Aquí estamos un día más con otra review de nuestros mangas de cabecera, en esta ocasión se trata de los tomos 9,10 y 11 de la divertida serie Hanako-kun, el fantasma del lavabo, obra de Aida Iro que nos tiene realmente enganchados gracias a que Editorial Ivrea publica su manga en nuestro país.
Nuevamente nos encontramos ante tres volúmenes en rústica con sobrecubiertas extraíbles que miden 13 x 18 cm, manteniendo el formato del manga original japonés. En su interior encontraremos 200 páginas en blanco y negro mas las 4 primeras a color, que corresponden a su vez a una ilustración de la autora. Para aquellos que se quieran hacer con estos nuevos volúmenes, los tienen a la venta en librerías, tiendas de cómics y a través de la web de la editorial por 8.50€
Ese día empezó como cualquier otro, pero cuando Nene llegó a la Academia descubrió que Hanako estaba vivo y era su compañero de clase. A pesar de que se suponía que él era un fantasma, a nadie más parecía resultarle extraño.
Para descubrir que está ocurriendo, Nene y Kou se dirigen a la extraña torre que hay en el centro del colegio y que claramente no estaba allí antes; siendo alli donde descubren que s lo que realmente está sucediendo. Se encuentran dentro de un cuadro, de una pintura viviente creada por uno de los misterios del colegio, concretamente el cuarto de los siete misterios, Mei Shijima.
Esta curiosa chica que de buenas a primeras no parece nada amenazadora les explica que la única forma de salir y regresar al mundo original es matando a Amane Yugi, el nombre real de Hanako, y a Sosuke Mitsuba, quien también está en esta versión del colegio y quiere que Kou se quede.
Sin embargo, el verdadero motivo de Amane Yugi/Hanako, resulta ser encerrar a Nene en este mundo ficticio para salvarla de su suerte predestinada, por lo que tras dicho descubrimiento Nene decide volver al mundo de todas formas, y para ello tendrá que pedirle ayuda a la misma Mei para conseguirlo.
Llegan muchas emociones en estos tres tomos de Hanako-kun, porque la verdad es que la historia es una montaña rusa de sorpresas y todas nos encantan. Desde el mundo ficticio, perfecto e inmaculado que crea Mei, hasta la actitud despreocupada, aniñada y sencilla de Hanako. Todo es perfectamente imposible y esa es la razón por la que Nene sabe que no puede ser real.
Pero desde luego, lo que mas nos rompe el corazón y nos deja con ganas de nuevos tomos, es ver como Nene descubre su destino de la forma más tonta, pero eso no evita que Hanako tenga decidido, por ella y por el mismo, que la salvará aunque esta no quiera. Eso es romance y el resto tontería.
Como siempre, el arte es precioso, sus ilustraciones nos encandilan y nos quedamos con ganas de más portadas y páginas interiores a color. Menuda gozada visual es esta serie, de verdad. Además, hasta la fecha prácticamente no hemos tenido ocasión de ver a Hanako con uniforme escolar, por lo que tener dos tomos enteros con el chico vestido de calle y no de fantasma, es pura gloria.
En conclusión, tres grandes tomos con la mejor trama de la serie hasta la fecha. Suponemos que todavía nos queda un cuarto para que la historia termine de cerrar, por mucho que el tema del misterio del colegio esté casi resuelto, pero ya hay ganas de saber como se zafará de este cruel y posesivo amor la pobre Nene.