La gran Wataru Yoshizumi, autora de shojo por excelencia, vuelve a llenar el catálogo de la editorial Planeta con el primer número de una nueva serie titulada Caramelo, canela, palomitas. Otra historia de romance actual al puro estilo Wataru para todos y todas las fans de esta mangaka.
El formato que nos presenta la editorial es un sencillo volumen en rústica, con tapas blandas y sobrecubiertas extraíbles que tiene un tamaño aproximado de 11,1 x 17,7 cm. En su interior encontraremos 176 páginas en blanco y negro con los primeros 7 capítulos de esta historia de amor. Para aquellos que quieran empezar esta obra de Wataru, tienen el primer tomo a la venta en librerías, tiendas de cómics y a través de la web de la editorial por 7,95 €
A Kanna Hôshô le encanta el cine y ha conseguido el trabajo de sus sueños, ser productora publicitaria. Aunque se pasa los días absorbida por el trabajo, siente que en su día a día no necesita más y aunque su amiga le pregunta si no anda buscando novio, ella responde que eso es algo que ya le llegará de forma natural. ¡Sin embargo, no tardarán en tener lugar una serie de encuentros destinados a suceder...!
Kanna va vestida con ropa de andar por casa comprando en un supermercado una tarta de queso cuando conoce por casualidad a Motoharu Sena, y la forma en la que este le sonríe se le queda grabada a fuego en su memoria.
Cuando más adelante él la salva de una situación peligrosa, ella se da cuenta de que inconscientemente estaba buscando volver a encontrarse con él. Más adelante, cuando vuelven a cruzarse por tercera vez, por su aspecto, ¡él parece una persona totalmente distinta!
Desde entonces Kanna sabe que irá a por todas con este chico, e incluso aunque les cueste coincidir o tengan agendas y trabajos muy absorbentes, ella lo va a dar todo por seducir a Sena y poder ver todas las facetas de este chico.
Estamos ante el clásico manga de romance en el que la chica se enamora de vista y perdidamente del chico de turno y prácticamente lo acosa hasta que consigue una cita. Por suerte en este caso esto está muy bien enfocado y el susodicho es consciente de la pequeña obsesión de Kanna, dándole un toque más pícaro a la relación, que queda muy bien dado que aquí todos son adultos.
Por otro lado, no sabemos si el manga girará en torno a los problemas del amor a distancia o si aparecerá un rival para tirar al suelo este encuentro predestinado, pero por ahora la historia es sencilla, bonita y más un slice of life que un romance al uso. Para nosotros es perfecto porque el tema empalagoso del título resulta mucho menos apabullante una vez abres las páginas del manga.
En cuanto al arte de este tomo, aunque los personajes sean adultos más maduros sí que mantienen el aspecto clásico de esta autora, con ojos muy grandes y rostros aniñados. Por suerte las tramas de flores y más dulces quedan dejadas de lado por escenas más divertidas y conversaciones naturales entre los personajes, algo que agradecemos, ya que encaja perfectamente con los personajes.
Para concluir, podemos decir que nos hemos sorprendido con el toque de madurez que Wataru ha conseguido aportar a este manga. Atrás quedan las niñas de 14 o 16 enamoradas de sus profesores. Aquí estamos ante un manga de romance actual entre adultos, con la sencillez y cotidianeidad que ello conlleva.