Cómic: review de Jack Staff, todo solía ser Blanco y Negro [Aleta Ediciones].

Hace veinte años fue el mayor héroe de Gran Bretaña, pero entonces desapareció y el mundo se olvidó de él. Hasta ahora.
review de Jack Staff, todo solía ser Blanco y Negro [Aleta Ediciones].

Con esta primicia llegamos al tomo Jack Staff: Todo Solía Ser Blanco y Negro, el inicio de las aventuras del superhéroe creado por el británico Paul Grist que nos trae Aleta Ediciones en esta recopilación de los números 1 al 12 tal y como ya sacó Image Comics en 2004 en USA.

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En su momento os trajimos una reseña de MUD MAN, otra imperdible obra también de Paul Grist, pero con Jack Staff nos lanzamos de lleno a la piscina de la creatividad y el imaginario del autor.

Y es que Jack Staff tiene su historia; ahora lo conocemos bajo el sello de Image Comics, pero estos 12 primeros números se autopublicaron inicialmente bajo su propio sello Dancing Elephant Press, cuando Paul decidió lanzarse al panorama del cómic británico, árido en aquel momento en el tema de superhéroes, con esta original novela gráfica.

Años después Image Cómics adoptaría su obra y recopilaría estos primeros números en blanco y negro en el volumen que llega de manos de Aleta, Todo Solía Ser Blanco y Negro, antes de que Jack Staff diera el salto a las páginas en color. Un tomo de 352 páginas en rústica donde asistiremos al nacimiento del héroe más grande de Gran Bretaña.
El mayor héroe de Gran Bretaña.
Jack Staff no es un cómic de superhéroes normal. Durante el siglo XXI, lo que conocemos por las colecciones de superhéroes han evolucionado a una narrativa bastante tópica, pero Paul Grist dio el gran salta y decidió presentar su historia con matices totalmente diferentes.

No es que Grist reniegue de los superhéroes clásicos; los homenajes a la comunidad superhéroica continúan por doquier a lo largo de su historia, y un claro ejemplo es el Sargento States de los Luchadores de la Libertad. Quiero decir, un patriota americano con la bandera en el pecho, que combatió en la gran guerra, tiene un escudo y ha estado congelado 40 años. Bueno, no puede ser más clara la referencia.
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Pero Grist no se queda en la imitación que otros (Image sabe de que hablamos) realizaron pura y duramente durante los noventa. Grist le da otra vuelta de tuerca y, con una narrativa que parece escaparse de los clásicos de la viñeta de los años cincuenta, recicla los conceptos clásicos para convertir su historia en algo totalmente original y divertido.

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Y es que solo hay que pasar unas páginas de lectura para darse cuenta de que esto es lo único que busca Grist con su novela gráfica: esto no va de grandes lecciones morales o personajes dramáticos hatsa decir basta que acarrean las secuelas de terribles traumas.

No, Jack Staff es DIVERTIDO.
Es un héroe fresco, con aventuras directas, claras y concisas que te transportan a la acción sin hacerte un lío innecesario ni enredar la trama de maneras complicadas que ni el propio autor sabe solucionar después.
Y esto no significa que Jack Staff sea una trama plana o simple.

Paul Grist no deja de realizar intervenciones con un buen elenco de secundarios originales, escenas que interceden en medio de la historia para añadir nuevos detalles o flashbacks que dotan de más profundidad a los personajes sobre los que estamos leyendo. Personajes a los que, como sucede con Jack, cojemos cariño rápidamente.

Es difícil explicar la genialidad del estilo narrativo de Paul Grist sin tener uno de sus cómics delante, pero lo que nos ofrece en sus páginas es tan diferente al resto de cómics que parece que venga de otro universo.

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Pero la narrativa no viene solo de mano del guión, si no que nace gracias a que Paul se ocupa también de los lápices de Jack Staff. Esto añade una sinergia a sus historias que difiere de los clásicos de capas y vigilantes, ofreciendo además un arte muy, muy diferente de lo que estamos acostumbrados y más cercano a los álbumes europeos: sencillo, de trazo grueso y aun así muy expresivo, capaz de llevar lo que Grist tiene que contarnos a otra escala.

Y sin duda, el más claro ejemplo para mi de todo esto es "El Druida"... pero no os contaré sobre estas maravillosas páginas. Mejor disfrutadlas vosotros mismos, por que sin duda, merece muchísimo la pena.

Después de todo, ¡es el mayor héroe de Gran Bretaña!