Cómic: El maestro Manara nos habla sobre la evolución de su obra y el erotismo.

Los pasados días 5, 6 y 7 de abril tuvo lugar en la ciudad Condal una nueva edición del Salón del Cómic de Barcelona, ahora renombrado como 37 Cómic Barcelona, en el que Ficomic además de ofrecer a sus visitantes todo tipo de excepciones y actividades también dio momentos para el aprendizaje gracias a la visita de grandes autores, entre ellos el mismísimo Milo Manara, cuyo nombre evoca el erotismo y la belleza solo de pronunciarse.

Entrevista a Milo Manara

El maestro italiano Manara aprovechó el certamen además de para presentar la segunda parte de la biografía Caravaggio: La gracia, editada por Norma Editorial, para también poder charlar con los medios y ofrecer entrevistas en la que nos hablaba de su visión del erotismo y del arte, trabajo en el que ya lleva 50 años sumergido. La entrevista fue concedida al mismo tiempo a diversos medios como nuestros compañeros de Es la hora de las tortas, con quienes compartimos la entrevista de hablar con el artista sobre su obra y la evolución del erotismo hasta el día de hoy.

El erotismo es un aspecto que define tu arte y tu carrera, pero, ¿cómo nació esa pasión y cuales fueron tus inicios?

Cuando uno empieza su carrera la premisa principal es que no siempre vas a dibujar lo que quieres, tendrás que comenzar dibujando los guiones que te proporcionen y ese ha sido mi caso. 
Yo comencé con una serie erótica para una revista, pero poco después me llegó la oportunidad de trabajar en la revista erótica Playmen donde me pidieron que trabajara durante las épocas de descanso del también dibujante italiano, Guido Crepax. Aquí creé El Clic (Il Gioco en italiano) obra que recibió el aprecio de muchos lectores y que me hizo posible seguir adelante.

Me he dedicado mucho al tema del erotismo porque me interesa su factor social de renovación, siendo un elemento de transgresión y de liberación que por aquel entonces era necesario al venir de una época de represión en la posguerra. Por eso en mis dibujos me sentía atraído en el concepto de romper tabús como factor de renovación y aspecto social. Era la época de El último tango en París o de la España de Vigas Luna, obras y directores que se dedicaban a reflexionar sobre el erotismo por su valor de ruptura de las convenciones, al igual que la minifalda de Mary Quant.

Entrevista a Milo ManaraEntrevista a Milo Manara

Ahora que el mundo ha cambiado tanto gracias a Internet, como ve posible el erotismo sabiendo que por ejemplo la chica de El Clic podría ser algo real?

Internet es una gran exposición del sexo pero sin la evolución cultural de este. Representa el acto sexual en sí pero no la elaboración que lo transforma, es un acto simple que agoniza, un deporte, algo cada vez más extremo. En Internet hay mucho sexo y pornografía pero no tienen la complejidad necesaria para tener cultura.

Nos encontramos en un punto en el que el mundo ha tomado un camino equivocado, los ricos son más ricos, los pobres más pobres, los océanos están llenos de plástico y por primera vez en la historia del mundo el futuro realmente nos da miedo, porque el mundo que hemos creado, como decía Marcuse, hace 50 años, está basado en el dinero

Entrevista a Milo ManaraEntrevista a Milo Manara

Últimamente se concentra en realizar historias con personajes históricos como protagonistas, ¿porque estos precisamente, que es lo que los hace interesantes?

Mi primera obra con personajes reales fue precisamente con Jodorowsky y la saga de Los Borgia en 2005. Me pareció muy interesante esta trama de Los Borgia al ser la primera aparición de la mafia en la historia mundial proponiendo un Estado alternativo al del Papa. Sin embargo tenemos que recordar que esta no corresponde realmente a los hechos históricos, sino a una visión del mismo Jodorowsky sobre los Borgia.

En cuanto a la saga Caravaggio me interesaba crear un sentimiento de continuidad entre el pasado y el presente, pensar en la evolución tecnológica y como esta nos ha quitado parte de la existencia. La juventud ahora está enganchados al móvil porque creen que este les dará una respuesta existencial, pero realmente esto es solo un objeto. Mi intención era hacer la divulgación cultural de un hombre con dudas existenciales, el ser humano que está detrás del cuadro al que te acercas en el museo.

Entrevista a Milo Manara

Tras estos 50 años de trabajo en los que ha colaborado con grandes autores y guionistas, ¿que legado le gustaría dejar dejar?

El legado es algo que pasa de autor en autor como una cadena en la que yo formo una pequeña parte.  Si bien me recuerdan por haber dibujado mujeres también me podrían recordar por haber dibujado mujeres, niñas, ventanas o coches. No creo que sea algo de una sola persona.