Siguiendo con los aniversarios de los personajes mas emblemáticos de DC Comics, hoy es el turno del siempre fiel escudero del caballero oscuro de Gotham, porque, aunque parezca eternamente joven, Robin también cumple años y en esta ocasión ya son 80 los que lleva a su espalda, si bien nos referimos a la posición de Robin y no al personaje como tal, interpretado por múltiples y muy variados personajes, como veremos a continuación.
El tomo recibe el nombre, como era de esperarse, Robin: Especial 80 aniversario y ha sido realizado por un buen montón de autores entre los que encontramos a Adam Beechen, Amy Wolfram, Bruce Canwell, Chuck Dixon, Devin Grayson, James Tynion IV, Judd Winick, Marv Wolfman, Peter Tomasi, Robbie Thompson, Tim Seeley y Tom King. A nuestras manos llega gracias a ECC ediciones, quienes lo editan en formato cartoné con un interior de 168 páginas a color compuestas por una serie de historias, cada una de ellas protagonizada por una encarnación de Robin. El precio de este volumen es de 19.95€ y está a la venta desde el pasado mes de noviembre en librerías, tiendas de cómics y grandes superficies
Robin: Especial 80 aniversario
Hace casi 80 años que el mundo pudo conocer a Robin, el Chico Maravilla. Empezó siendo el jovial compañero de Batman, el contrapunto a la oscuridad que envolvía al héroe de Gotham City. De eso hace ya ocho décadas en las que Robin, el Chico Maravilla, ha tenido muchas caras, las de varios jóvenes valientes que se han colocado el antifaz para combatir el mal en las calles de su ciudad.
Este volumen rinde un merecido homenaje a Damian Wayne el hijo biológico de Bruce, Stephanie Brown la chica con él antifaz, Tim Drake el Robin por petición, Jason Todd aquel que terminó muerto y por supuesto, también a Dick Grayson el querido trapecista, en sus diversas identidades, incluida la de nuestro agente secreto favorito.
Tantos Robins diferentes bien necesitarían un volumen por separado cada uno si quisiéramos alabar sus distinciones y logros, pero es el hecho de haber sido un Robin, de haber volado bajo el ala del murciélago, lo que los hace especiales y lo que a su vez aquí se valora, el haber sido ese héroe juvenil, ejemplo para jóvenes, rebeles con causa y sobre todo grandes compañeros.
Así pues, conseguimos ver de una forma sencilla y eficaz el recorrido del héroe en todas estas facetas que ha podido tener según la encarnación de turno, sirviendo siempre de contrapunto para Batman y adaptándose a las épocas venideras de una forma muy camaleónica, quizás no siempre acertada, pero si versátil.
Claramente, con esto encontramos todo tipo de historias, unas más cómicas, otras mas serias y todas ellas en torno a unos personajes cuyo pasado les ha hecho mejores, que siempre recordarán a su mentor con cariño o como mínimo respeto y que siempre podrán volar bajo el ala del murciélago si Gotham lo necesita. Por suerte para ellos y para todos, no es algo que pase muy a menudo, siendo Gotham lo suficientemente grande para todos.
Personalmente hecho en falta mas menciones a sus épocas doradas como sidekicks famosos, ya que por mucho que Red Hood o Red Robin tengan sus propias series, nunca triunfarán tanto como durante su época con mallas; siendo además estos grandes ejemplos de lo que el mundo de los compañeros ha cambiado, pero la verdad es que estamos escasos de estas y apenas hay unas pocas.
Pero lo que si encontramos son grandes dibujantes que han encontrado un hueco en esta recopilación para plasmar entre esas páginas a grandes héroes, ahora ya crecidos, consiguiendo diseños perfectamente reconocibles y muy carismáticos, que han durado en nuestra memoria desde entonces.
Entre ellos encontramos a Damion Scott, Dan Jurgens, Dustin Nguyen, Freddie Williams II, Javier Fernández, Jorge Jiménez, Lee Weeks, Mikel Janin, Ramon Villalobos, Scott McDaniel, Tom Grummett
En conclusión, este no es el recopilatorio que esperábamos, uno lleno de chicos jóvenes con mallas que servían de ayudante al caballero Oscuro, pero desde luego no nos ha defraudado en cuanto a contenido, porque plasma de una forma diferente pero muy amena e interesante, todo aquello que significó ser Robin para sus portadores, y el legado que han ido dejando para los que llegan después de ellos. Ahora es Damian quien tiene el manto, y si a Batman ya le cuesta ser Batman, con este Robin lo va a tener el doble de complicado y esperemos que durante mucho tiempo.
