Seguimos con las reseñas de Cómics, y en este caso traemos un nuevo cómic publicado por Image en América a finales del año pasado y reeditado en español por Aleta Ediciones el pasado mes de mayo. Se trata del cómic de Sex, de Joe Casey y Piotr Kowalski, recopilando los ocho primeros números en un tomo integral en edición de rustica y a todo color con 192 páginas llenas de justamente eso, sexo.
Antes de meternos en materia, comencemos hablando de los autores del cómic.
Joe Casey, el escritor y guionista, es conocido por trabajar tanto en DC, con varios comics de Batman y Superman, como en Marvel, donde guionizó Hulk y Unncany X-Men. Y a su vez en otras publicaciones como Image, Dark Horse o Wildstorm. Llegando así a tocar prácticamente todos los héroes y villanos más conocidos.
Mientras que por otro lado encontramos a Piotr Kowalski, el dibujante del tomo que tenemos entre manos y menos conocido que su colega guionista pero trayendo a sus espaldas otras obras como Hulk o Robocop.
Una vez conocidos a los autores, hablemos del cómic como tal, lo primero que hay que saber es que está recomendado para lectores adultos y no solo porque se digan tacos o salgan muchísimas escenas de sexo, si no porque se plantean problemas de carácter más maduro y personal por lo que un público más joven podría no ser el adecuado
Durante años combatió el crimen como el Santo de la Armadura, un vigilante enmascarado. Pero esos días han quedado en el pasado, y tras un exilio autoimpuesto, el playboy multimillonario debe encontrar un modo de redefinir su existencia sin la adrenalina de su vida como superhéroe.
Sin embargo, eso no es fácil, Simon ahora está a cargo de su compañía, un negocio en el que solo se habla de planes fiscales, oportunidades de inversión, reuniones con los accionistas, añadiendo tedio a la vida ya de por si aburrida de Simon.
Tiene problemas con las mujeres, con los compañeros de trabajo, con los amigos e incluso con su abogado. Las emociones fuertes ya no existen para él, y el único resquicio de emoción que le queda es fantasear sobre sexo. ¿Pero, porque fantasear sobre sexo, en lugar de tenerlo?
Esta es la gran pregunta que nos genera este cómic y el eje central de la historia.
Narrativamente hablando, Joe Casey construye una historia de superhéroes donde ya no hay enmascarados, y solo quedan los villanos y la ciudad a oscuras sin nadie que pueda hacer nada, todo ello con una fuerte carga de erotismo y sexo explícito, alejada de las fórmulas habituales en este género superheroico en el que las reacciones de los personajes respecto al sexo marcan su personalidad.
Y es que nos muestran a un héroe que ha vivido tanto, y que ha combatido descargando tanta adrenalina, que ahora su vida real parece la verdadera mascara.
Sabemos que esta idea ha sido plasmada bastante a menudo en los cómics, el otro lado de la vida de un superhéroe es a veces bastante más llamativo que el superhéroe en sí, sin embargo en este caso lo abordan desde una perspectiva diferente, más cruda y realista, y desde luego mas sexual. Ya que parece ser que la única salida que se encuentra al problema, es el sexo
Pero, ¿qué pasa si el sexo ya no le llama la atención a Simon? Ahora él solamente lo observa como un simple vouyer, y lo que ve le aburre, no le dice nada y lo rechaza con desdén, porque si lo has tendido todo, ahora esto sabe a poco. La represión sexual del protagonista es demasiado fuerte y rechaza cualquier posibilidad de tener sexo casi tan duramente como intenta rechazar su pasado.
Pero vive en Saturn City, el nuevo Gotham, y la tentación está en todas las esquinas incluso para alguien tan frio como él.
Por otro lado, en el apartado artístico Piotr Kowalski realiza un gran trabajo especializándose en páginas dobles que capturan la atención del lector, realizando escenas de sexo muy eróticas y dinámicas con colores muy saturados y viñetas impactantes.
La arquitectura de Saturn City por si sola nos muestra la decadencia en la que ha ido cayendo la ciudad, recordándonos a una posible Sodoma y Gomorra del futuro con altos edificios, barrios sucios, un paisaje de ladrillos y decadencia en forma de luces de neon.
Todo ello realizado con un dibujo estilizado y elegante que le permite realizar con acierto desde la recreación de las atmósferas más sórdidas a los más glamúrosos ambientes con lo que construye una Saturn City
Sin embargo, no todo lo que brilla es oro, y personalmente encuentro que 8 capítulos son muchos capítulos como para dejarte con la sensación de haber llegado a leer solo una introducción a la historia.
Además cuenta con el añadido de que el cómic parte de cero, con la peculiaridad de que los personajes que aparecen jamás te cuentan sus vidas pasadas, solo aquello que ahora tienen por delante, dejando al lector dudando sobre cómo se ha llegado realmente a este punto y quienes son realmente esos personajes y que conexión tienen entre si
En conclusión, Sex es un cómic para gente con la mente abierta y a la que no le importe que la información se la vayan dando a cuenta gotas. Actualmente el cómic va por el número 14 en América, por lo que espero que la historia ya haya avanzado más, pero en este tomo se nota una historia de transcurso lento y emociones fuertes.