Reseña de Nada de Carmen Laforet y Claudio Stassi, de Planeta Cómic

Nada (Carmen Laforet y Claudio Stassi, Planeta Cómic, Barcelona, 2021) es una novela gráfica que adapta la obra de título homónimo de Carmen Laforet que publicó la editorial Destino en 1945. La historia narra la llegada a Barcelona de Andrea en plena posguerra española. Durante un año, se muda a un piso lúgubre de la calle Aribau donde viven su abuela y sus tíos. La protagonista, de dieciocho años de edad, tiene una imagen edulcorada de la Ciudad Condal. Dentro del hogar familiar, se topa con las heridas morales que ha dejado la Guerra Civil. El autor de esta versión del texto de Laforet ha captado a la perfección el aislamiento que abunda en la historia. A su vez, la paleta de colores usada refuerza esta sensación.

Nada

Adaptar una obra ya existente supone un trabajo de reescritura, revisión y, en ocasiones, de omisión de algunas partes. Ocurre con todo. Cuando la literatura pasa a cobrar forma en el séptimo o en el noveno arte se selecciona qué partes de la historia se van a tratar. Cada ámbito posee su propio lenguaje, espacio y formato. Partiendo de esta base, toda adaptación va a generar amores y odios a partes iguales. Las personas que hemos leído Nada de Carmen Laforet echamos en falta algunas escenas o capas de la psique de los personajes. Sin embargo, la Barcelona de la época queda retratada de forma magistral. Lo mismo sucede con el interior del piso de la calle Aribau. La atmósfera original de la obra no solo se mantiene sino que se refuerza.

Barcelona
La paleta de colores que predomina en el hogar de la familia de la protagonista es de oscuros. Para transmitir el aire irrespirable de esta vivienda, Stassi emplea tonalidades negruzcas en las estancias en las que aparecen los familiares de Andrea. En cambio, cuando esta va acompañada de sus compañeros de universidad, se opta por una gama de colores más claros y vivos. De esta forma, se contrasta la luz de la juventud, la esperanza, los nuevos tiempos con la opacidad de personas que se sienten derrotadas. A la hora de seguir la historia, se dan un tipo de viñetas recurrentes que marcan el ritmo narrativo. Se trata de mostrar nueve viñetas que ocupan una página. En ellas no hay texto. Solo retales de rostros o elementos paisajísticos que encierran el significado de las siguientes escenas. Esta propuesta sintetiza lo que vamos a ver sin necesidad de palabras. En el caso de la reproducción de Barcelona, la recreación posee una precisión fotográfica. A modo de ejemplo, destaca la ilustración de la estación de tren Barcelona Término que es prácticamente idéntica a cómo fue antaño.

Andrea
En definitiva, Nada es una novela gráfica que adapta con un gran poder visual la obra original de Carmen Laforet. Esta versión gráfica posee un gran lenguaje plástico del entorno en el que se mueven los personajes. Así mismo, supone una invitación a descubrir la obra de Laforet entre viñetas. Además, esta adaptación puede animar a conocer la historia original. Lo esencial de esta lo ha captado Stassi mediante ilustraciones.