Ediciones Babylon lanzaba al mercado este 17 de septiembre de 2020 el primer tomo del manga Regreso al futón, un manga de aventura, comedia y romance obra de Takeru Furumoto en el que la locura está a la orden del día. Y ahora, con el invierno terminando, la editorial nos ofrece el tercer y último tomo con el cual está miniserie llega a su alocado final.
Regreso al futón (Back to the Kasaan) se publicó entre 2017 y 2018 en la revista Big Comic Spirit de Shogakukan y cuenta con un total de 3 tomos recopilatorios.
Ediciones Babylon nos brinda la obra en un formato idéntico al japonés, con el clásico formato con sobrecubierta de 182 x 128 mm, contando en su interior con un total de 192 páginas en blanco y negro, todo en un papel reciclaje de alto gramaje.
A cargo de la traducción contamos con Alejandra Pérez Gallego y C.Esper (Shinyuden).
Yuu es el hijo de Touko Minayoshi, la idol más famosa y perfecta de Japón. Tras una exitosa carrera, la preciosa muchacha se retiró para formar una familia, siendo nuestro protagonista el resultado de la misma... un engendro obsesionado con su madre con un complejo de Edipo de órdago.
Hasta aquí, el tema es hasta normal. Pero la cuestión es que un día, sin venir a cuento, Touko Minayoshi se envolvió en su futón y paso de ser una preciosa madre a convertirse en una suerte de burrito mejicano gigante.
Sobrecogido por la extraña situación, Yuu se come la olla para poder volver a su madre a su estado anterior. Seguro de que la causa es algún trauma del pasado, el muchacho utiliza el amor por su madre para viajar al pasado rompiendo en el proceso todas las leyes de la física y toda posibilidad de un guion con sentido.
Nuestro compulsivo protagonista comienza a visitar algunos episodios de la adolescencia de su madre, destruyendo en el proceso todo el continuo espacio-tiempo y viviendo toda una serie de escenas repletas del fanservice más gratuito de la historia con la versión rejuvenecida de Kasumi Hanada, la que fuera la rival idol de su amada madre.
Así dan inicio toda una serie de aventuras temporales en las que Yuu viaja al pasado para arreglar o estropear (no queda demasiado claro) la juventud de su progenitora, con la intención de que recupere su forma actual de futón monstruoso.
Decir que la historia de este manga es absurda es quedarse corto. Las vivencias de Yuu tienen más bien ningún sentido, y el disparador de sus viajes temporales es casi tan randomita como la transformación de su madre en un rollito primavera de mantas.
Pero es este eje sin sentido el que sirve de engranajes de este manga: humor absurdo por doquier, una comedia que se ríe de su propio genero, aderezado por bragas y viñetas de sensuales y sudorosas axilas femeninas que añaden un toque perturbador a una historia cuyo único objetivo es que nos partamos el ojete de risa al ver las claras referencias a Back to the Future o Harry Potter, en un despliegue en el que todo lo demás da igual.
