Planeta Cómic lanzaba este mes de enero el tercer volumen de la que fue su primera licencia Dragon Quest, la serie manga Dragon Quest: Emblem of Roto, que continuando con su espectacular edición kanzenban.
La edición que nos trae Planeta constará de un total de 15 entregas que recopilarán los 21 tomos originales. Este tercer tomo cuenta de 288 páginas, algunas de ellas a color, en un formato de 14,8x21 cm.
Un gran manga que nos llega y que empieza a abrir la puerta de una posibilidad a que Dragon Quest: Dai no Daibouken (Las Aventuras de Fly) lleguen a publicarse íntegramente en nuestro territorio.
Continúa en este volumen el periplo de Arus, uno de los descendientes de el gran héroe Roto que derrotó al malvado Rey Demonio hace 100 años, por convertirse en el héroe que todos esperan de él a medida que su grupo de compañeros sigue creciendo.
Ahora, en compañía de la actual heredera del Maestro del Puño, la joven artista marcial Yao, continúa su camino por reunirse con los otros dos herederos de los grandes héroes, un camino que les llevó de nuevo al castillo de Karmen, dónde nació nuestro protagonista.
Pero por desgracia para ellos, en el castillo encuentran a un terrible enemigo: Báramos, el rey demoníaco que reinaba sobre la faz de la tierra en el pasado, a quín ha resucitado el malvado Gorgona, rey del averno y uno de los cuatro generales de Imajin.
La aparición de este antiguo enemigo hará llegar a Arus a niveles desconocidos hasta ahora, ofreciéndonos en este tomo una impresionante batalla que no solo es el mayor reto para nuestros héroes hasta ahora, si no la más espectacular y épica que nos ha ofrecido esta serie hasta ahora.
Arus deberá demostrar ante Báramos y Gorgona que realmente es el heredero de la sangre de Roto, abandonando por primera vez al niño para convertirse en el héroe prometido.
Tras esta impresionante batalla, los pasos de nuestros compañeros continuarán para llegar hasta el pueblo de Tedon, atravesando para ello unas complicadas mazmorras que los llevará a conocer a un original compañero: Porón el legendario callejero, un joven disfrazado de payaso y acompañado de algunos monstruos domesticados cuya actitud solo les acarreará más y más problemas a los héroes.
Y mientras nuestros amigos continúan su búsqueda para juntar a todos los maestros, el mal sigue haciendo de las suyas, en esta ocasión preparando un ataque que terminará con ellos en su viaje a través del océano.
¿El plan de Imajin? Levantar el sello que puso en un pasado remoto a Leviatán, el rey de los mares, convirtiéndolo en una plaga viviente que todo lo devora, y así terminar de una vez por todas con esta creciente amenaza que está resultando el heredero de roto...
Ahora, en compañía de la actual heredera del Maestro del Puño, la joven artista marcial Yao, continúa su camino por reunirse con los otros dos herederos de los grandes héroes, un camino que les llevó de nuevo al castillo de Karmen, dónde nació nuestro protagonista.
Pero por desgracia para ellos, en el castillo encuentran a un terrible enemigo: Báramos, el rey demoníaco que reinaba sobre la faz de la tierra en el pasado, a quín ha resucitado el malvado Gorgona, rey del averno y uno de los cuatro generales de Imajin.
La aparición de este antiguo enemigo hará llegar a Arus a niveles desconocidos hasta ahora, ofreciéndonos en este tomo una impresionante batalla que no solo es el mayor reto para nuestros héroes hasta ahora, si no la más espectacular y épica que nos ha ofrecido esta serie hasta ahora.
Arus deberá demostrar ante Báramos y Gorgona que realmente es el heredero de la sangre de Roto, abandonando por primera vez al niño para convertirse en el héroe prometido.
Tras esta impresionante batalla, los pasos de nuestros compañeros continuarán para llegar hasta el pueblo de Tedon, atravesando para ello unas complicadas mazmorras que los llevará a conocer a un original compañero: Porón el legendario callejero, un joven disfrazado de payaso y acompañado de algunos monstruos domesticados cuya actitud solo les acarreará más y más problemas a los héroes.
Y mientras nuestros amigos continúan su búsqueda para juntar a todos los maestros, el mal sigue haciendo de las suyas, en esta ocasión preparando un ataque que terminará con ellos en su viaje a través del océano.
¿El plan de Imajin? Levantar el sello que puso en un pasado remoto a Leviatán, el rey de los mares, convirtiéndolo en una plaga viviente que todo lo devora, y así terminar de una vez por todas con esta creciente amenaza que está resultando el heredero de roto...
Así continúa este shonen clásico, contando con un arte que inevitablemente nos recuerda claramente a Sensei Toriyama, aunque en este segundo tomo podemos ver como Kamui Fujiwara va sintiéndose cada vez más cómodo en las viñetas, ofreciendo una notable mejora artística.