entusiasmo entre los lectores españoles.
Recientemente, la editorial lanzó al mercado los tomos 20 al 21, manteniendo su ritmo de publicación mensual y prometiendo una trama cada vez más intrigante.
Esta serie de Yasuhisa Hara ha tenido gran éxito en Japón, donde ha contado con 3 temporadas de anime, la tercera todavía en emisión y hasta una película live action. Se publica semanalmente en la revista Shukan Young Jump desde el 2006 y se mantiene aun a día de hoy como los más vendidos entre los grandes colosos del manga.
Ivrea nos trae este codiciado manga shonen de corte histórico en una edición tankoubon B6 rústica con sobrecubiertas, en tomos de unas 192 páginas en blanco y negro (alguna a color) y con cadencia mensual. Una replica del japonés que hace honor a este mítico título que tanto ansiábamos tener en nuestras estanterías.
Este manga recorre la historia de Los Siete Reinos en clave de ficción enfocándose en Xin, un joven huérfano cuya vida dejaría una gran marca en este periodo. En aquella época (hacia el año 300 a.c.) el territorio que ahora es la actual China se encontraba fragmentada en siete reinos beligerantes. Es concretamente en el reino de Qin dónde conocíamos a Xin, un joven que pasaba la vida soñando con lograr salir de la pobreza y ascender a general a través de meritocracia...
El destino quiere que termine conociendo a un joven Rey de Qin, a quién termina ayudando para permitirle acceder a un trono que le fue arrebatado en un complot de palacio. Ahora con el propósito de lograr su sueño y convertirse en el general más fuerte bajo el cielo, Xin logra bajo la tutela del famoso general Wang Qi, el halcón de Qin, uno de los anteriores generales supremos de Qin y una leyenda viva que parece haber terminado apreciando al muchacho tras sus logros en batalla.
En estos tomos la contienda en el campo de batalla experimenta un cambio dramático, inclinándose favorablemente hacia Qin con la inesperada llegada del segundo ejército comandado por Meng Ao. La sorpresa se apodera de Lun Hu al presenciar cómo las fuerzas de Wei son rechazadas con sorprendente facilidad. Motivado por la curiosidad y el asombro ante la destreza mostrada por el segundo ejército de Qin, Lun Hu urde rápidamente un plan para identificar y aniquilar a los artífices de tal vuelco en la batalla.
La atmósfera en el campo de batalla, cargada de tensión, es abruptamente cortada por un sonido estridente, presagio del inminente contraataque enemigo. Sumido en confusión y cegado por una densa cortina de humo, el ejército de Qin pierde no solo su impulso sino también su capacidad de visión. Es en este momento de caos cuando Lun Hu prevé el horror que se avecina: un diluvio de flechas destinado a sumir a las tropas de Qin en el pánico más absoluto.
Wang Ben, con su agudeza característica, intuye que el enemigo pretende llevar el combate al interior de la nublada cortina, mientras que Xin, con determinación, reorganiza a sus hombres para contrarrestar esta nueva táctica. A pesar de la nula visibilidad, los arqueros de Wei siguen acertando sus disparos con alarmante precisión, evidenciando la mortal trampa tendida por Xuang Feng, de la cual Lun Hu confía en que es imposible escapar.
Qiang Lei, al descubrir la fuente del sonido que dirige a los arqueros enemigos, concibe un contraataque ingenioso: utilizar señales sonoras falsas para desorientar a Wei. Xin, con una audacia sin límites, propone un asalto directo al cuartel general enemigo, un movimiento arriesgado que deja atónitos a sus compañeros. Con el apoyo de los montañeses de la tribu de la Piedra Azul y su excepcional sentido auditivo, logran localizar el bastión enemigo.
Mientras tanto, desde una posición más retraída, Meng Tian medita sobre la inutilidad de enviar refuerzos debido a la cortina de humo y la visibilidad reducida. Sin embargo, el ataque sorpresa liderado por la Unidad Fei Xin logra quebrar las defensas de Wei, colocando al enemigo en una posición de vulnerabilidad. Xin, al frente de sus hombres, se enfrenta a las menguantes defensas del cuartel general enemigo, plenamente consciente de los riesgos de no lograr una ruptura decisiva.
El conflicto escala cuando la unidad de Xin se topa con la caballería de Wei, notablemente superior en número. En este crítico instante, la repentina aparición de la Unidad de Wang Ben inclina la balanza a favor de Qin, demostrando que el elemento sorpresa y el momento oportuno son tan cruciales en la guerra como la fuerza misma.
Tras un ataque tras el cual se retiran Xuan Feng y sus tropas, el humo de la batalla se disipa, dejando al descubierto el desolador resultado de la batalla para Qin. Xin y Wang Ben se erigen como pilares morales para sus tropas, reconociéndoseles como héroes a pesar de la cruda realidad enfrentada. El ánimo de lucha se revitaliza entre los soldados, quienes se aferran a relatos de coraje y determinación.
La estrategia de Xuan Feng se revela en toda su complejidad, dirigida inteligentemente con la intención de desmantelar el núcleo de la fuerza del ejército enemigo, perdiendo una batalla pero equilibrando la balanza a favor del ejército de Wei. Sin embargo, este viejo estratega cae bajo las manos del brutal Huan Yi, quien masacra al estratega y a sus tropas, sacudiendo los cimientos de ambas armadas.
La muerte de Xuan Feng, uno de los Cuatro Reyes Celestiales, marca un momento sombrío para Wei, subrayando la cruda volatilidad y brutalidad inherentes a la guerra y posicionando a lo miembros más jóvenes al filo de la navaja.
Por un lado los jóvenes generales Meng Tian, Wang Ben y Xin tendrán que optar por una estrategia mucho más agresiva con la finalidad de traer las cabezas de los generales y enfrentarse en un arriesgado cara a cara contra Lun Hu y su élite.
Y por otro, el propio Lun Hu, quién tras la caída de Xuan Feng pierde a una de sus figuras paternas, dotándole de una ira que no dudará en desatar en el campo de batalla.
A cargo de toda esta obra magna se encuentra
Yasuhisa Hara, anterior ayudante del gran takehiko Inoue, quién es capaz de retratar la brutalidad de estas batallas con unas viñetas espectaculares y momentos épicos que en muchos aspectos nos recuerdan a las viñetas del fallecido Kentaro Miura en el mítico Berserk.
Esto no es un shonen convencional, es una gran historia narrada con maestría, un manga de los que hacen leyenda y que, al fin, podemos tener en nuestras manos.
