Un día mas, aquí estamos de nuevo con otra de nuestras reviews de series manga, aunque en esta ocasión nos quedamos con el sentimiento agridulce al tener que despedirnos de una de nuestras favoritas, Ten Count de Rihito Takarai, que finaliza con 6 tomos gracias a la editorial Ivrea.
Como siempre la edición que nos presenta la editorial mantiene el mismo aspecto que la original japonesa, presentándonos un volumen en rústica con sobrecubiertas con un tamaño de 13x18 cm en cuyo interior encontraremos 200 páginas en blanco y negro.
Para todos aquellos que quieran conseguir este último número, se encuentra a la venta en librerías y tiendas de cómics desde el pasado 6 de septiembre por 8.50€
Igual que hacemos en cada review de esta serie, os recordamos que este manga es de género Yaoi y para mayores de 18 años dado su alto contenido sexual. Así que estamos todos avisados.
Ten Count #6:

Sin embargo por mucho que ambos confíen en su pareja siempre habrá pequeñas heridas abiertas que sangrarán al recordarla. En el caso de Shirotani se reencontrará con la que hace tiempo fue la amante de su padre, culpable de que su enfermedad diera comienzo. En el caso de Kurose podrá ver como aquel que le llevó a interesarse por la rama de la medicina en la que se encuentra, ha superado sus fobias y ha logrado salir adelante.
Ambos podrán seguir con su vida y mejorar como persona y como pareja y aunque sean conscientes de que el rubio todavía no ha superado su enfermedad por completo, llegará un punto en que superarla será lo de menos, ya que ambos permanecerán juntos de ahora en adelante, ayudándose mutuamente cada vez que lo necesiten.

En el caso de Kurose poco a cambiado desde el inicio de la serie. Sigue manteniéndose alejado del resto de la gente y con una actitud excesivamente seria, pero ha decidido aumentar sus estudios y sincerarse con su pareja sobre el que se sintió atraído hacia el en un primer momento. Nada relevante ni extraño, simplemente una forma de demostrarse mas abierto.
Por lo tanto el manga concluye como toca, con una buena dosis de sexo, sinceridad entre los personajes y logrando dejar atrás sus problemas, pero mirándolos un poco de reojo, bastante más humano y realista que en otras historias.

Shirotani se mantiene como siempre, un personaje de lo mas expresivo y algo exagerado en sus reacciones, pero muy adorable y mas cuando está teniendo su ración de guarrerias con el ahora novio.
En conclusión, nos encontramos con un final muy a nuestro gusto. Los personajes tienen finalmente una relación con la que se sienten a gusto y han mejorado gracias a su compañero, han dejado los problemas serios atrás y ahora tendrán que enfrentarse a nuevos. Un gran final para un gran manga.