Tras una larga espera de varios años, por fin tenemos en nuestras manos gracias a Norma Editorial, el segundo número de la serie de cómics Manor Black, obra de Cullen Bunn, Brian Hurtt y Tyler Crook que nos habla del poder de estar único por sangre a tu familia, te guste o no lo que ello conlleva.
Este segundo número de la serie, se publica en formato rústica con tapas blandas que mide 17 x 26 cm. En su interior encontraremos 112 páginas a todo color que, además de los respectivos capítulos de esta serie, también incluyen una galería de portadas alternativas. El precio de este nuevo número es de 21€ y está a la venta en librerías, tiendas especializadas y a través de la web de la editorial.
Manor Black Vol.2 
El anciano y poderoso brujo de la sangre Roman Black toma a una joven Maga de la Llama bajo su tutela después de que ella haya conseguido lo imposible: absorber dentro de sí el espíritu del tótem de su Casa Mágica.
Pero ese tótem es poderoso y puede que imposible de controlar, especialmente cuando los hijos de Roman empiezan a ver a la joven maga como una amenaza. No es de extrañar porque su poder no se limita a hacer saltar unas chispas, sino a quemar, descontrolado y furioso, todas las arboledas cercanas a la mansión.
Sin embargo, hay muchas cosas que esta joven maga desconoce, como para comenzar el hecho de que la sangre que arde dentro del anciano Black, bien podría consumirle en algún momento, llevado por la locura hereditaria que vivió su mismo padre.
Aunque la gran pregunta e incógnita es el porqué de esta decisión. El porqué de que el anciano haya escogido a otra persona lejos de su familia, porque les ha negado a ellos la sucesión del poder y porque lo ha hecho tan deprisa y obcecadamente. Una pregunta todavía sin respuesta.
Admitimos que el avance tan lento de esta obra no le hace mucho favor a la trama, que se queda en cuatro retazos de ideas en nuestros recuerdos, por suerte el inicio de esta obra nos da los elementos básicos para recordarlo todo, o al menos lo más importante, por lo que aunque es un pequeño impedimento, se solventa fácilmente.
En cuanto a la historia que nos ofrece este tomo, la verdad es que es muy interesante, entra en el terreno de lo políticamente correcto/incorrecto con temas de esclavitud y racismo, pero eso solo hace que añadirle interés al contenido.
Finalmente, pasando al apartado del arte, aunque menos terrorífico que el anterior tomo, sí que nos resulta muy gráfico en cuanto a heridas, dolor y sobre todo llamas y quemaduras, algo que encaja perfectamente en la trama y que le da ese ambiente spooky que tan bien le queda a la historia. Personalmente, me gusta mucho el uso de los colores en los efectos de llamas, más amarillas que rojas, realmente abrasadoras.
Así pues, estamos ante una buena e interesante segunda parte, que hay que leer con cuidado al principio o bien tras reeler el tomo anterior. Son muchos meses los que han pasado y nunca está de más refrescar la memoria. Pero aparte de eso, es tan interesante como el anterior y nos deja con ganas de seguir leyendo mucho más de estos artistas tan talentosos.