Cómic: Reseña de "WINDROSE" vol.1 de Studio Kôsen [Ediciones Babylon].

A finales de 2015 y de la mano de Ediciones Babylon nos llegaba la nueva obra de corte manga de las de sobra conocidas Studio Kôsen: WINDROSE, que vuelve a darnos una dosis de las autoras tras la finalización de Lettêra.

Guionizada por Diana y dibujada por Aurora, Windrose (aka Rosa de los Vientos) inició su andadura en julio de 2015 bajo el sello independiente de habla inglesa Chromatic Press, publicándose al más puro estilo nipón en capítulos de 22 páginas de forma mensual en su revista digital Sparkler Monthly.

Como no podía ser de otra forma, dichos capítulos tras su exitoso paso por la plataforma digital ha sido recopilado en un muy adecuado formato tankoubon que Ediciones Babylon nos brinda en lengua castellana, abrazando los seis primeros capítulos a lo largo de 152 páginas en blanco y negro en un rústica con sobrecubierta de 13x19 centímetros, eso sí, en sentido de lectura occidental.

Un tomo manga con todas las de la ley.

Y con esto, vamos al lío.

La historia nos traslada a la Barcelona del siglo XVIII, época en la que los monarcas europeos se encuentran en una lucha de intereses para extender su control de los océanos y las tierras por conquistar.

Allí conocemos a la joven Danielle, descendiente de una familia de buena casta que vive bajo la disciplina inclemente de su madre mientras añora a su amado padre; un hombre aventurero cuyos objetivos han perdido por completo el interés y la admiración de su esposa.

Danielle, harta de la vida entre algodones y las exigencias sociales a la que le arroja su madre, finalmente recibe una carta de su padre junto a un misterioso astrolabio, declarando en la misma que probablemente él ya haya encontrado el final de sus días para este momento. Preocupada por su progenitor, Danielle decide escapar de Barcelona hacia el único lugar del que tiene una pista, la lejana Marsella.

Su inesperado viaje por mar enmascarado tras el falso motivo de reunirse con su prometido se ve truncado por un ataque pirata, en el que la muchacha salva su vida gracias a la intervención de una pareja de osados y habilidosos guerreros que salvan su vida y la seguridad del propio Astrolabio: los hermanos Angeline y Leon.

Junto a ellos, Danielle comenzará definitivamente su periplo, en el que buscará a su padre mientras intenta arrojar algo de luz sobre el ansiado astrolabio, que introducirá en una espiral de traiciones y confabulaciones que llegan desde la puerta de su casa hasta la corte de los mismísimos Luis XIV y Carlos III.

Con esta historia las Kôsen se arrojan de cabeza al género de capa y espada, una aventura en todos los términos en los que encontramos de todo, desde mosqueteros a piratas, pasando por codiciosos reyes y sensuales ladronas de guante blanco, todo por supuesto sin dejar de lado al típico galán misterioso de turno, que en este caso le toca al personaje de Leon.

Diana toma estos y un buen montón de buenos ingredientes para aderezar su historia, asentando en este primer tomo el entorno y las bases necesarias para establecer todas las relaciones entre sus personajes, dejando claras las intenciones de los tres protagonistas, desde el ya mencionado Leon, la ambiciosa Angeline y la llorona de Danielle: todos unos estereotipos de este tipo de historias que seguramente iremos viendo como se desarrollan en mayor profundidad en volúmenes posteriores, y que por el momento son capaces de despertar todo nuestro interés en lo que está por venir

Por su parte, el dibujo de Aurora continúa evolucionando, dejándonos unos primeros planos preciosos con su estilo de trazo fino, así como unas escenas de acción cada vez más dinámicas, aunque aun se puede apreciar en algunas viñetas que este tipo de situaciones aun necesitan un poco más de madurez, quedando algo rígidas, lo cual puede llegar a entorpecer la narrativa secuencial de las batallas.

Un pequeño pormenor que sin embargo podemos apreciar como mejora cada nueva página que leemos, y que solo es un detalle ínfimo si tenemos en cuenta que WINDROSE es de la primera a la última página, una aventura emocionante que nos deja con ganas de echarle nuestras garras a su segundo tomo.