Bueno, Bueno, Bueno... ¡Lo que
traigo este mes! Nada más y nada menos que Dungeon Universalis (o DUN), un
juego de mazmorras clásico capaz de rivalizar con el todopoderoso Gloomhaven
por la cantidad de contenido que tiene. La caja es tan voluminosa y pesada que
podría tener lunas girando alrededor suyo.
Abrimos la caja y hay muchas,
muchas cartas (más de mil) y personajes y bestiario dividido en bandas
(ladrones, hombres rata, orcos, etc…) en cartón troquelado (en torno a 200),
tableros en forma de mazmorra y tokens.
Dungeon Universalis está hecho
(durante 10 añacos) por Óscar Bribian, un escritor de género fantástico y de
terror. El juego está basado en el mundo de Arasca de su novela fantástica
Raazbal. Por tanto, tenemos un cuidado producto hecho por el mismo creador de
su novela, así que poca broma.
Dungeon Universalis
Jugadores: De 1 a 6
(recomendable 4)
Tiempo: 60-180min
Edad: 12+
Clasificación BGG: 2875 de 17854
La caja
Ilustración espectacular con
una criatura terrorífica enfrentándose a guerreros, como mandan los cánones. A nivel de tamaño, comparado con su competidor,
Gloomhaven, son igual de grandes.
Dentro encontramos varias
bandejas para guardar cartas y las miniaturas en 2D (¿Se llama así? No sé, me
lo acabo de inventar); cada bandeja se guarda sobre la otra y da para guardar
mucho cartón.
Comparado con su otro competidor, Gloomhaven, no hay mucha diferencia.
El juego
Es difícil empezar a describirlo debido a la gran cantidad de contenido que tiene, a ver que me sale...
La exploración es algo muy
visual, como no podría ser de otra manera, tiene unos tokens que se ponen en
las losetas muy acertados que indican que ahí no hay pared y que hasta que no asomes la cabeza no sabrás lo que hay,
en el momento en el que un personaje llega al token, se desvela la siguiente
parte del dungeon, normalmente en forma de pasillo: Fácil y realista. Desconozco si Gloomhaven tiene ese sistema,
no lo he jugado aún, pero, por ejemplo, otros de un estilo similar como
Imperial Assault o Blackstone Fortress no lo tienen, el mapa está desplegado en su totalidad. Punto para DUN.
El combate, por ejemplo, se
hace de forma muy sencilla… aparentemente: 2D6+habilidad de armas, si gana el
atacante hace daño, si gana el defensor, no. Hasta aquí la parte fácil: Los
encuentros son algo aleatorios, no saldrá cualquier bicho del bestiario,
limitándose a un par de facciones en función del argumento, por ejemplo, en una
partida donde unos ladrones se han aliado con unos goblins y los personajes
deber recuperar las posesiones de los aldeanos de Random village, encontraremos
como enemigos a ladrones y goblins, fácil ¿no? Cada facción tiene desde la
clase más baja en su escala social hasta el final boss de turno, así que cada
enfrentamiento da una referencia de un combatiente, para averiguarlo, deberás
buscar en el bestiario que rival es, además del equipo que lleva y coger las correspondientes
cartas de equipo para aplicarles las reglas correspondientes, no olvides las
habilidades, de eso también habrá que buscar en la caja. Eso, lo hace más lento
y difícil que cabría esperar. Imperial Assault, por ejemplo, cada enemigo tiene
su carta, con sus habilidades y su capacidad de hacer daño, sin tener que
buscar otras cartas extra. Creo que ese es el elemento que más flojea en
Dungeon Universalis. Llevado por un director de juego algo experimentado puede
ser se lleve bien, pero a mi modo de ver, es complicarse la vida en algo que se
podría haber solucionado fácilmente. Nuestro director de juego, cuando acabó,
parecía que salía de un examen de física aeroespacial avanzada.
Bestiario de ejemplo. Los del punto rojo son los jefes, los de amarillo jefecillos y los de blanco, matones |
Personajes de todo tipo arriba, abajo, cartas, muchas cartas |
El resto de tiradas, las de
habilidad, también se realiza con 2D6+habilidad y se lucha contra una tirada
prefijada: 10.
La baraja del director de
juego permite una buena cantidad de contratiempos, desde enemigos, hasta
trampas, pasando por ladrones que se llevan tu equipo (casi prefieres morir a
que se lleve tu mandoble partecraneos), el sistema de juego permite que se
juegue también sin director de juego, y ese es un gran punto a su favor.
¿Cuántos juegazos nos hemos comido con patatas porque no hemos encontrado con
quién jugarlo? Pues eso ya no pasará con DUN.
Tema personajes, hay muchos,
MUCHOS: 20 profesiones y 25 razas: Más de mil cien combinaciones. Cada raza
tiene su limitación en habilidades, donde puede llegar, por así decirlo. Algo
justo para mi gusto, puesto que en la característica principal puedes llegar al
máximo desde el mismo inicio del personaje, no obstante, las habilidades
(talentos o dotes desde el punto de vista D&D) sí que se adquieren con
experiencia y sí le dan el toque que merece cada profesión, hay 120, así que
consideraremos que se podrá personalizar el personaje.
Una vez hecho al personaje,
toca equiparlo… ¡y madre mía si puedes equiparlo! Hay todo tipo de armaduras,
escudos, armas cuerpo a cuerpo y de proyectiles, cada una con su peculiaridad.
Además, el equipo tiene reglas fáciles y lógicas, algo que es de agradecer.
El juego trae un libro y mapa
de campaña con 12 partidas además de escenarios simples (20 partidas simples
más otro libro solo para kickstarters). Según que versión de Kickstarter sea,
hay otro libro de bestiario hecho además del primero.
Respecto a las losetas creo
que anda la cosa por 35 habitaciones más 110 conexiones como pasillos,
distribuidores y escaleras, un total de 145 (Imperial Assault, por ejemplo,
tiene 59).
Una cosa que cabe destacar es
el hecho de la gran cantidad de contenido que tiene la caja. Cualquier empresa
de las “majors” que conocemos, pondría una tercera parte del contenido y el
resto lo vendería aparte por el mismo precio o más. Se nota que el autor le ha
dedicado gran esfuerzo y cariño a su producto. Pocas veces, que digo pocas,
NUNCA encontrarás tanto contenido en una caja por el precio que tiene hasta que llegó Dungeon Universalis.
El nivel de acabados es
bastante bueno, las losetas cumplen su función y hay de todo: desde el típico
dungeon de piedra, hasta césped o madera, pasando por barcos y entornos
acuáticos. Cierto, no hay miniaturas, pero seria imposible tener miniatura de
todo. Prima más tener muchos personajes que tener pocos pero muy bonitos. Podríamos
decir que Dungeon Universalis es el ejército de goblins e Imperial Assault, Altos elfos.
Eso implica que necesitas una mesa grande para poder ir poniendo el tablero que se irá descubriendo además de espacio para jugadores y sus personajes y espacios auxiliares para tokens, enemigos retirados o a la espera de entrar y mil y una cosas más.
En esta mesa jugamos habitualmente a warhammer 40,000 |
Lo demás
Bueno, el juego tiene menos de
un año en el mercado y ya hay partidas hechas por fans, traducciones para otros
idiomas, guías de referencia y otras movidas. Un éxito en toda regla. De aquí a unos años, estoy seguro que el trabajo de los fans será digno de ver.
Valoración
Lo bueno:
-
Una cantidad de material brutal.
-
Casi se podría considerar que hay varias
expansiones en la misma caja.
-
La personalización de los personajes
Lo malo:
-
El director de juego debe manejar demasiada
información en algunas ocasiones.
-
A los personajes les falta algo de progresión.
Y ya, mira que he intentado buscarle
más pegas, por aquello de compensar, pero si no hay, no hay.
En BoardGameGeek lo valoran con
un 9,5 sobre 10 y opino exactamente igual, es un juego excelente pero no es
perfecto. Eso sí, se nota que hay mucha dedicación y mucha afición por parte del creador, donde ha primado más ofrecer un producto de calidad que obtener suculentos beneficios vendiendo cualquier juego pasable y luego ofrecer expansiones a precio de oro.
Valoración final
Originalidad: 4. Los dungeon
crowler son la vainilla de los juegos de mesa.
Rejugabilidad: 10. Jugar una
campaña es gloria y eso implica rejugabilidad.
Aleatoriedad: 6. Es un juego
de dados, así que siempre implica un poco de aleatoriedad, pero es un juego con
bastante carga de estrategia.
Jugabilidad 2 jugadores: 8. Se
juega muy bien con 2 jugadores, algo más difícil que con 4, pero se puede
arreglar llevando dos personajes.
Jugabilidad 3 jugadores o más:
10. Lo ideal es 4, es la forma más dinámica de jugar, con más de 4 se vuelve
algo larga la partida y el tiempo entre turnos.
Jugabilidad muggle: 5. Todo el
mundo sabe lo que es Dragones y Mazmorras, podría colar en el mundo muggle.
Calidad acabados: 10. No trae
miniaturas, pero la cantidad de personajes en cartón que hay lo suple.
Facilidad: 7. A los jugadores
no les costará pillar la dinámica del juego, pero el director de juego lo habrá
pasado mal en algunas partes de la partida.
Preparación (tiempo): 4. Pues
se tarda un poco en prepararlo todo, ya no digamos si hay que diseñar
personajes.
Expansión: 5. Oficial no hay
mucho, pero ha salido hace poco y viendo el éxito está claro que sacarán más
expansiones.
Comunidad: 8. Muy activa y muy
flipada. Era el juego que estaban esperando.