Para nosotros, los accidentales, el mundo oriental sigue siendo uno de los grandes misterios, y no solo por su forma de hacer, si no por la de pensar. Más de uno nos hemos sorprendido por la lógica de los asiáticos pero lo que muchos no saben es que ellos también se sorprenden a veces de su propia lógica y de la nuestra.
Sobre dicha lógica y maneras trata el nuevo libro que Quaterni ha puesto recientemente en nuestras manos. Se titula “UN GRAN DESCUBRIMIENTO: DOCE CUENTOS JAPONESES” y en él se profundiza con doce historias cortas sobre la mentalidad de este mundo tan cercano y lejano a su vez.
Edición:
Una vez más, Quaterni opta por una edición sencilla a la par que cómoda, trayéndonos un libro en de 15.5 x 23 cm y 256 páginas a un precio de 19,50€.
Como su propio nombre menciona en su interior cuenta con doce historias cortas de varios autores además de unas notas de traducción la mar de útiles y un pequeño prologo presentando a los escritores que componen esta pequeña antología
La traducción de los relatos corre a cargo de Isami Romero, Juan Antonio Yáñez y Juan Luis Perelló.
Sinopsis:
Nos encontraremos con historias en las que un japonés descubre que los occidentales no son tan diferentes a ellos, las reflexiones de un hombre que lucha por superar el asesinato de su familia, las aventuras de uno de los ladrones más peculiares del periodo Edo, la historia de cómo el sushi puede cambiar la vida de un hombre o la constatación de que la percepción que tenemos sobre los valores y el código de honor de los samuráis no siempre es correcta.
Veamoslos por separado:
La primera historia la comienza Sōseki Natsume con Diario de un hombre en bicicleta. Trata sobre las penas y alegrías de un joven japonés residente en Inglaterra quien poco a poco intenta aprender a montar en bicicleta. Aunque de buenas a primeras parezca un hecho sencillo el autor consigue sacar una buena e interesante crítica social en la que el principal componente es la cotidianidad y el día a día de dos culturas muy diferentes
El segundo cuento es por el que la antología recibe su nombre, El gran descubrimiento, de Ōgai Mori es una historia irónica y divertida donde nos hacen una clara alusión al choque cultural entre oriente y occidente. El argumento no es tan interesante como podría ser, pero la conclusión está clara, todos los humanos son iguales, por muchas costumbres y religiones que les separen, todos se sacan los mocos.
Una de las más bonitas es La historia de una anciana geisha, en la que Kanoko Okamoto nos pone en la piel de una mujer de dicho oficio quien vive con su hija adoptiva Michiko y decide acoger a un joven muchacho Yuki, el cual está a disgusto con su vida. Uno de los cuentos más sensibles y nostálgicos, pero a la vez más curiosos dado que se empieza a introducir el concepto de la electricidad en las casas y se puede observar claramente la envidia y recelo, que a partes iguales causa tal fenómeno.
Uno de los más fantasiosos es Magia, de Ryūnosuke Akutagawa, quien nos plantea la historia de un mago que es capaz de hacer todo tipo de cosas, el problema es que para aquellos ambiciosos jamás estará a su alcance. Curiosamente, esta historia podría estar ambientada en cualquier época y periodo, ya que prácticamente es atemporal
El robot y el peso de la cama, de Sanjūgo Naoki es el siguiente cuento que aparece en la lista y trata sobre los últimos deseos de un moribundo hacia su esposa, a la quien le ha proporcionado un robot de aspecto humano que la complacerá cuando el ya no esté. La única condición que le pone es la del respeto. Un cuento muy moderno para la época en que fue escrito y que explora a la naturaleza humana, sus deseos y el amor. Muy divertido y con los que más te llegas a reir
A continuación viene la historia corta que más me ha gustado y impactado, se trata de Una carta de protesta, de Kan Kikuchin, que es justamente una carta escrita por un hombre el cual ha vivo una trágica historia de asesinatos y muertes, y como se dirige al Ministro de Justicia para pedir lo que él considera justicia. Es uno de los cuantos con los que más se puede reflexionar ya que trata la idea de la religión como método de salvación del alma en última instancia; y aunque el autor tenga una idea equivocada de lo que significa realmente el cielo y el cristianismo, da mucho que pensar.
En La luna sobre la montaña, de Atsushi Nakajima, se trata sobre la desmoralización y el sentimiento de poca recompensa que un erudito siente al ver la escasa recompensa que alcanzan sus dones literarios, él desaparecerá pero un amigo le reencontrará y descubrirá lo mucho que ha cambiado. Esta sí que realmente es uno de los cuentos mas en clave de fabula al que los occidentales estamos acostumbrados. Un cuento muy sencillo pero a la vez profundo.
El hombre toro, de Atsushi Nakajima, es una historia de carácter feudal que trata de un hombre que decide acoger en su familia a uno de sus bastardos y como este reaccionará delante de su “padre” y de sus allegados. Esta cruel historia acongojará con sus pasajes y dejará al lector con un sentimiento de tristeza y eso si, con poca moraleja.
A continuación Sushi, de Kanoko Okamoto, nos trae una historia clásica sobre el mundo del sushi y sus propietarios. Es un cuento dulce y ligeramente triste que abrirá el apetito de los lectores gracias a las perfectas descripciones que encontramos. Como curiosidad, al final se incluye una tabla de pescados con nombre japonés y español.
Jirokichi, el Ratón Rapaz, de Ryūnosuke Akutagawa. Este relato versa sobre un famoso ladrón con una moral no demasiado adecuada, capaz de hacer pasar múltiples penurias a quienes dicen ser algo que no son. Curiosamente contiene bastante ironía, algo que parece que muchos japoneses no conocen
¡Corre, Melos!, de Osamu Dazai, se sitúa a diferencia del resto de historias, en Siracusa, donde un rey que ha perdido la confianza en la humanidad pone a prueba al desdichado protagonista, Melos, quien le demostrará que el mundo no es un lugar tan cínico como el rey piensa. Basada en leyendas antiguas y en un poema de Schiller, ésta corta historia refleja la confianza del mundo asiático en sus semejantes, tanto en lo bueno como en lo malo
La última historia que nos encontramos es El fin de Uemon Miura, de Kan Kikuchi, donde el protagonista, un joven samurái que valora por encima de todo su vida, ve como le humillan al tener que tomar ciertas decisiones en las que se juega el honor o la vida.
En esta historia nos muestran cómo según los ideales de la época a la vida se le tenía mucho menos apego que al honor, uno debía morir con honor, hecho que hoy en día se podría considerar hasta negativo. Este ideal de hombre samurái se ha ido perdiendo con el tiempo, pero es cierto que la mentalidad asiática aún encuentra el honor prácticamente más importante que la vida.
Características:
Bien podemos decir que todas las historias tienen un corte más o menos tradicional, en donde de una forma o de otra se indaga en las costumbres del mundo oriental y se hace una crítica, constructiva o no, sobre sus pensamientos. A su vez, se hace una comparación entre oriente y occidente en el que podemos ver como idealizaban en su momento el pasado y sus costumbres, aunque estas no fueran del todo acertadas.
Es bastante interesante ver cómo han unido en un solo libro historias de tal variedad temática, encontrando géneros muy contrastados aunque todos primen en tener un mensaje moral. Igualmente, al ser un poco pupurri de tanto género diferente dificulta un poco leer los cuentos de forma in-interrumpida. Personalmente recomiendo leerse las historias por separado y analizarlas antes de pasar a la siguiente, o se llega un momento en que no se sabe ni que se está leyendo.
Lo que sí que tienen en común todos los cuentos es el tipo de traducción con la que cuentan, en donde la decisión de palabras más arcaicas para nombrar ciertos elementos sirve para poner en situación al lector. De esta forma, manteniendo ciertos términos en su japonés original ayudan a meterse mejor en el ambiente y a disfrutar más cada historia.
Finalmente, me ha parecido muy interesante que la edición original de estas historias cortas, escandalizaran a los japoneses de la época, dado que hoy en día nos sirven para documentarnos y poder ver qué tipo de mentalidad más cerrada tenían.
Conclusión:
Un libro muy interesante y con unas historias la mar de curiosas que pondrán al lector un poco mas en consonancia con la mentalidad del mundo asiático. Personalmente me ha gustado leerlo de poco en poco, dando tiempo para pensar entre cada historia ya que estas no están entrelazadas entre si y no brindan a ser leídas todas del tirón.
Pero pese a ese pequeño detalle, es un libro interesante y muy práctico para quienes cansados de novelas, busquen algo mas ágil y sobretodo curioso.