Recuperamos una de las series más queridas actualmente y nos adentramos en el corazón más pandillero de Tokio con dos nuevos volúmenes de la famosa Tokyo Revengers, en esta ocasión los números 7 y 8 de la serie creada por Ken Wakui y publicada en nuestro país por Norma Editorial.
La espectacular edición que nos presenta Norma es en tomos dobles realizados en rústica con sobrecubiertas reversibles que miden 14,8 x 21 cm. En su interior encontramos 368 y 376 páginas respectivamente, en blanco negro más las primeras a color y 14 capítulos en los que conoceremos más sobre el destino de Takemichi y sus compañeros. Es decir, estamos ante una edición de lujo que se vende a 16€ el tomo, y que está disponible en librerías, tiendas de cómics y a través de la web de la editorial.
Los intentos de nuestro protagonista para que no haya más víctimas han dado sus frutos hasta el momento. Se ha evitado la llamada Navidad sangrienta y las únicas bajas han sido las del bando contrario, pero ¿seguirá siendo así? Además, Takemichi había roto con Hinata justo antes de llegar, aunque gracias a Miki y a sus amigos, la cosa quedará solamente en un susto y volverán como la pareja que son.
Sin embargo, Kisaki seguirá planeando nuevos movimientos que tendrán graves consecuencias en el presente y que Takemichi solo será consciente cuando al volver a su época actual se encuentre con la desgarradora escena de que todos y cada uno de sus compañeros capitanes de la Toman han muerto a manos de nada más y nada menos que Miki.
¿Cómo, como es eso posible? Antes de volver al pasado Takemichi buscará al anterior líder y lo encontrará mucho más lejos de Japón de lo que pensaba, además de mucho más loco de lo esperado. Algo rompió brutalmente la mente de Miki y ese ha sido el detonante que le llevara a matar a todos y cada uno de sus compañeros.
Así, decidido, Takemichi volverá al pasado para encontrarse con Kisaki, enfrentarse a la Tenjiku y ser el líder que necesitan que sea. Aunque no sea de la banda que él estaba esperando ser.
Parece que la trama se pone cada vez más interesante y no solamente porque finalmente nos confirmen lo que todos sabíamos, que Miki tras la muerte de su hermano y de Baji, tiene la cabeza más allí que aquí, siendo claramente susceptible y muy peligroso. Si no que además Kisaki está muy metido en el ajo, no solamente queriendo hacerle daño a la Toman, sino concretamente a Takemichi.
Desde luego la trama se complica, el protagonista tiene discursos motivadores, pero poca acción real y hay comparativas con hermanos muertos y compañeros dejados atrás. No sabemos si eso para la mente de los adolescentes es demasiado sano, el compararle con alguien idealizado, muerto y con mucha más influencia. Pero bueno, a ver como sale de esta el pobre protagonista.
Curiosamente en estos dos tomos aunque sigue habiendo acción, a fin de cuentas estamos ante un manga shonen de tortas y pandilleros, lo que recalcamos es la cantidad de flashbacks que aquí aparecen. Podemos ver al hermano de Miki en toda su gloria, a este de pequeño junto a su hermana, a Daken y parte del equipo cuando todavía no levantaban los pies del suelo. De verdad una gozada a modo de trasfondo.
Y lo mas interesante, ya sabemos que este manga acabará en breve de publicarse en Japón, así que la meta final no está tan lejos como pensábamos y las ganas de llegar a la conclusión nos están matando. Por ahora nos conformaremos con el ritmo de publicación dado y a disfrutar del trayecto.