Manga: Reseña “Mi Chico Lobo" vol. 4 de Yoko Nogiri - Norma Editorial


Hoy os traemos por fin el cuarto tomo de Mi Chico Lobo de Yoko Nogiri, publicado por Norma Editorial.

Mi Chico Lobo 4

Yoko Nogiri es una mangaka poco conocida en Europa. A pesar de haber publicado más de una decena de mangas, esta es la primera historia que llega a nuestro país, bajo el título “mi Chico Lobo” o también conocida como “Watashi no Ookami-kun”. Publicada por Kodansha en 2014. Este manga consta de 4 volúmenes, por lo que es ideal para leer una historieta corta, sin llegar a hacerse pesada.

Mi Chico Lobo 4

Nos encontramos ante un shojo de fantasía y romance. Por lo que si te gustan estos dos géneros, definitivamente este es tu manga. Además, tiene un estilo de dibujo pulcro y agradable, con trazos finos y curvos, lo cual resultará bastante placentero de leer.

El cuarto tomo de Mi Chico lobo empieza con ni más ni menos que un flashback al principio de la historia. O más bien que la historia se vuelve a repetir de la misma manera. Komugi entra en clase y vuelve a ver “por primera vez” a Oogami y sus compañeros. Vuelve a sentir que el chico la mira, pero ni caso. No obstante, tiene una sensación de vacío constante, como si le faltara algo. Yû no puede parar de mirarla y Rin le obliga a ser menos descarado. Cuando preguntan al profesor por qué le ha borrado la memoria a la muchacha, este se limita a decir que la razón es porque lo veía oportuno.  El muchacho decide no acercarse directamente ya que el profesor lo tiene vigilado, pero opta por aparecerse a Komugi en forma de lobo. Aparece en todos lados y todo el rato, pero solo ella lo ve, no se deja ver por nadie más. 

Algunas conversaciones del pasado de repiten, y Komugi tiene ciertos deja-vús que le hacen preguntarse si está olvidando algo importante, se siente embotada, como distraída. Finalmente, hasta Senri va a ver al profesor para pedirle que le devuelva los recuerdos a la muchacha, y este contesta que no le ha borrado nada, que solo están bloqueados, así que puede volver a recordar. Parece que la suerte está de parte de la muchacha, porque se encuentra con Yû de nuevo mientras duerme, y el medio dormido la abraza y le dice que huele muy bien. Esas palabras resuenan en la cabeza de Komugi y por fin consigue recordar todo de nuevo. 

Mi Chico Lobo 4
En ese momento aparece el profesor con los otros chicos, y Yû le pide explicaciones del pasado, de cuando Komugi y el lobo se conocieron 12 años atrás. El profesor le dice que se lo explicará todo, pero que debe recordar que fue él mismo quién se obligó a olvidarlo todo, pues el profesor nunca ha hipnotizado al muchacho. Si Yû no recuerda nada es porque el mismo se autosugestionó. 

La historia real de Yû deja un poco que desear, al menos desde nuestro punto de vista. Es demasiado simple. Simplemente la madre del muchacho estaba enferma y murió de una enfermedad, y le pidió al profesor que cuidara del niño. En cuanto a Komugi y Yû, nos e dice mucho de eso, parece que el profesor hipnotizó a la muchacha en aquél entonces, pero tampoco te lo dejan ver muy claro. En cualquier caso, Yû lo vuelve a recordar todo y ahora más que nunca agradece a todos por haberle cuidado durante estos años. Por fin logra superar el trauma de su madre. Parece que por fin los jóvenes protagonistas podrán estar juntos. La cosa parece que empieza a ir bien y el joven le pide a la muchacha una cita ese mismo fin de semana. ¡Por fin una cita!

Mi Chico Lobo 4
Aunque no podíamos esperar mucho más romanticismo por parte de Oogami, el muchacho lleva a Komugi a la tumba de su madre para darle las gracias por todo. Quería ir con ella porque según él, la muchacha es su salvadora desde que era pequeño. Poco después podemos ver una escena cotidiana de cómo Komugi intenta preparar el cumpleaños de Oogami por primera vez, pues no es muy normal este tipo de celebraciones entre animales. Y el tomo termina prometiendose amor eterno.

Sin embargo, también contamos con un episodio extra de la trágica historia del misterioso Senri, el gato. Senri siempre ha sido muy calmado y callado, y ha intentado evitar todo tipo de conflictos. Parece ser que en el pasado, se enamoró de una humana y entró a vivir con ella en forma de gato, y más tarde de jardinero, pero resultó ser un amor no correspondido. La muchacha amaba a otro joven, pero eso no es todo, si no que ella estaba enferma de tuberculosis y terminó muriendo. Desde entonces Senri ha sentido un vacío existencial que no ha conseguido llenar con nada. 

Con esta breve historia termina el tomo 4 de Mi Chico Lobo

Mi Chico Lobo 4