A finales de este pasado mes de julio 2014, Drakul Ediciones publicaba una nueva novela gráfica de la saga de Star Trek que se unía a las anteriores cuatro entregas ya publicadas por la editorial desde 2009. Se trata de Star Trek: Khan, una rústica con solapas a todo color que englobaba en sus 128 páginas la miniserie de cinco números del mismo nombre publicada en USA originalmente el pasado febrero de 2014 por IDW Publishing.
Este valioso volumen para los fans de la franquicia galáctica arroja más luz que ninguna otra publicación o serie hasta el momento sobre la historia del carismático, significativo y aclamado villano, narrando la historia completa del aumentado Khan Noonien Singh.
Aprovechando el reciente universo paralelo creado por J.J. Abrams con sus películas Star Trek XI (2009) y Star Trek: En la Oscuridad (2013), la acción se sitúa justo tras el final de la historia narrada en "En la Oscuridad", justo durante el proceso judicial llevado en la Tierra tras la captura de Khan, interpretado en la película por Benedict Cumberbatch.
Haciendo frente a la infinidad de cargos de los que lo acusa un tribunal al cual no reconoce, Khan se somete al interrogatorio llevado a cargo por el capitán Kirk y Spock, profundizando en su pasado más remoto y relatando los sucesos que le condujeron desde su infancia hasta la recién acontecida batalla, justificando además el cambio de aspecto (y racial) tan polémico al que se vio sometido el clásico villano trekkie - Antes interpretado por Ricardo Montalbán - en esta nueva película.
Mediante su relato, Khan nos traslada a la India de 1971, donde de entre los barrios más pobres gasean niños a los que nadie echara de menos para comenzar un experimento de mejoras genéticas con ellos, combinando sus ADN con los de genios y portentos físicos para lograr crear soldados mucho más avanzados.
Este experimento se extiende a todo el globo, pero de entre estos aumentados destaca Noonien Singh, un niño tullido al que, tras presenciar su gran ambición, el jefe del proyecto pone especial ahínco. Las dotes de liderazgo de Noonien y su gran ambición le ayudan a encabezar a todos sus compañeros a lo largo del experimento hasta que finalmente sucede lo inevitable: Los aumentados se revelan a sus amos, y tras organizarse internamente, asestan una serie de golpes en los estados más importantes de la tierra tratando de alzarse con el control de la humanidad.
La respuesta de la humanidad contra estos monstruos genéticos es rápida, violenta y rápidamente sofocado por unos seres ampliamente más preparados que ellos, lo cual se cobra millones de vidas antes de que las naciones queden repartidas entre los líderes de los mismos en 1992.
Será entonces cuando Noonien adopte el nombre por el que se le conocería más adelante, como un homenaje a los antiguos líderes de su región: Khan.
Esta situación fascista terminará originando las llamadas guerras Eugénicas, que devastarán lo que queda del planeta hasta la huida de Khan del planeta acompañado de sus más allegados y su posterior periodo en criogénesis hasta que su nave fuera encontrada por el almirante Marcus.
A partir de este momento seremos testigos de la manipulación a la que el almirante Marcus somete a un amnésico Khan, convirtiéndole en su subordinado John Morrison para propulsar el avance de su secreta sección 31 hasta que finalmente el aumentado recupere su memoria y nos traslade a los sucesos acontecidos en el film de J.J.Abrams.
En definitiva, nos encontramos ante una completísima novela gráfica que complementa la película, añadiendo un sinfín de detalles de gran relevancia que nos permiten comprender a la perfección la figura de Khan.
Orquestado por los guiones de Mike Johnson, el relato biográfico del tirano argumentado por Roberto Orci se torna en una novela gráfica que, a pesar del gran número de detalles aportados, proporciona una lectura ligera que cualquier lector podrá disfrutar.
Acompañando a estos guiones de Johnson, encontramos una galería de artistas repartidos por las páginas de esta obra, encabezados por David Messina, que se encarga de la actualidad (2.259) en la que están ajusticiando a Khan, la sobresaliente Claudia Balboni a cargo de los flashbacks de los capítulos uno a tres, y Luca Lamberti poniendo los lápices de los flashbacks capítulos cuatro a cinco.
Esta amalgama de arte cumple con las expectativas esperadas, igualando sin problemas el tono de la película, pero entre todos ellos podemos destacar sin duda la obra realizada por Balboni, cuyas viñetas son las más perfeccionistas de todo el volumen.
En definitiva, Star Trek: Khan es un complemento ideal para la película Star Trek: En la Oscuridad, y una obra que no pueden dejar escapar todos aquellos trekkies fans del magnífico Khan, el que sin lugar a dudas es uno de los villanos más representativos del universo de Star Trek.