Miyaka es una joven normal y corriente cuya familia vive y trabaja en un templo sintoísta. Su madre quiere que se convierta en itsukihime, una sacerdotisa de rango especial, como es tradición familiar, aunque ella no esté muy convencida del todo. Un día, mientras está limpiando la entrada del templo, se acerca a ella un chico desconocido que lleva la ropa de su instituto y lo que parece ser una espada. Tras descubrir que ella es la próxima itsukihime, el muchacho rompe a llorar emocionado. Miyaka pronto descubrirá que ese chico ha llegado hasta allí después de un viaje de más de 170 años…
Espectacular adaptación al manga de las novelas del mismo título, Kijin Gentosho Cazador de demonios, nos sitúa en una época medieval fantástica en la que los humanos convivían con seres malignos del averno. Un antiguo guerrero se convierte en el azote de estos demonios con sus habilidades especiales.
Panini Cómics lanzaba recientemente su nueva licencia: Kijin Gentôshô: Cazador de demonios, un manga que llena su catálogo de demonios a través de un apasionante viaje a través de los siglos en el que la fantasía y la ambientación histórica se dan la mano.
Este manga guionizado por Motoo Nakanishi, creador de las novelas ligeras originales, y dibujado por Yu Satomi, autora que conocemos en España gracias a Noah of the Blood Sea y Mushihime, se publica en la revista Gekkan Manga Action de Futubasha desde 2021, y cuenta con tres volúmenes hasta la fecha. Además, está en producción una adaptación animada que se estrenará en el futuro.
Kijin Gentosho llega en su primera edición en perfecto castellano gracias a la traducción de Maite Madinabeitia de Daruma, en un rústica con sobrecubierta formato tankoubon de 130x18 0mm con unas 180 páginas en blanco y negro en su interior en cada tomo. Una fantástica edición de la mano de Panini Comics con realización técnica de BARBAINK que nos deja más que contentos y que además cuenta en su primera edición con un punto de libro magnético de regalo.
Antes de enviarnos al pasado, este manga da inicio en la era actual, cuando un guerrero errante que parece un simple adolescente portando una espada de bambú se encuentra en un templo con la joven que se convertirá en la itsukihime del lugar, la sacerdotisa a cargo del lugar.
Un encuentro tan misterioso como emocional que, dejando muchas preguntas sin respuesta nos envía directos al pasado de 1840, dónde este muchacho es el guardián a cargo de proteger a la mujer que ostenta dicho cargo de los demonios que acuden a la aldea.
Este Jinta de 18 años es un muchacho normal, amigo de la infancia de la actual sacerdotisa y un guerrero con habilidades indiscutibles que es de sobras apreciado por los lugareños y, por supuesto, por la propia sacerdotisa, quién tras su ceremonial cascarón se comporta con él, y únicamente con él, como una muchacha normal. Una relación que los ha mantenido unidos muchos años y que ha terminado desarrollando un afecto romántico entre ambos que no debería tener lugar.
Por otro lado tenemos a la pequeña Suzune, una niña con un ojo de demonio que vive con él desde que eran pequeños y que no ha envejecido ni un solo día en la última década.. y a la cual curiosamente los aldeanos permiten vivir en el lugar sin cuestionar su naturaleza, al menos de momento.
Pero la vida como guardián de la istukihime que lleva Jinta y la paz relativa de estos días está a punto de cambiar por completo. Cuando una pareja de demonios de los más racionales se presenta en la aldea con una agenda oculta, todo parece empezar a desmoronarse.
Sintiendo la seguridad de la sacerdotisa amenazada, los ancianos deciden que debe desposarse para tener descendencia cuanto antes para asegurar el cargo de itsukihime, rompiendo el corazón de ambos jóvenes mientras aceptan cada uno su lugar y sus responsabilidades...
Pero esto es solo el inicio de la tormenta. El duelo de Jinta contra los demonios dará inicio a una historia que le llevará a siglos de batalla para intentar llegar hasta su destino... un duro camino que no todo el mundo podría soportar.
Motoo Nakanishi nos ofrece una trama llena de emoción que se desarrolla desde el periodo Edo (1603-1868) hasta nuestros días , una auténtica epopeya que se desarrolla a través de los siglos con una carga emocional increíble capaz de llegarnos directa al alma gracias a una narrativa fluida y accesible.
Respecto al arte, Yu Satomi es capaz de añadir a su pulcro estilo de dibujo un toque que nos hace recordar la pintura tradicional japonesa, lo cual dota a esta obra de su propia personalidad... un despliegue de belleza y detallismo que además es capaz de ofrecer lsas escenas de batalla más trepidantes sin despeinarse.
Sin duda una gran obra que todos los amantes de las historias de matademonios y samuráis disfrutarán enormemente.