La reciente editorial Moztros nos maravillaba recientemente con una nueva adición a su catálogo de cómic americano con una serie de tres tomos que nos llegan directamente desde el sello Vault Cómics: La irreverente historia que mezcla ciencia ficción con el cine porno, MONEY SHOT.
La historia que nos presenta este cómic nos lleva a un futuro deprimente y de alguna forma tristemente realista en el cual la humanidad, tras haber descubierto vida inteligente en otros mundos, ha decidido pasar absolutamente del tema y quedarse en casa mirando su aburrida televisión y scrolleando internet hasta morir de aburrimiento.
La falta de interés por la exploración espacial y lo que ello podría suponer ha estancado el sector científico, el cual por supuesto no recibe ningún tipo de financiación.
Esto nos deja con nuestros protagonistas, un grupito de jóvenes científicos, cada uno bueno en lo suyo, que a pesar de la situación aun quieren ejercer su trabajo a pesar del pasotismo general de la población. Sin ninguna manera de lograr fondos para poder llevar a cabo su exploración espacial / ciencia, y fruto de la desesperación, todos terminan escuchando a la líder de su equipo (al menos de momento), la investigadora Christine Ocampo cuando propone la idea más loca posible para poder costearse la vida: hacer porno con alienígenas y sacar la pasta de los suscritores que, aburridos de menearsela con lo de siempre, decidan convertirse en sus patrocinadores.
Sí, básicamente estos muchachos en pos de su ciencia, se montan un canal streaming de onlyfans en el que muestran a sus subscriptores como se cepillan a cualquier bicho que se encuentren por el cosmos, buscado algo lo bastante impactante y excitante como para poder ganar unos buenos dólares que puedan pagar la carísima teletransportación interplanetaria que les permite al mismo tiempo rodar sus escenas porno.
Money Shot es muy, muy loca, pero a la vez es capaz de sorprender a los lectores.
Por un lado, tenemos ese factor de chistes de pollas y tetas, con personajes hablando abiertamente de sexo y de las ganas que tienen de que les llenen la cara de lefa alienígena, pero al mismo tiempo nos encontramos con unos protagonistas repletos de matices bajo el burdo exterior, todo capeado con aventuras en mundos alienígenas en las que deben salvar su vida.
Seeley y Beattie brindan una narrativa que se sumerge en una gran cantidad de temas, desde la personalidad introvertida, los complejos físicos y la naturalidad de una práctica de sexo abierta, hasta cómo los líderes políticos controlan y manipulan la información para tener poder sobre las masas.
El trabajo en las viñetas de Isaacs es también bastante impresionante. Cada uno de los intrépidos xxx-plorers (el nombre al que responde esta gente) tiene un aspecto único, cinco personas comunes capaces de destacar al mismo tiempo con su personalidad y sus propios rasgos físicos. Lo otro destacable, son los salvajes diseños de los extraterrestres, que se ven tan coloridos y diferentes como cabría esperar.
Money Shot es una gran historia, irónica, divertida y repleta de lo que uno necesita para disfrutar de un buen cómic. Quizá no sea para cualquier público... pero si te gustan las historia de extraterrestres y eres capaz de divertirte con una película repleta de chalados cachondos, esto es lo tuyo.