Manga: Reseña de "Im ~ El Sumo Sacerdote Imhotep" (Im～イム～) vols. 4, 5 y 6 de Makoto Morishita - Norma Editorial
Este febrero Norma Editorial lanzaba los volúmenes 4, 5 y 6 de Im ~ El Sumo Sacerdote Imhotep / Im~ Great Priest Imhotep (Im～イム～), un shonen obra de Makoto Morishita que promete muchísimo hasta ahora, y que tiene pinta de irse a convertir en un esencial en vuestra biblioteca manga.
El manga inicio su publicación el año 2015 en las páginas de la Monthly Shônen Gangan de Square Enix, y tras su finalización el 12 de julio de 2018 fue recopilada en un total de 11 volúmenes. Norma Editorial nos trae la colección en un formato idéntico al japonés, en una edición rústica con sobrecubiertas de 11,5x17,5 cm. Estos volumenes cuentan con 178 y 180 páginas respectivamente.
Anteriormente conocíamos al mítico sacerdote Imhotep del antiguo Egipto, una eminencia que llegó a ser considerada un dios, quién tras conocer a Hinome Hawakata, una joven estudiante de instituto maldita. Imhotep, ó Im, ha despertado miles de años después para acabar con los Magai y detener a Zoser, su soberano.
Pero su historia real nos lanza a hace tres mil años, dónde se nos presenta a un joven Im, sacerdote de Amon, y el nacimiento de su amistad con el príncipe Zoser, un noble próximo faraón que a pesar de sus nobles intenciones, ya desde su nacimiento fue designado como sacrificio para contener el miasma del infierno.
Intentando evitar dicho destino, Im terminaría condenando al príncipe para toda la eternidad, creando los Magai en el proceso... una condena que ahora tanto los sacerdotes de Amon como él mismo luchan por detener.
Tras un primer choque con el resucitado príncipe Zoser en el presente, Im comienza a trabajar para los sacerdotes de Amon, pero por desgracia para ellos hay espías que apoyan a los Magai en sus propias filas, que termina resultando en el secuestro del maestro Kurou Yata, un valioso sacerdote de Amon y el padre adoptivo de Misora y muchos más agentes de la organización.
Dispuestos a recuperar a su padre, Misora, Im y varios sacerdotes de Amon se embarcan en una misión de rescate que los lleva ha hacer frente a un nuevo enemigo que se suma a las filas de Zoser; la famosa Cleopatra, un alma cargada de culpa y rabia que ha regresado a nuestro tiempo ávida de venganza.
Makoto Morishita nos presenta así a la faraona de su manga, un personaje que es sin lugar a dudas el más sensual hasta ahora en la historia y que logra encarnar claramente toda la belleza legendaria del personaje histórico, convirtiéndola en un peligroso rival capaz de volver a las fuerzas enemigas a los más leales aliados gracias a sus artes místicas.
Por si esto fuera poco, en estos volúmenes asistimos no solo a una notable profundización en el personaje de Morita, revelándonos todo su pasado y relación con sus compañeros sacerdotes, si no que además somos testigos de una evolución en toda regla gracias a la intromisión de Im.
Con todo esto, nos encontramos en la primera gran saga de este manga, en el que los personajes principales unen sus fuerzas para combatir el mal y recuperar al viejo Yata... mientras de fondo podemos ver como las sombras no solo se agitan en el lado de los Magai, si no también entre el sacerdocio de Amon...
Makoto Morishita utiliza unos ingredientes sencillos en el mundo del shonen pero que logran poner poco a poco en funcionamiento una maquinaria imparable, demostrando que la historia funciona sin problemas y presentando unos personajes con los que nos encariñamos rápidamente, a lo cual ahora añadimos unos engranajes arguemntales más que convincentes.
En cuanto a su estilo de dibujo, Makoto Morishita utiliza unos trazos sencillos que encajan perfectamente con la historia, pero que es capaz de convertir en dinámicas e imponentes escenas de batalla cuando es necesario, demostrando que tiene entre las manos un manga que aun tiene mucho por demostrar.
Pero su historia real nos lanza a hace tres mil años, dónde se nos presenta a un joven Im, sacerdote de Amon, y el nacimiento de su amistad con el príncipe Zoser, un noble próximo faraón que a pesar de sus nobles intenciones, ya desde su nacimiento fue designado como sacrificio para contener el miasma del infierno.
Intentando evitar dicho destino, Im terminaría condenando al príncipe para toda la eternidad, creando los Magai en el proceso... una condena que ahora tanto los sacerdotes de Amon como él mismo luchan por detener.
Dispuestos a recuperar a su padre, Misora, Im y varios sacerdotes de Amon se embarcan en una misión de rescate que los lleva ha hacer frente a un nuevo enemigo que se suma a las filas de Zoser; la famosa Cleopatra, un alma cargada de culpa y rabia que ha regresado a nuestro tiempo ávida de venganza.
Makoto Morishita nos presenta así a la faraona de su manga, un personaje que es sin lugar a dudas el más sensual hasta ahora en la historia y que logra encarnar claramente toda la belleza legendaria del personaje histórico, convirtiéndola en un peligroso rival capaz de volver a las fuerzas enemigas a los más leales aliados gracias a sus artes místicas.
Con todo esto, nos encontramos en la primera gran saga de este manga, en el que los personajes principales unen sus fuerzas para combatir el mal y recuperar al viejo Yata... mientras de fondo podemos ver como las sombras no solo se agitan en el lado de los Magai, si no también entre el sacerdocio de Amon...
Makoto Morishita utiliza unos ingredientes sencillos en el mundo del shonen pero que logran poner poco a poco en funcionamiento una maquinaria imparable, demostrando que la historia funciona sin problemas y presentando unos personajes con los que nos encariñamos rápidamente, a lo cual ahora añadimos unos engranajes arguemntales más que convincentes.
En cuanto a su estilo de dibujo, Makoto Morishita utiliza unos trazos sencillos que encajan perfectamente con la historia, pero que es capaz de convertir en dinámicas e imponentes escenas de batalla cuando es necesario, demostrando que tiene entre las manos un manga que aun tiene mucho por demostrar.