Pocos autores hay que levanten tantas pasiones como H.P. Lovecraft o Arthur Conan Doyle, sin embargo, otros vuelven a tener su momento de fama tras pasar años en el olvido, como le ha sucedido a William Chambers y su Rey Amarillo. Esto ha sido posible gracias a la aclamada serie de televisión True Detective la cual protagonizan Matthew McConaughey y Woody Harrelson haciendo que esta historia haya vuelto a resurgir de entre las sombras en la pequeña pantalla y en las librerías.
Hoy concretamente queremos hablar de la adaptación a novela gráfica que Ian Culbard ha realizado con las 4 historias más influyentes e importantes del Rey Amarillo, sujeto que a la vez da título al volumen que nos trae Norma editorial.
En este volumen realizado en Cartoné y que cuenta con un tamaño de 17x24cm encontramos cuatro historias y un total de 144 páginas a color que nos llevarán más allá de Carcosa y las Híades ofreciéndonos un nuevo punto de vista de una historia tan clásica por el precio de 23€.
Recordemos pues, que en su origen El rey Amarillo era una recopilación de historias interconectadas con el formato de obra teatral y realizadas por Robert W. Chambers a finales del s.XIX. Originalmente se publicaron múltiples de estas historias quedando las 4 que se traen en este caso recopiladas como “El rey amarillo” titulándose cada una: “El reparador de reputaciones”, “La máscara”, “El signo amarillo” y “En la corte del dragón”
Conocidos los orígenes del volumen y la reedicion que ha hecho norma, conozcamos pues a sus autores:
Robert William Chambers: escritor de literatura de terror y misterio. Nació en mayo de 1865 en Brooklyn y estudió bellas artes en París consiguiendo que en 1893 sus principales ilustraciones aparecieran en las revistas de actualidad más famosas del momento. Su obra más celebre fue “The
King in yellow” (El rey amarillo) que publicó en 1895, aunque pasado un tiempo escribió muchas otras obras, desde novelas históricas, hasta rosas ambientados en la alta sociedad de Nueva York.
Murió el 16 de diciembre de 1933, a los sesenta y ocho años, tras ser operado de una dolencia intestinal.
Ian Culbard: guionista, dibujante, entintador y colorista de cómics publicando bajo el nombre INJ Culbard. Nacido en Greenwich y cuenta con orígenes ingleses y polacos. Comenzó desde muy joven a estudiar arte en varias escuelas donde, aunque le enseñaron técnicas de dibujo clásico, ahora trabaja con tableta gráfica. De joven descubrió la novela Estudio en Escarlata y al autor HP Lovecraft, convirtiéndose en un Fan y siendo estos su máximo referente, pero no fuñe hasta 2008 cuando fue contratado por Ian Edginton para dibujar las historias de Arthur Conan Doyle
En 2011, recibió el Premio a la Mejor adaptación de novela grafica o comic en el género de fantasía gracias s “Las montañas de la locura” de HP Lovecraft.
El rey amarillo:
Como hemos mencionado antes este volumen cuenta con varias historias cortas por lo que las enumeraremos y haremos una pequeña sinopsis sobre cada una.Encabezando el volumen encontramos “El Reparador de Reputaciones” una historia donde el lector tiene que aprender a leer entre las frases de los personajes y adivinar la paranoia y el egoísmo de cada uno de ellos. El protagonista en esta ocasión es Sr. Hildred Castaigne, un pobre hombre recuperándose de una conmoción cerebral quien vive en una aparente utopía imaginada por el mismo Chambers. En su historia Castaigne se encuentra claramente influenciado por el Rey Amarillo y cuenta con un plan para hacerse con el trono del imperio gracias al llamado Reparador de reputaciones un hombrecillo que guarda los secretos de la gente.
La segunda historia es “La máscara”, quizás una de las más bonitas y extrañas en donde la ciencia, el amor y el arte se unen. En esta ocasión los protagonistas son tres amigos, la pareja formada por Boris y Genevieve y su amigo Alec. Pese a que el narrador del cuento es Alec, es en esta ocasión sobre Boris, sobre el que caen los velos del rey Amarillo gracias al que encontró una forma convertir cualquier cosa en mármol. Sin embargo, este secreto le convierte en una suerte de Rey Midas y a su esposa en una obra de arte más.
La última de las historias es la titulada “En la corte del Dragón” y en esta, aunque el protagonista no cuente con nombre propio, el dibujante da las suficientes pistas para que los lectores entiendan su significado. En ella el protagonista se ve inducido en una especie de alucinación, obsesión o simplemente en un pasaje de su vida el cual no logra recordar cuando empieza a escuchar la música del órgano en una iglesia.
El eje de unión de estas cuatro historias está formado por todo el misticismo que rodea al llamado
Rey Amarillo, ya sea una obra en forma de libro titulado El Rey de Amarillo, una entidad sobrenatural y malévola conocida como El Rey de Amarillo o un símbolo misterioso llamado El Signo Amarillo. Cualquiera que posea el libro, el signo o se le dé a conocer al rey amarillo caerá en un estado de locura donde no diferenciará la realidad de la ficción temiendo por su vida y viéndose acechado en las sombras por terrores propios o infundados.
A diferencia de lo que muchos podrán creer, El Rey de Amarillo no se parece en nada a otros terrores creador de mentes de novelistas como por ejemplo Lovecraft. El necronomicon y los cuentos de Cthulhu insinúan terrores cósmicos, pero no dejan pasar detalles explícitos de como entes universales arraigados en el mundo se apoderan de este paso a paso, ya sean monstruos de las profundidades, como perros que se escondan en la oscuridad. Sin embargo, Chambers es mucho más sutil y deja al lector entrever en las costuras un ser que no está definido, que son solo secretos aireados y locura por doquier.
Pero no lo neguemos, parte del encanto de este volumen no es solamente la historia que tenemos entre manos si no también la forma en la que está plasmada gracias al arte que Culbard ha conseguido realizar. Conocido como el artista para obras imposibles, ha conseguido realizar una obra esplendida donde toda la fuerza reside en las expresiones de los personajes, llegando a mostrar un enorme abanico de emociones que van desde el miedo y la confusión a la crueldad y la locura.Sus líneas y colores son limpios y atrevidos, así como sus personajes, que van de lo caricaturesco alos estilizado en cualquier de sus historias. Su rey Amarillo y los harapos que este viste generan terror y admiración se mire donde se mire, consiguiendo plasmar en una viñeta todo lo que falta en el dialogo de los personajes.
Personalmente al empezar a leer este volumen puede parecer un poco confuso, pero hay que prestar atención a los personajes, a las pequeñas cosas y a las expresiones de todos y cada uno de sus integrantes. Las caras de Culbard hablan por sí solas y los ojos de sus personajes conseguirán generar ese cosquilleo en la nuca, como si alguien te observara desde las sombras.
Se tiene que tener en cuenta que no es Lovecraft, aquí no vas a encontrar sus monstruos y terrores nocturnos, si no susurros entrecortados, fanatismo y misterio rodeando el vacío que ha dejado en Carcosa el temido Rey Amarillo.