A veces nos encontramos con amistades extrañas, de esas que nos hacen sonreír y preguntarnos cómo han llegado a encontrarse personas tan diferentes pero que se llevan tan bien; y esque esa es la temática del último tomo que Norma Editorial ha publicado en su catálogo de manga, la historia de dos mujeres, una adolescente y una anciana, unidas por el yaoi. El nombre de este manga es Metamorfosis BL y es una obra de Kaori Tsurutani.
Como pasa con muchos tomos de Norma, este cuenta con un formato en rústica con sobrecubiertas extraíbles, aunque en esta ocasión el papel está texturizado y tiene un tamaño ligeramente más grande al de un tomo manga habitual, siendo 14,8 x 21 cm. En su interior podremos encontrar 146 páginas en blanco y negro, además de las dos primeras a color, lo que nos permite encontrar una bonita y tranquila estampa de las dos protagonistas nada más abrir el tomo. Para aquellos que quieran conseguir este primer volúmen, está a la venta desde el pasado mes de octubre por 9€
A sus 75 años, Ichinoi es una anciana que disfruta de una vida tranquila y placentera, aunque algo solitaria tras el fallecimiento de su esposo. Tiene claras sus rutinas y se apega a ellas con la tranquilidad de lo cotidiano, aunque no siempre placentero reposo diario, exento de cambios y emociones nuevas.
Una tarde, tras comprobar que la cafetería a la que solía ir con su esposo se encuentra cerrada y en proceso de venta, entra en una librería y compra por impulso un manga debido a su bonita portada. ¡Desde luego no imaginaba era que se trataba de un boys’ love, una historia de relaciones homosexuales masculinas! Pero lejos de escandalizarse, se emociona tanto que vuelve a por el segundo tomo...
Tras el mostrador de la librería se encontraría Urara, una chica adolescente que para sacarse un poco de dinero trabaja a media jornada y como la señora Ichinoi es muy fan del Yaoi.
Lo que ni Urara ni Ichinoi esperaban es que entre las dos naciera una sencilla amistad gracias a esa afición que curiosamente comparten las dos.
por su temática, si no por lo original de su premisa, una amistad en la que tranquilamente los personajes se llevan 50 años de edad, pero eso no les impide socializar y compartir una afición como es la lectura, aunque sea una un tanto especial.
Pero es precisamente este tipo de historias originales y divertidas las que rompen barreras y nos demuestran que el manga no tiene porque venderse únicamente por demografías. Si que es cierto que el Yaoi tiene un target claro, mujeres en una edad entre la adolescencia y la madurez, pero no por ello no puede gustarle a gente de todo tipo, como por ejemplo las ancianas más tranquilas que puedas encontrar en un barrio residencial japonés.
Obviamente, esto viene acompañado de unos personajes simpáticos, divertidos y de los que te encariñas muy rápidamente, y a los que acompañas en esta curiosa amistad, como si el lector fuer a a su vez participe de esta. La verdad es que ahora la señora Ichinose es nuestra favorita por razones obvias, pero seguro que en el segundo tomo podremos conocer un poco más y mejor a Urara.
Curiosamente, el personaje de Urara nos parece el más sencillo de todos, ya que incluso sus expresiones faciales no tienen demasiados cambios a lo largo del volúmen, sin embargo la señora Ichinose es realmente expresiva y nos encanta ver como se sonroja con su primera lectura, como se emociona ante la idea de poder conocer a otra persona con sus mismos gustos, y sobretodo como se desvive por caerle bien a Urara, sin agobiarla ni presionarla, como podria hacer otra persona más joven.
En conclusión, estamos ante un manga muy sorprendente que nos ha dejado con una sonrisa en los labios tras su lectura. Su trama sencilla y pausada, sus personajes cotidianos y sus pequeños dilemas nos han encandilado, dejándonos con ganas de saber más sobre esta extraña pareja de amigas que seguro pasen mucho tiempo juntas, compartiendo una afición tan curiosa como emocionante.