Hoy traemos de nuevo una review doble de uno de nuestros mangas de cabecera, obra del increíble autor Inio Asano, nada más y nada menos que Buenas noches Punpun (おやすみプンプン) con los volúmenes #10 y #11, los cuales fueron lanzados los pasados meses de septiembre y octubre respectivamente gracias a Norma Editorial.
La edición, que se mantiene con el mismo formato que la japonesa, cuenta en esta ocasión con dos portadas realizadas en colores metalizados, siendo la primera en plateado y la segunda en un tono más dorado. Ambos volúmenes han sido realizados con un formato de rústica con sobrecubierta y un tamaño 13×18,2 cm contando con un interior formado por 224 págs todas ellas en blanco y negro. Los dos volúmenes han tenido un precio de 8,50€ cada uno lanzándose con periodicidad mensual.
En esta ocasión recordamos que esta será una de las últimas reseñas del manga,
ya que termina el próximo mes de noviembre con el lanzamiento de los tomos #12 y #13 por parte de Norma Editorial.
Inio Asano (浅野 いにお) puede ser desconocido para muchos pero a otros su dibujos puede que noles parezcan demasiado lejanos y no es de extrañar ya que además de una primera edición de Ponent Mon de su Nijigahara Holograph (虹ヶ原ホログラフ) y posteriormente recuperada Milky Way cosechando grandes éxitos, en el mercado Español también encontramos otras de sus obras como La chica a la orilla del mar (うみべの女の子 Umibe no Onna no Ko), Solanin (ソラニン), la cual contó también con una versión cinematográfica en abril de 2010 protagonizado por la actriz Aoi Miyazaki. Su siguiente obra fue la que hoy venimos a reseñar, Oyasumi Punpun(おやすみプンプン), novedad de Norma editorial junto con de Dead Dead Demons Dededede Destruction, estando esta última abierta todavía y siendo también publicada por la misma editorial.
Buenas noches, Punpun #12 y #13:
Tras reencontrarse en la autoescuela Punpun y Aiko quedan un par de ocasiones, ella le cuenta que ahora es modelo y busca un trabajo dentro de la industria de la moda, que tiene una pareja más mayor y que la quiere. Punpun le explica que él es un estudiante universitario y que está en una mala racha con su novia. Todo es tan anodino que Punpun se siente decepcionado e incluso cuando queda con otras chicas se da cuenta de que lo que hace es un error, que realmente esta vida anodina no va con él, todo por culpa de Aiko, ella es quien le ha convertido en un monstruo porque sus problemas vienen a raíz de ella.
Por eso, cuando vuelve a quedar con ella, decide que la destrozará, que la quiere despreciar y en su fuero interno, quiere que ella le desprecie también. Pero al final es incapaz, no puede destruirla, no puede hacer nada, ella le ha ganado y se siente totalmente despreciable.
En su vagar perpetuo buscando una forma de seguir adelante acaba en la casa de la única persona que realmente confió en él, en casa de Sachi, quien tras dejar de hablar y trabajar con Punpun su editor le aceptó el manga cliché que comenzó a escribir. Parece ser que su vida es mejor sin el pollito extraño en ella, pero él eso no lo sabe, así que vuelve a su casa buscando consuelo, aunque a quien encuentra es a su exmarido.
Tras una charla los tres juntos y que el exmarido de Sachi decida desaparecer de la vida de esta de nuevo, ella le cuenta a Punpun que tras un momento de soledad volvió a acostarse con su ex, quedándose ahora embarazada, por lo que, buscando ella también apoyo le pregunta a Punpun si la acompañará a la clínica de aborto, a lo que él responde que sí.
Pero parece que las cosas no van a ser como ninguno de los tres piensa, ya que cuando Punpun y Aiko se reencuentran en la autoescuela deciden ser sinceros el uno con el otro, Punpun confiesa que su vida es una mentira, que es un asco de persona pero que se alegra de que Aiko tenga una vida mejor, a lo que ella responde que la suya también es mentira, ninguno de los dos tiene la vida de ensueño, él es un miserable, a ella su madre la maltrata. Pero ambos siguen sintiendo demasiadas cosas el uno por el otro como para mantenerse alejados y obviar esa conexión.
Así Punpun vuelve a aferrarse a Aiko, y ella vuelve a maldecirle a él con una oscuridad interior que le destruye por dentro y por fuera, hace que se olvide de Sachi, quien realmente le necesita, y profundiza aún más en el torbellino que es la vida de los dos, empezando una relación autodestructiva.
El primer paso es irse juntos a algún lugar remoto, aunque para ello primero tienen que hablar con la madre de Aiko, quien revela que realmente es una miseria más para la sociedad, una persona a la que nadie llorará si desaparece y que Punpun y Aiko quitarán de en medio sin demasiados escrúpulos.
Solucionado ese problema ambos serán conscientes de su unión, de la cual ahora ya no hay marcha atrás y la que les va destruyendo poco a poco.
Aiko se volverá totalmente dependiente de Punpun, quien irá viendo crecer su ego poco a poco, adoptándose como lo que él cree que es, un demonio, un ser despreciable, ya no hay más inocencia en la vida de Punpun, ahora solo está el y su demonio interno.
Y mientras la vida de Punpun va poco a poco pareciéndose más a una espiral sin retorno de oscuridad, el punto negro que auguraba Toishiki, el supuesto salvador de la ciudad autodenominado Pegasus, va expandiéndose más y más, la oscuridad va llegando al mundo de una forma que son incapaces de detener, aparentemente unida a la caída en declive de Punpun y su seguidor más cercano, su amigo, planea destruirle.
Aprovechando que en el círculo cercano de Pegasus se encuentra Shimizu, el amigo de la infancia de Punpun, quien según dice ve al dios Caca, este seguidor de Pegasus utilizará a Ko, el otro amigo de la infancia de Punpun y mejor amigo de Shimizu, para destruirle y que por lo tanto no pueda ni desmentir su profecía del fin del mundo, ni cumplirla. Será el Nostradamus del nuevo mundo. El mártir que murió por la causa
Crítica:
Ha falta de dos tomos para el final de Punpun ya podemos ver el camino tan oscuro que le depara al personaje, con una trama mucho más compleja de lo que pensábamos al principio. Sin embargo, es gracias a estos dos volúmenes previos al final que podemos ver la inflexión real de Punpun, pasando de una apariencia a otra con un simple movimiento o gesto y revelando su verdadera naturaleza.
Veamos pues algunos de los signos inequívocos del final de nuestro protagonista.
Por un lado, quizás el más ajeno o distante a la realidad, nos encontramos a Pegasus profetizando el fin del mundo como un punto negro que se lo tragará todo. Este derrumbe de la humanidad vendrá dado con una forma sencilla, un daruma de ojos saltones que caerá del cielo y nos destruirá a todos.
Obviamente este es el Daruma que la actual mujer de su tío le regalo tras tener relaciones sexuales con el pobre adolescente, y que el mismo punpun lanzó al cielo enrabiado con la humanidad, con esa mujer y consigo mismo. ¿Fue ese el momento en el que el mundo de Punpun se fue realmente al suelo, o simplemente Asano utiliza el daruma como simple representación física del declive, el cual ya ha comenzado a realizarse? Personalmente me parece más la primera opción que la segunda, pero tendremos que esperar para verlo.
Otro símbolo inequívoco del rumbo que está tomando Punpun, es su marcha de la ciudad, dejando a Sachi esperando, tal y como dejó en su momento a Aiko. Contamos incluso con la misma escena de las dos mujeres, una más niña y una más adulta, llorando mientras le esperan.
Personalmente Sachi me parecía el mejor personaje de esta historia. Una mujer hecha a sí misma, que duda y teme como cualquier otra persona pero que avanza en su camino con pie firme. Una pena que sus sentimientos queden siempre en el fondo del pozo en el que los deja, incapaz de decirle realmente a Punpun que lo necesita.
Y finalmente, contamos con el personaje de Aiko como la caída final de Punpun. Es el retorno de este personaje el que realmente cambia a Punpun de ser un sencillo pollito, representación de la simplicidad e inocencia que tiene, a ser un monstruo de lo más variado.
En un principio fue un ser con varios ojos, incapaz de apartar la mirada de su presa, Aiko, a quien quería destruir, humillar y odiar, sin embargo, ese camino no fue como el esperaba. Punpun era demasiado bueno realmente, necesitaba más confianza en sí mismo y todavía no la había conseguido, por lo que ese ser desapareció tan pronto como había llegado.
Pero la nueva forma de Punpun no tiene pinta de marcharse. Esta nueva apariencia, creada al estar junto a Aiko, al ver como ella realmente le necesita y no al revés, es lo que le ha convertido en lo que es actualmente. Ahora Aiko necesita a Punpun en su vida, porque es lo que siempre había estado buscando, ese príncipe azul que se la llevara del castillo de la bruja, su madre. Ese hombre que solo tuviera ojos para ella. Ese es Punpun, con quien vive ahora un sueño que realmente es una pesadilla.
Pero para nuestro protagonista esta apariencia no es la de un príncipe, si no la de un monstruo que se cree superior al resto, mejor que Aiko, mejor que el resto, porque para él, el mundo está lleno de monstruos y se ha convertido en uno de ellos
Arte:
En cuanto al arte, volvemos a encontrarnos con escenas realmente impactantes como el incidente con la madre de Aiko, o con puestas de sol y anocheceres que son dignos de un paisajista. Se nota que Asano ha puesto todo su empeño en este manga, resultando uno de los mejores hasta la fecha.
Como elementos llamativos encontramos una gran cantidad de escenas sexuales, no tan explicitas como insinuadas, véase una mano agarrando un pecho o sombras a contraluz de una pareja teniendo sexo. Resulta llamativo porque hasta hace poco estas escenas apenas habían tenido lugar a lo largo de la historia, pero ahora que Punpun ha cambiado su actitud se ve rodeado de mucha más sexualidad sin necesidad de estar reprimido.
Además, después de algunos de los capítulos del manga encontramos ilustraciones de lo más bonitas e interesantes, como la de Aiko y Sachi, ambas con vestidos aparentemente claros y abrazadas. Los dos amores de Punpun en una actitud tan amistosa parece casi imposible.
Conclusión:
Para terminar, simplemente asegurar que estos dos volúmenes son de los más interesantes de la historia. Se nota que esta se acerca a su punto final y no podemos más que leer y leer esperando, sabiendo casi de antemano que el final de este personaje no va a ser un camino de rosas.
Desde luego, Buenas noches Punpun es hasta hora el mejor manga escrito por Asano, una autentica obra de arte que te hará reflexionar sobre la vida y los pasos que das en esta.