Hoy cerramos una de nuestras series de cabecera de la editorial Ivrea, y nos despedimos del yuri romántico titulado Vampeerz, obra de Akili que finaliza con 9 tomos recopilatorios y un sabor agridulce tras finalizar este último.
Como suele ser habitual en esta editorial, los tomos se han editado con el mismo formato que los originales japoneses, es decir en rústica con sobrecubiertas extraíbles y con un interior formado por aproximadamente 200 páginas en blanco y negro. Para aquellos que quieran hacerse con el primer tomo, lo tienen a la venta en librerías, tiendas de cómics y a través de la web de la editorial por 8.50
La guerra entre vampiros no deja de lado a nadie y eso incluye a Ichika, quien no tarda en enterarse de la relación entre su querida Aria y la gran villana que está persiguiendolas, Alkamil Ghika, quien no solamente ha formado parte de la vida de Aria durante uno de los periodos mas importantes de su vida, si no que está considera como una de sus hijas.
Sin embargo esta revelación no hará mas que entristecer a Ichika, al ser consciente que son los celos lo que mueven a esta vampira sádica, quien tendria que haber sido reducida a cenizas desde el primer momento, aunque Aria no haya sido capaz de hacerlo.
La gran sorpresa llegará cuando la humana presencie el milagro mas sorprendente de todos, el de conocer a esa entidad, ese dios que creó la primera chispa que les ha llevado a donde están ahora, y siendo su avatar dará final, de su propia mano, al final del conflicto.
El fin de una era y el inicio de un nuevo romance, o al menos eso es lo que esperan, porque nada termina sin empezar de nuevo en el ciclo en el que han decidido vivir, ahora juntas.
Con estos dos tomos llegamos al final de este manga, que pese a contar con una batalla final, nos ha dejado un poco indiferentes. Si bien la trama sobre Alkamil, Aria es muy interesante y su final nos ha parecido sublime, hemos echado en falta algo más de acción o de sentimiento en su reencuentro, aunque quizás es que los años han creado ese vacío en los personajes.
Sin embargo, la sorpresa ha llegado cuando tras finalizar la trama real del manga, nos hemos encontrado con algo así como un after credits, un final bastante manido e innecesario con las protagonistas y su continuación en el mundo. Personalmente, nos ha parecido muy innecesario y una forma de alargar las páginas de un final que se ha quedado algo cojo. Que le vamos a hacer.
Como mencionábamos anteriormente, hemos echado en falta más batallas o más sentimiento en las páginas de estos dos tomos, pero a cambio hemos conseguido que nos contaran la historia entre las dos reinas y ese arte ha sido espectacularmente detallado y bonito. Una cosa por la otra supongo.
En conclusión, sí que habríamos agradecido que la batalla final fuera más encarnizada o sangrienta, y que el final del manga no resultara tan pasteloso, pero en conjunto no nos ha parecido un mal final y podemos cerrar este manga sintiéndonos levemente satisfechos con su conclusión, por mucho que no haya sido como esperábamos.