Después de varios meses, hoy llegamos nuevamente con otra review de nuestra librera favorita, Honda-san, quien nos presenta nuevas escenas lo más curiosas que suceden en su lugar de trabajo y anécdotas que ni esperábamos descubrir sobre el mundillo de la edición y venta de libros!
Como ya sabíamos La librera calavera Honda-san es un manga realizado por la propia Honda a modo de autobiografía, está siendo editado en nuestro país por Fandogamia y cuenta con 3 de 4 tomos publicados, por lo que nos acercamos peligrosamente a su final. El formato es en tankoubon B6, con inserto de una página a color y se encuentra dentro de la Línea Yamanote de la editorial, con un precio de 8€ el volúmen.
La librera calavera Honda-san En este nuevo tomo, Honda tendrá que hacer frente a muchos peligros, a grandes retos y superar duras pruebas para ser nuevamente un ejemplo a seguir en su lugar de trabajo. Aunque sabemos que todo esto realmente se reduce a tener su sitio ordenado y dar un buen servicio al comprador que viene buscando nuevo material.
El problema está en que no siempre puede ofrecer lo que la gente desea, porque para ser sinceros, el mundo editorial es muy duro y hay obras que de les escapan de las manos incluso a los libreros interesados en poseerlas, consiguiendo que Honda tenga momentos de crisis muy gordas.
Pero no todo es tristeza o llanto! nuestra querida librera siempre estará acompañada de grandes personajes, compis laborales que le demostrarán que si lo intenta puede conseguir unas estanterías impecables, cajones pulcros y almacenes de ensueño. O al menos así sería si sus tomos no tuvieran dimensiones totalmente aleatorias y tuviera que encajarlos como puede en las estanterías.
Así que muchos ánimos Honda, en tu carrera de librera y de autora hay grandes momentos que se tienen que afrontar con bravura y todos ellos, desde la firma de libros, hasta conseguir que los ejemplares no vayan al cementerio de las ediciones olvidadas, son importantes!
Los entresijos del mundo editorial ya no serán ningún misterio para nosotros desde que Honda nos los destripa todos, eso si, de la forma mas divertida y anecdótica posible. Y es que el terreno de las re-ediciones, de las exposiciones en las librerías e incluso de las firmas de autores, nos parecían verdaderos misterios hasta ahora.
Claro está, es un manga divertido y muy ameno pero que no lleva a ningún lugar, no tiene una trama definida si no que es un slice-of-life formado de historias cortas unidas por la protagonista, lo que nos ofrece una lectura amena, sencilla y muy divulgativa.
En cuanto al arte, este se mantiene como siempre, con sus típicas escenas cómicas, sus dramas y salseos e incluso los cameos a otras series, siempre censurados pero totalmente reconocibles. Lamentablemente en esta ocasión no hemos tenido la suerte de ver a Honda con su ropa de calle, pero su uniforme de librera es tan bueno como el resto.
En conclusión, estamos ante un nuevo tomo de la serie que nos ofrece un buen contenido, mucho buen rollo y más anécdotas con las que pasar el rato. Siempre es agradable leer a Honda y este tomo es una clara muestra de ello.
