El pasado 23 de noviembre os hacíamos partícipes de la iniciativa realidad por la editorial Drakul, mediante la que lanzaban una encuesta a sus seguidores para elegir en una encuesta la portada que luciría su próximo cómic cuando fuera publicado en diciembre: Death Row. El corredor de la muerte.
Siendo una de ellas con el logo en tonos jade y otra en rojos, la no elegida sería descartada y con ella se realizaría una tirada exclusiva de tan solo 26 ejemplares que se pondrá a la venta en primicia, fuera del circuito de las librerías, en el stand de Editorial Drakul en el próximo Expocomic de Madrid en diciembre.
Finalmente, la participación de los usuarios terminó decantando la balanza a los tonos verdes, por lo que mientras en librerías ahora podéis hallar la edición con esa portada elegida, aquellos agraciados que pudieron acercarse a su stand, ahora poseen el ejemplar con el logo rojo.
Esta novela gráfica nos traslada hasta Wolverstone, apodada la Boca del Lobo, una prisión cualquiera en una ciudad estadounidense dónde el ex-policia Dave Walker, conocido como El Muerto Andante, espera su turno para cumplir al día siguiente la pena capital para pagar por unos crímenes cometidos que, aunque no son revelados en la trama, nos queda claro que fueron bien justificados.
Tras ser liberado por su excompañero y actual guardia de la prisión Frank, Walker terminará - aun ante unos compañeros reticentes - formando parte del equipo encargado de la supervivencia de aquellos de la carcel que aun no permanecen infectados, encontrandose ante todo ante la dificultad del rigido Drennen, un tipo duro como pocos que mantendrá a rajatabla a sus subordinados para lidiar a la vez con la infestación de muertos vivientes y los peligrosos reclusos.
Drennen no tardará en dar su brazo a torcer, permitiendo que Walker se encargue de las tareas más peligrosas al mano de otros reclusos, iniciando unas suicidas labores esenciales para asegurar la supervivencia de los que aun permanecen en Wolverstone.
Con estos componentes sobre las viñetas el Doctor Wallace, único miembro con conocimientos en enfermedades y artes curativas del centro y por lo tanto el miembro más importante del grupo, será el encargado de narrar los terribles sucesos en primera persona, lo cual dota a esta historia de muerte y traición de una credibilidad y un valor humano mucho mayor, aportando mucha más gracia al conjunto.
Con maestría, los dos autores nos presentan esta historia clásica de zombies estructurándola en unos ordenados 14 capítulos cortos, en los que sus personajes se desarrollan positivamente en rápidas evoluciones que nos permiten conocerlos lo justo para poder pasar a la trepidante acción cuanto antes.
Una nueva historia que, si bien no nos ofrece nada esencialmente original, si nos brinda una buena historia de zombies que los seguidores de los come-cerebros podrán disfrutar de cabo a rabo, aderezada con dialogos dignos de una película de acción de los años noventa.
Marc Sans (Barcelona, 1978) y Óscar Perales (Barcelona, 1981) se conocen en el año 1998, cursando la carrera de Diseño Gráfico. Tras terminar los estudios y después de trabajar en varias empresas del sector, coinciden en 2003 como codirectores artísticos en una agencia de publicidad en Tarragona. En 2004 fundan OYEME! en Barcelona, un estudio de diseño gráfico especializado en la industria discográfica.
En poco tiempo, OYEME! dse convierte en uno de los estudios más prolíficos en cuanto a desarrollo de arte para el sector, trabajando para los principales sellos musicales nacionales. En la actualidad compaginan su trabajo como diseñadores con proyectos personales como la novela gráfica La Noche de los cautivos publicada por Ediciones de Ponent en 2010, y Death Row. El corredor de la Muerte, que hoy hemos analizado en nuestra página.