Cómic: Reseña de "Confesiones a Alá" de Marie Avril y Eddy Simon [Ponent Mon].

Este mes de abril de 2016, la editorial Ponent Mon lanzaba al mercado una novela gráfica de las que revolucionan la percepción del lector a un mundo que, habitualmente, nos resulta totalmente ajeno.

Se trata de Confesiones a Alá, obra que traducía al noveno arte la novela del mismo nombre  - Confidences à Allah de Saphia Azzeddine - de la mano de Marie Avril, contando con el fantástico arte de Eddy Simon.

Contando con traducción al castellano de Sergio España, nos encontramos ante un álbum idéntico al que publicó Futuropolis en tierras francesas en 2015, en un precioso cartoné de 216 x 286 mm contando en su interior con 88 páginas a todo color.

Alá, si hubiera nacido en una buena familia, en una buena ciudad, si hubiera tenido una buena educación, sin duda habría sido una buena niña.

Pero nunca ha sido así.
Me reconocerás que he estado puteada desde el principio.

La historia se nos presenta como un relato en primera persona de Jbara Aït Gounbra, una bella joven musulmana de 16 años que habita en la zona montañosa de Magreb en una numerosa familia dedicada al pastoreo de ovejas, bajo las órdenes de su detestado y miserable padre.

Pero en su desesperado y oprimido día a día, Jbara cuenta con una ventaja / desventaja de la que no todos disponen: una belleza que la hace sobresalir entre los demás, y que en un mundo regido por los hombres, significa que puede intercambiar su cuerpo por todo tipo de vienes.

La historia de Jbara comienza intercambiando sexo por golosinas y sus queridos yogures Raíbi Jamila, pero cuando queda involuntariamente embarazada, es expulsada de su familia y termina mudándose en soledad a la ciudad, dónde comienza a vivir de forma independiente como limpiadora y, más a menudo de lo deseado, como prostituta.

Poco, a poco, estas prácticas la llevan a una familia acomodada, dónde la muchacha comienza ha hacer la prostitución una práctica mucho más habitual, convirtiéndola poco a poco en un oficio de necesidad a uno que le permita los lujos.

De esta manera se nos presenta la forzada evolución de Jbara, una mujer que pasa toda su vida acompañada únicamente de su fe ciega por su dios, a quién convierte en su único confidente... y ante el que siempre se presenta como una víctima de la opresión cultural bajo la que se ha visto obligada desde su nacimiento.

La vida de _Jbara nos expone la triste miseria a la que se ven arrojadas muchas mujeres, un  testimonio en primera persona que nos muestra una realidad a la que pocos se atreven mirar de frente.

La historia ha sido transformada en novela gráfica gracias a Eddy Simon y Marie Avril, quienes han traducido a viñetas todo el pesar femenino que ya ofrecía la obra, haciendo gala de una habilidad narrativa sublime, en la que acompañamos a Jbara a lo largo de su vida acunados por un arte que únicamente podemos tildar como precioso.

Sin duda, una historia triste y dramática que no tiene miedo de ejercer de den uncia social contra la injusticia a la que se ven sometidas tantas mujeres, y que Ponent Mon nos permite disfrutar como nunca habíamos podido hasta ahora.