Tras el lanzamiento en noviembre del año pasado del libro de reglas para la tercera edición de Infinity - Más conocido en algunos lares como N3 -, tenemos el placer de hablaros un poco de esta pequeña maravilla para todos los aficionados al popular juego de estrategia con miniaturas.
Una nueva edición que podemos obtener en castellano o inglés y nos trae como novedad unas reglas más pulidas y nuevos perfiles de tropas para mejorar un juego que ya de por sí brillaba con luz propia.
El N3 consta de un bello estuche de cartón satinado y bellamente ilustrado en cuyo interior encontramos dos libros encuadernados en rústica con solapas; el de trasfondo, que consta de 180 páginas, y el de reglas, que abarca la friolera de 275 páginas, por supuesto a todo color.
La edición del N3:
Desde luego nos encontramos ante un producto de primera calidad. Como coleccionistas, nos encanta ver la calidad de impresión y papel que Corvus Belli ha empleado para este libro.
Ambos libros presentan todas sus páginas a color, con un tamaño de fuente sencillo de leer - un poco mayor que el de reglamentos de otros juegos -. En su interior encontramos una maquetación ejemplar, acompañada de un material gráfico que es la envidia insana de los reglamentos de la competencia; francamente y perdiendo brevemente la profesionalidad, el estilo manganime de Infinity le pasa la mano por la cara a todo lo que otras compañías tienen que ofrecer en las grises páginas de sus libros de reglas.
Como reproche, quizá podríamos encontrar que el libro es demasiado grande como para llevarlo cómodamente a las partidas, o el hecho de que se echa en falta que los dos volúmenes estén encuadernados en cartoné, lo cual ayudaría a la conservación de los mismos y a que sobrevivan en general al paso del tiempo y el uso.
El trasfondo.
A lo largo de 180 páginas, encontramos una de las partes que más se disfrutan de Infinity: su rico trasfondo.
Todas las facciones se encuentran relatadas de una manera tan atractiva que únicamente tenemos que leer por encima la introducción de Haqqislam o los Nómadas para querer desplegarlos en nuesta mesa.
Dejando de lado trágicos futuros góticos y oscuros, Infinity se abraza a una ciencia ficción mucho más pura y nos deja en el pellejo de pequeños equipos de elite realizando operaciones especiales.
Una humanidad que en plena expansión y habiendo alcanzado las estrellas gracias a la tecnología de agujeros de gusano sobrevive por si misma.
Saltando de un sistema a otro, las naves comerciales avanzan por la galaxia gracias a unas rutas propiedad de la O-12 (la evolución de la ONU), la cual es a su vez dirigida por ALEPH, una omnipresente inteligencia artificial.
Las normas se encuentran escritas de una forma clara y concisa para que cualquiera pueda dominarlas, y aunque es indudable que tarde o temprano serán necesarios FAQs que aclaren algunos puntos que pueden llevar a la disputa (como es habitual cuando hablamos de un juego con tantas normas), eso no quita que principalmente el sistema de juego sea bastante transparente.
Para aquellos que no estén familiarizados con Infinity, lo primero a remarcar y el principal atractivo para nosotros es que se trata de un sistema que permite que todos los jugadores participen durante toda la secuencia de juego.
Infinity utiliza un sistema de turnos en los cuales ambos jugadores actúan, siendo uno de ellos “jugador activo” y el otro “jugador reactivo”. Jugador activo es aquel que activa, mueve, y hace actuar a sus miniaturas mediante su reserva de Órdenes, mientras que jugador reactivo es ese que reacciona a los movimientos y acciones del jugador activo.
Durante dichos turnos y utilizando d20, sabemos si una miniatura tiene éxito al realizar alguna acción, comparando el resultado con el Atributo adecuado para realizar esa acción. Si el resultado es igual o menor que el Atributo, la acción tiene éxito, y la miniatura consigue su objetivo.
Esto a muy grandes rasgos es como funciona el sistema de Infinity, el cual como ya os comentábamos destaca por que en ningún turno los jugadores defensivos solo miran... ¡Al realmente importante!
Pero mientras la humanidad se encuentra enfrascada en sus propios problemas, la amenaza se cierne sobre ellos en la forma de otras civilizaciones alienígenas...
Todo un lujazo de trasfondo del cual no queremos revelar más para aquellos que aun no hayan podido echar una partida a Infinity... ¡No perdáis la oportunidad si se presenta!
Las Reglas
Como comentábamos antes, el manual de reglas consta de 275 páginas, pero no temáis, ya que Infinity puede ser todo lo sencillo que necesitéis.
Y es que lo mejor de las reglas es sin duda el hecho de que estén divididas entre simples y avanzadas. Los jugadores podrán de esta manera introducirse poco a poco en el juego para familiarizarse con las reglas más básicas antes de dar un paso al frente y lanzarse a unas partidas con muchos más conceptos y acciones y reacciones especiales.
La manera en la que se presentan los ejemplos para que podamos entender como funcionan las reglas es simplemente fantástico. Lo que podría volverse un galimatías sin sentido (algo que los jugones hemos sufrido alguna vez frente a un manual), en este reglamento es tan sencillo como hervir un huevo: lo más habitual es que gracias a ellos entendamos las reglas a la primera.
Las normas se encuentran escritas de una forma clara y concisa para que cualquiera pueda dominarlas, y aunque es indudable que tarde o temprano serán necesarios FAQs que aclaren algunos puntos que pueden llevar a la disputa (como es habitual cuando hablamos de un juego con tantas normas), eso no quita que principalmente el sistema de juego sea bastante transparente.
Para aquellos que no estén familiarizados con Infinity, lo primero a remarcar y el principal atractivo para nosotros es que se trata de un sistema que permite que todos los jugadores participen durante toda la secuencia de juego.
Infinity utiliza un sistema de turnos en los cuales ambos jugadores actúan, siendo uno de ellos “jugador activo” y el otro “jugador reactivo”. Jugador activo es aquel que activa, mueve, y hace actuar a sus miniaturas mediante su reserva de Órdenes, mientras que jugador reactivo es ese que reacciona a los movimientos y acciones del jugador activo.
Durante dichos turnos y utilizando d20, sabemos si una miniatura tiene éxito al realizar alguna acción, comparando el resultado con el Atributo adecuado para realizar esa acción. Si el resultado es igual o menor que el Atributo, la acción tiene éxito, y la miniatura consigue su objetivo.
Esto a muy grandes rasgos es como funciona el sistema de Infinity, el cual como ya os comentábamos destaca por que en ningún turno los jugadores defensivos solo miran... ¡Al realmente importante!
En resumen, todo un juegazo que no os podéis perder.
¡Infinity N3 os espera!