La fina línea entre héroe y villano siempre ha sido algo interesante que explorar en el mundo de los superhéroes, y algo que a Marvel se le daba especialmente bien, siendo el Dios de las Mentiras uno de sus principales contribuyentes. Sin embargo no todos estos personajes son dignos de un recopilatorio como el que tenemos en nuestras manos y que firma Kieron Gillen como una de sus obras maestras. Esta recibe el nombre de Loki:Viaje al misterio y se encuentra dentro de la colección Marvel Omnibus de la editorial Planeta.
Para aquellos que quieran hacerse con semejante obra magna un aviso, podría servir para comentar una casa de lo gordo que es este recopilatorio, ya que incluye en su interior los números Journey Into Mystery 622-645, Exiled One-Shot, New Mutants 42 y 43 y The Mighty Thor 18-21, es decir un total de 768 páginas a todo color con un formato de tapa dura brutal. Lo dicho, perfecto para leer en la cama o para llevarlo en carretilla. Como se prefiera.
Si aún así su tamaño no te asusta y te consideras digno de su lectura, está disponible en librerías, tiendas de cómics y a través de la web de la editorial por 45€.
Loki: Viaje al misterio
Podríamos decir que esta historia empezó hace mucho tiempo, pero no sería cierto, comenzó exactamente durante el Asedio, cuando Norman Osborn decidió iniciar un ataque contra Asgard al que el mismo dios de las mentiras incitó. Sin embargo, cuando sus propias acciones le hicieron vacilar y darse cuenta de que se le había ido la mano al sabotear las defensas de Asgard haciéndola caer en Broxton, Oklahoma, también fue él quien lo arriesgo todo para salvar al mundo.
Así fue como viviendo como un villano Loki decidió morir como un héroe y regresar a la vida como un joven delincuente callejero, con la oportunidad de crear para sí mismo una nueva reputación a la que estar a la altura. Ahora bien, la cosa es difícil cuando todos tus hermanos te conocen como el Dios de las Mentiras y tu mismo mientes para cubrirte las espaldas. Más todavía si nadie te da la oportunidad de conocer tu nuevo yo y tus únicos compañeros son una urraca con el antiguo Loki a modo de Pepito Grillo y Leah, la doncella de Hella, diosa asgardiana de la muerte.
Pero todos esos prejuicios a su persona no le impedirán actuar como considera que debe, salvando Asgard y otros panteones de los peligros que le acechan, aunque en lugar de hacerlo como su hermano se dedicará a hacer lo mejor que hace, traicionar y mentir. De esta forma salvará a los suyos de Miedo Encarnado, protegerá a Asgard de La Serpiente aunque ello implique perder a su hermano, y se aliara con dioses, demonios, criaturas y seres no siempre amigables, si con ello puede llegar a su objetivo.
Un aspecto que también se agradece en esta lectura es que el personaje no se encuentre solo con sus pensamientos, ya que podría resultar demasiado pesado el encontrarnos con soliloquios eternos sobre el bien y el mal. En lugar de eso a través de sus historias consigue diferentes aliados que le acompañarán o no en las aventuras a las que se enfrente. Su compañera regular será Leah, la versión joven de Hella y con claramiente tiene algún tipo de tensión sexual que da pie a millones de escenas cómicas, pero no será ella la única que decida darle una mano. Otros asgardianos se pondrán en su camino, a veces incluso demonios o reyes infernales, pero todos decidirán seguir a este joven Dios de las Mentiras, aunque después le dejen o no en la estacada.
Y claro está, para que la lectura no sea demasiado pesada encontraremos varias escenas cómicas mezcladas entre las intrigas ocultas y las mentiras del chico. Todas ellas ligeras, sencillas e incluso algunas veces inocentes. Un soplo de aire fresco que nos ha parecido el añadido perfecto para estas historias.
Personalmente adoro los primeros números con Doug Braithwaite y su estética más retro y de dibujo clásico que tan bien encaja con el personaje. Con esas líneas a lápiz, los difuminados y degradados tan suaves y el diseño plano de personajes casi parece que estemos viendo un cuadro en cada una de las viñetas de nuestro volúmen. Pero si ese aspecto tan clásico no es para ti y buscar un dibujo más desenfadado, el de Pasqual Ferry es divertido a la vez que enérgico, mientras que el de Richard Elson tiene un aspecto más cartoon de colores brillantes muy llamativo.
En conclusión, si, este tamaño intimida, no es muy amigable para llevárselo de paseo al parque ni cuenta con lo que dirías un tamaño de viaje; pero su interior se lee facilmente y sus historias son tan divertidas como interesantes. Esta versión de Loki es la que más cerca está de la cinematográfica, la que viaja más profundo de su psique y de sus miedos y alegrías, y con la que más nos podemos sentir identificados. Una verdadera obra de arte digna de hacer que nuestras estanterías se comben con su peso.