Comic: Review de "Los buenos Veranos: El descanso del Guerrero" Vol.4 de Zidrou y Jordi Lafebre - Norma Editorial

El pasado mes de Abril la editorial Norma lanzó al mercado un nuevo número de una de sus series de cómics europeos que mas nos gustan, obra del increíblemente polifacético Zidrou, que viene acompañado de Jordi Lafebre con el cuarto volumen de Los buenos Veranos.

En esta ocasión el tomo recibe el subtitulo de El descanso del guerrero y como el resto de cómics europeos editados por Norma, cuenta con un formato en cartoné que tiene un tamaño de 23,5 x 31 cm, en cuyo interior encontramos 56 páginas totalmente a color de una divertida historia costumbrista y familiar. El precio del volumen es de 16€

Los buenos veranos #4: El descanso del Guerrero

El verano de 1980, Pierre Faldérault completa las últimas viñetas de su tebeo justo a tiempo para irse de vacaciones. La sorpresa es total para toda la familia, pero no es la única noticia emocionante: ¡han comprado, llave en mano, un chalé en la campiña francesa! Como cada año, la aventura es la propia esencia de las vacaciones, y las de este año van a marcar profundamente los recuerdos de la familia.

Ahora ya no se va solamente la familia si no que además se suma al carro el prometido de Nicole chico de alta cuna que no ha utilizado un cuchillo en su vida y que tiene la lengua mas ocupada en explorar la boca de su novia que en cualquier otra cosa. Por suerte será su sencillez la que salve el ambiente en mas de una ocasión.

Porque desde luego ojalá todas las pegas fuera un novio de manos largas. Pierre se verá retenido en su casa más tiempo del deseado y el nuevo chalé no será tan perfecto como esperaba la familia, pero oye, el verano es el verano y hay que disfrutarlo aunque sea a la bartola o en tienda de campaña.

Si, ya tenemos el calorcito a la vuelta de la esquina y con él llega otro de los viajes vacacionales de la familia Faldérault, aunque en esta ocasión en lugar de dramas o de niños gritones tenemos a unos adolescentes en el coche familiar. Si, ahora se quedan atrás los chistes de la infancia y entramos en una época más madura y abierta sexualmente en la que los chistes tienen un punto mas sinverguenza.

Pero para no dejar atrás los antiguos problemas en esta ocasión se nos presentan nuevos, grandes decisiones que los personajes tendrán que tomar. Por ejemplo en el caso de la hija mayor y sus estudios universitarios en una época en la que pagar una carrera era bastante más difícil de lo que nos pensamos.

Sin emabrgo, como siempre los grandes héroes de este volume son esos dos padres que pese a encontrarse con las dificultades que se les plantan en las narices, son capaces de seguir adlenate en su verano con buen humor y mucha gracia. Algo que se siele pasar por alto pero que hace de esta historia algo entrañable.


Finalmente en cuanto al aprtado artístico nos encontramos el precioso y alegre dibujo de Jordi Lafebre que ns ha acompañado tan lejos durante estos cuadro números. En esta ocasión al tener lugar la historia en un impas muy hippie, podemos ver claramente los apantalones de campana, el papel pintado en la casa de la familia y como no, el siempre identificable coche.

En este número aparece ademas un nuevo ayudante del padre de familia, un jovencisimo dibujante que nos saca una sonrisa al llamarse Benoît, nombre real del mismisimo Zidrou y con el que no sabemos si realmente ha decidido plasmarse en este número o si simplemente es un pequeño guiño. Pero desde luego curiosidad nos da.

En definitiva, estamos ante el cuarto volumen de esta serie y el evrano idilico que nuestros personajes esperaban no ha podido llevarse a cabo, aunque a cambio han conseguido uno inolvidable. Ya tenemos ganas de ver como será el siguiente.