Manga: Reseña de "Monster×Monster" (モンスターXモンスター) vol.1, de Nikiichi Tobita [Fandogamia].

Fandogamia ha demostrado que piensa hacerse un hueco en el panorama nacional, y que cuenta con las aspiraciones y carácter más que suficiente para lograrlo.

Tras una larga experiencia en la autoedición de autores españoles y europeos, la editorial daba un enorme salto cuando acogió bajo su sello el manga de tono hentai Holy Knight (ホーリーナイト), que ya había pasado por los pinitos editoriales de Japan Weekend.

Tras catar la fruta del deseo, la editorial asentaba nuevas bases recientemente con el lanzamiento del cómic USA Borderlands Orígenes, y ahora, finalmente, deciden dejarnos con la boca abierta con una nueva licencia japonesa.

Dispuestos a romper con todo, este XXII Salón del Manga de Barcelona lanzaban a la venta el primer volúmen de nuestro protagonista de hoy, Monster×Monster (モンスターXモンスター) vol.1, de Nikiichi Tobita, pasando posteriormente a la venta online el 1 de noviembre y a librerías especializadas el 7 del mismo mes. 

Y lo hacen con una edición impecable que respeta en extremo a su homónima japonesa, siendo el primer tomo un tankoubón de 17x12 cm en rústica con sobrecubiertas que contienen 176 páginas en blanco y negro, impresas en un papel mate de una calidad y grosor que hacen palidecer al resto de editoriales más importantes.

Todo un monstruo que sin duda, le da un giro de 180 grados a su catálogo.

La serie cuenta con un total de tres volúmenes y se inició como una historia corta publicada en 2014 en las páginas de la revista japonesa semanal Shonen Sunday de Shogakukan, pasando en abril del mismo a estrenarse como serie completa a través de la Shonen Sunday Super.

El mundo está plagado de bestias gigantes y furiosas. Con arrojo e inteligencia, la humanidad consiguió cazar a las bestias y convertirlas en una fuente de suministros. ¡Es la Gran Era de la Caza! En estos tiempos de grandes sueños, donde casi todas las personas se ganan ...la vida en industrias relacionadas con las bestias, el protagonista de nuestra historia ni trabaja ni estudia: es un nini...

Monster×Monster

Nos encontramos ante uno de esos mangas que, cuando uno lo empieza a leer, no se espera lo que se va a encontrar dentro. Y no lo digo por la portada, que ya delata a lo inútil y acabado de nuestro protagonista, si no al conjunto de sensaciones que nos transmiten las primeras páginas.

Y es que cuando empezamos a leer las primeras viñetas de Monster×Monster, lo primero que nos encontramos es toda una fantasía épica y una verborrea que parece anticipar el a estas alturas clásico manga con tintes de RPG japonés cuyo guión termina estando más seco que la vejiga de una momia, pero que llega amparada con unos dibujos que nos dejan los ojos como platos.

Estamos hablando de un grafismo que inevitablemente nos lleva a la referencia del maravilloso e idolatrado Berserk de Kentaro Miura, gracias a todo el detalle a plumilla que puebla cada pequeño rincón de sus páginas y a la indudable espectacularidad de sus splash pages ilustradas con unas bestias que nos hacen el culo pepsicola.

Pero ojito. Mucho ojito por que esto es una trampa muy elaborada.

Cuando ya nos hemos quedado prendados de todas esas tramas y músculos monstruosos, pasamos página y el mangaka Nikiichi Tobita rebela su auténtica mano de cartas al presentarnos al auténtico protagonista de nuestra historia: Un Nini.

El inútil cuya vida vamos a presenciar en este cómic de fantasía es un sujeto con tres décadas a sus espaldas que hasta la fecha no ha hecho nada de provecho con su vida ni planea hacerlo, que se pasa el día rascándose el escroto en su habitación y vive mantenido por su madre.

Sí señoras y caballeros: Nikiichi Tobita decide tener la inmensa originalidad de dar inicio a su trama con un personaje que representa lo peor de la juventud (y no tan juventud) de nuestra sociedad actual, presentándonos un enorme giro argumental en menos de diez páginas. 

Bajo esta inesperada premisa se desarrolla Monster×Monster, una historia sobre un mundo fantástico repleto de aguerridos héroes dónde la rareza es este cacho de escoria irresponsable cuyo mayor enemigo es su madre, que le obliga contra su escasa voluntad a salir a buscar trabajo de una maldita vez.

Así, las aventuras de nuestro nini se desarrollarán básicamente en torno a su escasa vocación profesional, a medida que en su camino se crucen celebridades como el joven captor promesa del que todo el mundo habla, una princesa o unos maestros dispuestos a convertirle en captor; toda una baraja de personajes de lo más definidos a los que él decidirá poner apodos de lo más vagos y criticar a sus espaldas como el ser pusilánime que es. 

Aunque quizá. Y solo quizá... sus últimas páginas nos dejen totalmente locos por leer el siguiente volumen.

Nos encontramos ante un manga diferente, una obra capaz de ofrecernos unas escenas de acción que nos dejan atónitos, para a continuación enfocar a un fracasado sin remedio. Un puto cachondeo de manga que desafía los estándares establecidos sobre fantasía y que, sin duda, posee todos los ingredientes para convertirse en un manga recomendado.