Hoy volvemos con otra review dedicada a las chicas más guapas de la editorial Ivrea, las preciosas protagonistas de la serie Rent a Girlfriend (Kanojo, Okarishimasu) obra de Reiji Miyajima que llega ya a los tomos 14, 15 y 16 publicados en nuestro país.
Nuevamente, nos encontramos ante tres ejemplares en un formato rústica con sobrecubiertas extraíbles y tamaño tankoubon de 12 x 17 cm que recopilan en su interior 200 páginas en blanco y negro divididas en 5 capítulos. Para quienes quieran hacerse con la continuación de esta historia romántica los tienen a la venta por 8€ cada uno, disponibles en librerías, tiendas de cómics y a través de la web de la editorial.
Rent-a-Girlfriend Vol.14, 15 y 16 
El plan de Kazuya para conseguir que su querida Mizuhara protagonice una película va viendo en popa. Primero se alía con la vecina youtuber recién llegada al edificio e idean una forma de promocionar el crowfunding, básicamente repartiendo panfletos y regalando como obsequio por participar monetariamente, algunas de las pertenencias de la chica.
Tras conseguir el aporte de dinero que necesitaban optan por recurrir a sus compañeros de la universidad más experimentados en cine para que les ayuden a rodar las escenas. Claramente, estos se niegan al principio al ser un proyecto amateur, pero con las ganas de Kazuya no tardan en ceder y forman un rodaje espectacular.
Y finalmente, cuando todo está en marcha y Mizuhara se convierte en la estrella del celuloide con Kazuya por detrás haciendo todos los recados, ocurre lo indecible, ambos terminan en los baños termales, rodando la escena final de la película, los dos solos.
¿Será que el amor flota en el aire, o que las ganas de participar en el proyecto le nublan la mente, pero cualquier diría que Mizuhara estaba esperando que sucediera algo más entre los dos?
No sabemos si finalmente Mizuhara va a empezar a admitir sus sentimientos, o si simplemente es un clickbait más para el lector, pero parece que la chica realmente esperaba que hubiera una noche de acción o de intento al menos entre los dos. Desde luego ella no ha hecho de nada para que eso sucediera, pero nadie le puede negar las ganas.
Claro está, eso quiere decir que tarde o temprano la relación entre Kazuya y Ruka tendrá que finalizar y al pesada chica tendrá que dejar a Kazuya. La verdad es que ya tenemos ganas de esto, porque aunque sea muy adorable y genere escenas de lo más graciosas, es un poco pesada con el tema de los celos y la posesividad. Nada saludable.
Si hablamos del arte del manga, se mantiene como suele ser habitual, pero tenemos la oportunidad de ver a Mizuhara con unos looks bastante más maduros, algo a lo que ni nosotros ni Kazuya está acostumbrado claramente. Además, el añadido de la vecina cosplayer es un gran extra, porque cuando no va en pijama por casa, lleva trajes realmente divertidos y llamativos, lo que nos encanta y le añade un extra visual al manga.
En conclusión, tres tomos muy interesantes que están a punto de cerrar todo el arco de la película. No sabemos si este servirá para acercar más a los dos tortolitos enamorados, pero a nosotros nos ha gustado mucho y nos ha parecido un gran añadido a la trama.