La editorial ECC Ediciones continua son su recopilación del evento DC Universe: Rebirth, que tras revolucionar a través de sus grapas en 2017 el universo DC Comics, ahora regresa recopilado en este formato de lujo para coleccionistas.
Lanzado el pasado mes de julio de 2019, Sendero de perdición recopila a lo largo de sus 256 páginas a todo color los números del 957 al 962 de la serie original Action Comics además del Justice League núm. 52, con una maravillosa historia elaborada por Dan Jurgens junto a los dibujantes Patch Zircher, Tyler Kirkham, Stephen Segovia y Art Thibert, todo en un maravilloso cartoné.
El mundo ya no tiene a Superman (New52).
Dado por muerto, Metropolis se encuentra indefensa cuando unos matones deciden secuestrar rehenes en un banco con unos objetivos bastante poco claros, al menos hasta que llega una ayuda totalmente inesperada: Lex Luthor, quién aparece como salvador de las víctimas luciendo en el pecho de su brillante armadura el símbolo de Superman.
Estos sucesos, retransmitidos en la televisión en directo, son motivo de peso suficiente como para que el Superman con quién nos pusimos al día en el anteriormente mencionado Superman: Lois y Clark - La Llegada decida abandonar el anonimato para calzarse su traje de nuevo y plantarse en Metropolis, dispuesto a arrancar del pecho su símbolo al que en otra dimensión y tiempo fue su más antiguo y pérfido némesis.
La llegada del que es posiblemente el ser más peligroso posible termina forzando una cooperación entre Superman y Luthor, mientras que en la zona zero se encuentra un confundido Jimmy Olsen, al cual se ha unido un Clark Kent que asegura no tener nada que ver con Superman y no poseer ninguno de sus poderes.
Bajo esta premisa, Dan Jurgens da inicio al regreso del viejo Superman a escena, y lo hace por todo lo grande con la aparición ya en un principio de un monstruo de la talla de Doomsday, a lo que suma la aparición de Wonder Woman, quién parece aceptar demasiado fácilmente a este nuevo héroe llegado de una dimensión perdida.
Así pués, Wonder Woman se suma para detener al monstruo, a quién pronto consiguen alejar de la urbe, poniéndose para horror de todos tras la pista de otro kriptoniano: Jon, hijo de nuestro Superman y Lois. Dispuesto a no permitir que su hijo reciba daño, este volumen da inicio con una cruenta y desesperada batalla entre Superman y Juicio Final en la que los golpes de ambos los hacen volar de un lado al otro del planeta en unas escenas de acción que quitan el hipo.
Petición que por suerte, la amazona no tardará en ignorar. Con esta batalla, Action Comics y el nuevo Superman retoman un ritmo trepidante en el que vemos a la amazona y el kriptoniano sacando todo su poder y llegando al lector como lo que son y siempre han debido ser: los dos héroes más poderosos sobre la faz de DC Universe. Una colaboración repleta de compañerismo y confianza que se aleja, por fin, del romance que se estaba alargando agónicamente en New52.
El guionista saca toda la artillería en estos primeros números para ofrecer una historia repleta de misterio que engancha a los lectores, quienes ya nos preguntamos quién es ese encapuchado omnipresente que no deja de salir, pero lo hace quizá de una forma demasiado conveniente y precipitada.
Con esto nos referimos a un regreso quizá demasiado forzado del Superman Clásico, quién tras años en el anonimato decide aparecer por todo lo alto sin importarle las consecuencias, a una Wonder Woman que acepta todo lo nuevo sobre el hombre al que amaba sin ningun reparo, e incluso a una aparición de Doomsday que se nos antoja quizá demasiado temprana.
Superado este arco, veremos como el protagonismo se transfiere para sorpresa de todos a Clark Kent; ese misterioso Clark que no tiene NADA que ver con Superman y que despierta todas nuestras sospechas como lectores al continuar repitiendo una historia que no se aguanta de ninguna de las maneras posibles.
Así en un principio veremos como el propio Superman pone en duda sus orígenes en un encuentro en el que saltan las chispas, para después pasar a una aventura protagonizada por el reportero que a duras penas logra captar nuestro interés, a la espera de volver a ver al gran azul en escena.
Dan Jurgens continúa sorprendiéndonos con las herramientas utilizadas para el regreso del viejo Superman, en un principio entusiasmandonos con la aparición de Doomsday, y a continuación dejándonos perdidisimos con este misterioso señor Kent.
Con todo, nos hallamos ante un volumen repleto de acción, en los que disfrutamos cada segundo de un duelo de titanes que se desarrolla sin reparos en la primera mitad, para luego confundirnos con ese misterioso villano que, tras el telón, parece estar manejando los hilos... todo esto, por supuesto, acompañado del exquisito dibujo de Patrick Zircher y Stephen Segovia, que nos ofrecen el mejor y más poderoso Superman que hemos visto en años.
Dan Jurgens (Ortonville, Minnesota, EE.UU.; 1959) Todo un veterano del Universo DC, reconocido por haber creado a Booster Gold y el subsello Tangent.
Pero también por sus estancias como guionista y/o dibujante al frente de diferentes colecciones relacionadas con el Hombre de Acero y una interminable lista de cabeceras publicadas por la editorial.
Coincidiendo con el relanzamiento de DC, actualmente centra sus esfuerzos en títulos como Green Arrow, Superman y Justice League International.