El mundo ha sido conquistado por los demonios. La humanidad sobrevive a duras penas, incluso Hollister McBrown, un antiguo sacerdote que hoy ha cambiado el hábito por un arma. Atrás quedó su iglesia y su comunidad, ahora recorre las ciudades cazando seres salidos del infierno. Pero esta misión es distinta, es personal: un viejo amigo le ha pedido que busque a su hija desaparecida. Por el camino reclutará la ayuda de su antigua aliada Krissie Kringle para enfrentarse a las fuerzas del mal, pero cuidado con mirar al abismo y más todavía con luchar contra él.
Recientemente salí a la venta En tierra de demonios, el nuevo libro de Doc Pastor, quién nos sumerge en un emocionante viaje por salvar a la humanidad. Con motivo de su lanzamiento, hemos podido entrevistar a su autor, quién nos ofrece nuevos detalles sobre su desarrollo y personajes que no podéis perderos.
¿Podrías contarnos un poco sobre qué te inspiró para escribir esta historia?
Todo empezó con una sencilla propuesta del editor de Unrated, más o menos me dijo “Si escribes algo breve y de género, lo publicamos”, así que me puse a darle vueltas al tema. Me releí mis viejos libros de La Sombra, Doc Savage y Fu Manchú para meterme más en el mundo pulp que quería y me vino la idea de un sacerdote cazademonios. Ahí empezó todo. Creo que el nombre, Hollister McBrown, me vino entre sueños, igual fueron los ángeles o quizá los demonios. Y poco a poco todo fue cobrando forma. El mundo, cómo era el protagonista, cuáles eran sus defectos y bondades y, esto lo tenía claro, el hablar sobre la fe y la esperanza.
Personalmente pocas cosas me parece que hay en el mundo que sean más importantes que estas dos, todos tenemos fe en el algo y esperanza por algo, aunque a veces nos creamos muy cínicos o finjamos que no es así. Puede ser algo tan sencillo como irte a dormir y dar por hecho que te despertarás al día siguiente, tienes fe en ello aunque sepas que igual no es así, o te vas viaje con la idea de pasártelo bien, es una esperanza dado que podría salir mal. Todos somos criaturas de fe y esperanza.
Hollister McBrown es un personaje complejo con un trasfondo como sacerdote. ¿Qué desafíos encontraste al desarrollar su carácter?
La base de quién era fue de lo primero que tuve, igual que el nombre, y a partir de ahí desarrollé el resto. ¿Quién es? ¿A qué se debe que emprenda una cruzada contra los demonios? ¿Qué perdió cuando el mundo fue conquistado por ellos? ¿Confía en alguien? Es el protagonista y es el bueno pero no es todo blanco y negro, he intentado que no lo sea con ninguno de los personajes, no podía ser solamente un sacerdote que disparaba a seres del inframundo, tenía que tener su pasado, su dolor y su propia visión del mundo.
Lógicamente, al menos a mí me resulta lógico, su fe debía estar golpeada por todo lo que había pasado. Pero si los demonios llegan y conquistan, ¿no es su existencia una demostración de que también existe Dios? Pero claro, si existe no se ha dejado ver mucho mientras estas criaturas hacían de las suyas. Él está entre dos aguas y mientras el caos está por doquier intenta mantener la esperanza de que el mañana será mejor.
La historia se desarrolla en un mundo dominado por demonios. ¿Qué te llevó a elegir este escenario en particular para tu novela?
Si soy sincero, no recuerdo del todo bien cómo llegué hasta ello. El tema de mundos distópicos y post catástrofes siempre me ha parecido interesante, puedes crear todo un nuevo universo pero a la vez servirte del que ya existe. O de lo que queda de él. En parte supongo que todo viene del hecho de que desde niño me ha gustado la mitología, de todo tipo, cultura y país. Las encuentro fascinantes, sé menos de lo que me gustaría dado que hay mucho por saber, pero hay una pauta que se repite en todas y es la presencia de seres malignos, de demonios en una u otra forma.
El tenerlos de fondo abre las puertas a poder meter todas las criaturas fantásticas que quiera, de hecho en En tierra de demonios se deja claro que hay más pero prefiero no decir el cómo y que cada lector lo descubra. Ahora, con el escenario montado y preparado quedaba ver cómo jugaba con los personajes, qué contaba de esta tierra rota y qué introducía. Hay elementos por explorar que quiero tocar en el futuro, otros que he ido dejando ver...
¿Cómo fue el proceso de investigación y planificación para integrar los distintos escenarios españoles en tu libro?
Recuerdos, eso fue todo. No, todo no pero sí mucho. La trama sucede en Alcantarilla en Murcia, en Madrid y en Valladolid. Los tres son lugares que conozco en persona y a los que quería rendir un poco de homenaje. En Madrid viví un tiempo y he ido muchas veces allí a cubrir eventos, a sesiones de firmas y a mil cosas, siempre me he encontrado bien allí y muy acogido. Valladolid es donde nací, me crié y regresé para estudiar Periodismo, y siempre he estado orgulloso de ser vallisoletano. Es una ciudad en la que desde pequeño bebes cultura de todo tipo, ya sea teatro, cine, exposiciones…
Y sobre Alcantarilla, estuve hace muchos años, pero muchos, y fue una experiencia muy buena y divertida. Así que quería dedicar un poco de espacio a esa localidad, de hecho los demonios llegan a nuestro mundo desde ahí, es el primer sitio por el que aparecen. Es cierto, quizá hacer que una legión de demonios arrase una villa sea una forma un poco extraña de rendir homenaje, pero creo que encajaba en la novela.
"En Tierra de Demonios" aborda temas profundos como la redención y la fe. ¿Cómo lograste equilibrar estos temas con elementos de acción y aventura?
El contar con una figura principal como la de Hollister McBrown fue algo capital para ello. Como os he comentado la idea de un sacerdote cazademonios estaba ahí desde un inicio y eso marcó mucho la pauta. Para mí es un hombre de fuertes convicciones, sigue creyendo aunque haya sido golpeado, sigue pensando que es posible salvar a este mundo, está convencido de la bondad intrínseca de las personas y también en la de algunos demonios. No es un camino fácil el suyo, pero es el que ha elegido.
Cuando terminé de escribir pasé una primera versión a varios lectores de confianza y uno de ellos al leerlo me dijo que había escrito un Western. No fue algo premeditado pero en cierta forma lo había hecho en mi intento de que fuera una historia con valores pero que entretuviera, para mí eso es muy importante, hay que entretener y divertir. Si el que está al otro lado se aburre, has perdido antes de empezar.
¿Qué esperas que los lectores obtengan o aprendan de tu novela?
Lo primero es que espero que les guste, que les deje con ganas de más historias y que les entre curiosidad por adentrarse en este mundo. Si por el camino hay alguna reflexión que sacan e incorporan a su vida, entonces será algo maravilloso. Uno de los puntos en los que he incidido es que todos somos más fuertes al lado de los demás, con amigos todo es más fácil, en compañía logras hacer cosas que solo no puedes, sales adelante y sobrevives para luchar un día más.
No fue algo premeditado pero en estas páginas se ve claramente mi idea de familia. Mi vida familiar no ha sido sencilla, me crié en un ambiente en el que no era extraño que hubiera gritos y movidas, principalmente por parte de mi madre así que para mí no es tanto algo biológico como de lazos y sentimientos. Hay muchas formas de ser familia y nadie va a decirme que mi pareja no lo es o que Dende no es mi hijo y que Frost tampoco lo fue. Un amigo que hace dos décadas que está a tu lado a las duras y a las maduras es sin duda familia, es un poco lo que dice Dominic Toretto en Fast & Furious 5, “Lo más importante en la vida es la gente que está contigo… aquí y ahora”.
La relación entre Hollister y Krissie Kringle es intrigante. ¿Cómo concebiste y desarrollaste la dinámica entre estos dos personajes?
Si bien en un primer momento la idea fue que Hollister vagara de un sitio a otro en su misión al poco vi que necesitaba a alguien más, aunque solo fuese para intercambiar ideas y comentarios. Además me parece que ambos personajes se refuerzan entre sí, se hacen bien y la presencia de uno ayuda a entender mejor al otro y viceversa. Por otro lado Hollister es solo un humano y Krissie no, es uno de esos otros seres mágicos que están por el mundo, quería marca ya en esta primera aventura que están aquí y se relacionan con nosotros.
Para mí son dos viejos amigos que se quieren mucho, han vivido más y confían totalmente el uno en el otro. No siempre están de acuerdo, claro que no, hay puntos y situaciones en los que difieren pero su amistad es férrea e inquebrantable. Lo haría todo el uno por el otro, no hay nada que juntos no sean capaz de afrontar.
¿Hay algún personaje o aspecto de la historia con el que te identifiques personalmente?
En cierta medida supongo que en Hollister McBrown he volcado parte de mis ideas, sentimientos y experiencias. No soy yo, nada de eso, y tampoco he pretendido que lo sea. No es un reflejo de mí pero sí tiene algunos puntos en común conmigo en formas de entender la vida y el mundo, pero varios de los personajes lo tienen y por supuesto con otros no comulgo en absoluto aunque hayan salido de mi mente.
Si tuviera que elegir diría que me identifico con la novela, con toda ella. Creo que es bastante yo de una manera diferente a cómo lo son los libros de Frost, perrito de aventuras, aunque en ambos casos los temas del valor de la amistad, de la esperanza de un nuevo mañana y de la alegría de la vida están ahí. Claro que aquí es un mundo carcomido y roto y en el caso del can explorador es todo naíf y diversión pura.
¿Cómo ha evolucionado tu estilo de escritura o enfoque narrativo desde tus primeras obras hasta "En Tierra de Demonios"?
Pues si pensamos que las primeras obras eran de divulgación y Cultura Pop y ahora hablamos de narrativa y ficción… Son mundos totalmente diferentes. La intención de una es dar información, hacer que la gente tenga materia sobre un tema y la de la otra es divertir, hacer que te evadas del día y transmitir ideas y valores. Son hechos totalmente distintos y enfrentarse a ellos también.
Por otro en realidad lo primero que publiqué fue en un libro coral llamado Caricias y batallas, el tema era el amor y lo que escribí fue un relato sobre una pareja que se conocía. Por supuesto están también los dos libros de Frost, perrito de aventuras, y los diferentes relatos de él, aunque el público al que se dirige sea otro. Y también los volúmenes Viajes en el tiempo y Aventuras en el tiempo en los que si bien son tomos de divulgación incluí un mini relato en cada uno de los capítulos, era algo que necesitaba hacer.
Finalmente, ¿tienes planes para futuras novelas o proyectos que puedas compartir con tus lectores?
Sí, claro, escribir es algo maravilloso y siempre quieres hacer más. Hay otro proyecto personal que tengo por terminar y que está pensado para autoeditar pero justo me han hecho llegar un concurso en el que encaja así que igual lo presento. Es El año en que murió mi padre y en él hablaré de cuando con veinte años perdí a mi padre por su suicidio, no solo eso, fue un año terrible en el que también falleció una prima de mi edad, hubo que internar a mi madre, me atropelló un coche… Se habla poco del suicidio y es una desgracia que deja miles de muertes y víctimas cada año, quiero hablar de ello, de qué viví, cómo sobreviví, qué veo ahora tras pasar tanto tiempo y cómo me afectó, algo que solo puedo hacer al volver la vista atrás después de estos años. Lo que intentaré dejar claro es que a pesar de todo, a pesar del dolor, de las pérdidas y de los problemas del día a día creo que la vida es algo maravilloso que hay que disfrutar, cada uno a su manera, pero siempre disfrutar.
En temas más alegres, que no quiero dejar a vuestros lectores con esto rondando en sus cabezas, también he terminado la primera versión del tercer libro de Frost que se llamará Frost, perrito de aventuras, y los gargantúas del mañana. Me falta hacer las ilustraciones, parte ya están, y tras leerlo mis lectores de confianza me meteré a hacer cambios, mejorar, revisar... También tengo totalmente terminada una novela de fantasía juvenil titulada Los versos de la magia: El hijo de la hechicera que saldrá este mismo año. La idea es hacerlo por autoedición, pero sucede un poco lo que os comentaba con el otro libro, me han hecho llegar un concurso de una editorial en el que encajaría así que quizá lo mande, lo que tengo claro es que de una u otra forma no puede terminar 2024 sin que llegue a sus lectores y puedan conocer y, espero, enamorarse igual que yo de Candy, Leire y Robert Jack.
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