No conozco a nadie que le gusten los cómics y no le guste la trilogía cinematográfica de John Wick. Su historia repleta de violencia, acción trepidante y personajes pintorescos es una suma de ingredientes que sin lugar a dudas daría a luz a una buena novela gráfica.
Sin lugar a dudas, no soy el único que piensa esto: alguien en Dynamite llegó a la misma conclusión, dando como fruto este spinoff precuela, una pequeña joya que esperamos sera la primera de muchas que amplia el cada vez más atrayente universo que rodea al señor Wick.
Una joya que, por suerte, los buenos de Fandogamia traían a nuestro país este pasado 2019.
Escrito por Greg Pak (Planet Hulk, James Bond 007) y dibujado por Giovanni Valletta y Matt Gaudio, la serie completa nos llega pues en un formato idéntico al TP lanzado en USA, un rústica de 24x17cm con 132 páginas a todo color en su interior, entre las que encontramos además toda una galería de portadas a modo de extra.
Casi nada.
JOHN WICK
Este cómic sirve como una precuela de las películas, desarrollándose en una época en la que el Sr. Wick es un profesional independiente que todavía es nuevo en los caminos de la comunidad de asesinos a al que ya pertenece en las películas.
Pero no, no se trata de un cómic que explora los orígenes de Wick o su relación con la mafia rusa. No es TAN precuela.
La historia se centra en como John Wick termina sumándose a la organización de asesinos, pero también tiene como objetivo desarrollar su infancia como un temerario imprudente en Baja California. Lamentablemente, este último elemento es casi completamente superfluo. La interacción entre el pasado reciente y el pasado distante no se maneja con mucha elegancia, y esas breves escenas de la infancia no terminan contándonos mucho sobre el personaje, o al menos no tanto como desearíamos.
Durante dicha infancia, Wick cruzó su camino con unos asesinos y camellos llamados Los tres Billys, un encuentro que terminó resultando en una horrible masacre de un montón de inocentes.
Buscando venganza y ya como un curtido asesino equipado con montones de letales habilidades, John regresa en busca de venganza, dando pie a un buen montón de escenas de las que nos gustan, en las que vemos a Keanu Reeves enfrentándose a todo un ejército de mercenarios para dejarlos tosiendo en un charco de sangre.
El escritor Greg Pak logra plasmar el tono y la cadencia de las películas en su guión. Su John Wick ciertamente suena como Keanu Reeves, un hombre rudo que se contenta con existir en su pequeño y tranquilo mundo hasta que se ve obligado a tomar medidas y entonces se lía la de cristo.
Un spinoff con todas las de la ley.
El artista Giovanni Valletta logra capturar la imagen de Reeves, pero en ocasiones sus viñetas muestran una calidad muy inacabada, como si el arte tuviera la intención de servir como diseños sueltos para ser desarrollados más adelante... algo que contrasta demasiado con su impresionante portada.
Pero aun así, el cómic logra capturar el tono y la voz de las películas heredando su esencia para hacernos disfrutar completamente tanto del personaje como de su cada vez más rico universo, aportando más datos sobre el pasado de John y de las comunidad asesina, así como de la franquicia hotelera Continental, que tanto peso tiene en las películas y tan atrayente nos parece a todos los fans.
Ahora solo queda esperar a que surja una nueva serie, y rezar por que sea una precuela mucho más anterior que aporte algo más de contenido a la historia principal.