Manga: Reseña de "Ataque a los Titanes" vol.24 de Hajime Isayama - Norma Editorial

Este mes de julio, las novedades de Norma Editorial nos traen el esperado volumen 24 de Ataque a los Titanes (aka Shingeki no Kyojin 進撃の巨人), continuando con la historia de uno de los manga shonen / seinen más populares de la actualidad japonesa.

Reseña de "Ataque a los Titanes" vol.24 de Hajime Isayama - Norma Editorial

Hasta ahora Shingeki no Kyojin (進撃の巨人), obra de Hajime Isayama, se publica en la revista japonesa Bessatsu Shōnen Magazine desde septiembre del 2009, cuenta con 25 tomos recopilatorios, por lo que en estos momentos nos encontramos técnicamente al ritmo de publicación japonés.

Hace varios siglos, los humanos casi fueron aniquilados por los titanes. Los titanes son unos series enormes, sin mucha inteligencia y que devoran hombres por puro placer.

A pesar de ello, un grupo reducido de humanos pudo sobrevivir en una ciudad protegida tras altos muros como defensa frente a los titanes.

Ahora, en la actualidad, hace más de 100 años que nadie ve a un titán. Elen y su hermana adoptiva Mikasa son testigos de algo terrorífico: un super-titán ha aparecido frenta a la ciudad y está destruyendo sus muros, consiguiendo que otros titanes entren en la ciudad y empiecen a matar humanos de nuevo...

Si no estáis al día con el manga, ¡recordad que podéis llevaros algún Spoilers! si continuáis a partir de aquí... ¡avisados quedáis!

Reseña de "Ataque a los Titanes" vol.24 de Hajime Isayama - Norma Editorial

Reseña de "Ataque a los Titanes" vol.24 de Hajime Isayama - Norma Editorial
Ataque a los Titanes vol.24
Tras haberse revelado toda la verdad que se ocultaba en el mundo exterior, sobre la verdad tras las murallas y el verdadero origen de los titanes, así como sobre el pueblo de Marley, quienes en su momento lograron poner en jaque al pueblo de Eldia y al rey Fritz, quién se encerró tras las tres murallas que ahora conocemos cien años atrás, ubicadas en Isla Paradise, en este volumen pasamos a encontrar como protagonistas a Reiner, Annie y Bertolt en lo que fue el inicio de nuestra historia.

Efectivamente, el mangaka nos ofrece una nueva perspectiva de lo ocurrido durante la época en la que los titanes tomaron el distrito de Trost, arruinando por completo la vida de Eren, mostrando la dura vida de unos niños eldianos bajo el régimen totalitario de los marleyanos, quienes los utilizan como arma de destrucción masiva en la guerra y a los que se les adjudicó una misión que les venía demasiado grande.

Reseña de "Ataque a los Titanes" vol.24 de Hajime Isayama - Norma Editorial

Reseña de "Ataque a los Titanes" vol.24 de Hajime Isayama - Norma Editorial
La misión de recuperar al Titán de la familia real se arruinó para ellos en el momento en que el cuarto miembro de su equipo y líder, el titán mandíbula, resultó fortuitamente devorado por Ymir, cambiando por completo el curso de los acontecimientos.

Desesperados, los tres miembros restante, bajo el mando coaccionado de un confuso Reiner, deciden asaltar la muralla de Paradis y, en el cáos subsecuente, infiltrarse entre los civiles hasta dar con el rey.

Por supuesto, nada saldría como ellos esperaban, convirtiéndose en una misión que se extendería a lo largo de los años, hasta desembocar en los acontecimientos que terminamos leyendo en tomos anteriores.

Tras este relato, volvemos al presente para presenciar la llegada de la familia Tybur, la cual desempeñó un importante papel en el pasado, durante la última guerra contra los titanes de Ymir.

Reseña de "Ataque a los Titanes" vol.24 de Hajime Isayama - Norma Editorial
Una familia que, además, posee en su clan al último de los nueve grandes titanes, el Titán Martillo de Guerra. La visita de esta familia a la capital no es en absoluto casual... Ya que su líder actual, y la persona que posee todo el poder del país de Marley en las sombras, está decidido a poner punto y final a la precaria situación actual de su país con unas declaraciones que cambiarán el transcurso de la historia.

Isayama nos ofrece un tomo que le da una completa vuelta de tuerca a todo lo que llevamos viendo desde el primer número al plasmar la crueldad de la situación de un pueblo oprimido y sin salida que da lo mejor de si mismo cada día como un buen perro que menea el rabo ante su amo.

Una situación a la que sumamos el estado mental de Reiner Braun, quién claramente ha sido superado por todo lo que le ha ocurrido durante su vida.

El trazo de Isayama sigue siendo bastante incorrecto, aunque la dinámica de sus escenas de acción mejore en cada nuevo volumen.. una mejora de la que esperamos ver resultados pronto, ya que de momento no hacen justicia a la calidad de su historia.