Reseña de NOCHES OSCURAS: METAL (DC Pocket), ECC Ediciones.

¡Vinieron del Multiverso Oscuro! La Liga de la Justicia acaba de regresar a la Tierra tras haber derrotado a Mongul... pero ni Batman ni sus compañeros sospechan que Hawkgirl y los Blackhawks van a darles una noticia pésima: nos están invadiendo unas fuerzas malignas llegadas del reverso oscuro del Multiverso, incluido el malvado Batman Que Ríe.

NOCHES OSCURAS: METAL, o como se conoce en USA Dark Nights: Metal, es un macro evento de DC comics que sacudió sus pilares entre 2017 y 2018, un suceso tan emocionante como trascendental que reunía una vez más al guionista Scott Snyder (La Cosa del Pantano) y al dibujante Greg Capullo (Spawn), dando como fruto a una saga imprescindible del moderno Universo DC.

Gracias a la edición DC Pocket, ECC Ediciones nos brinda una vez más una recopilación de los sucesos de la saga, esta vez en un formato mucho más humilde y al alcance del proverbial bolsillo de todos. De esta manera en un manejable rústica de 146x225 mm. encontramos a lo largo de 320 páginas a todo color los grapas originales Dark Days: The Forge núm. 1, Dark Days: The Casting núm. 1, Dark Nights: Metal núms. 1-6, Batman: Lost núm. 1, Hawkman Found núm. 1 y Dark Knights Rising: The Wild Hunt núm. 1 USA.

NOCHES OSCURAS: METAL

Nos encontramos ante un evento que lleva a todos los lectores a un viaje repleto de emociones entre las que el terror toma protagonismo. Una historia llena de acción y suspense que trae a primera plana tanto a personajes nuevos como antiguos acompañando una buena dosis de creatividad y un mensaje sólido. Sí, hay más de una cosa que me ha chirriado o no me ha terminado de convencer, pero en general Noches Oscuras: Metal termina siendo una gran historia en la que todo ese regusto oscuro por el que se conoce a los superhéroes de DC toma un nuevo significado.

Si bien el murciélago es el inevitable centro de atención de toda la trama, podemos ver a Superman llevar sus poderes al límite e incluso a Wonder Woman atacando a Black Adam con la maza de Hawkman ¡casi nada!

Pero... ¿Cómo llega a suceder todo esto?

Todo el tinglado toma forma cuando los personajes Hawkman y Hawkgirl son traídos de regreso a la parrilla, utilizando su inmortalidad para narrarnos sobre una serie de metales que, a su vez, nos introducen el Multiverso Oscuro, una dimensión que se encuentra en el reverso el Multiverso conocido y que nace de los miedos de los seres sintientes del mismo.

Este metal ya antes mencionado es un conducto a través de la historia que lleva persiguiendo a Bruce Wayne desde que fue asesinado por Darkseid en Crisis Final, y cuyo objetivo es abrir un portal para que todos los horrores lleguen al mundo. Todo orquestado por una bestia primordial conocida como Barbatos, quién posee su propia versión de los Jinetes del Apocalipsis en la forma de las versiones más retorcidas de Batman imaginables.

Con estas cartas sobre la mesa obtenemos una mezcla de acción y tensión que nos persigue durante todo este viaje, primero con Batman intentando evitar que se abra el portal, y luego uniéndose a los héroes para intentar evitar lo inevitable... un recorrido en el que vemos desde Plastic Man hasta el propio Sandman.

Este es un evento en el que las versiones malvadas de Batman se meten con todos los héroes y Batman monta un dinosaurio y un dragón que se parece al Joker, siendo capaz de ser ridículo de una manera que funciona de forma absoluta para resultar divertido y refrescante, al mismo tiempo que épico.

Los principales defectos provienen del final, que se siente un poco apresurado y nos deja la sensación de haber sido terminado con prisas.

El trabajo de Greg Capullo en Dark Nights: Metal es espectacular. Dentro de esta historia presenta una enorme variedad de personajes nuevos, algunos rediseños increíbles para personajes de sobra conocidos y algunos escenarios que desafían por completo a nuestra imaginación.

Capullo siempre ha sido un artista fantástico, pero este evento le permite desatar niveles de talento que no ha podido demostrar hasta ahora.