A finales del pasado mes de septiembre, la editorial Nowevolution lanzó al mercado su segundo manga yaoi dentro de su catalogo de Kigen y nosotros como buenos avispados llegamos hoy con la review esperada para poder echarle un vistazo del bueno a este género que poco a poco va llegando a nuestro país y tanto fan está logrando.
El volumen de corte autoconclusivo se titula Si me llevaras a una isla desierta (Mujintou ni Motteikunara) y es una obra de Yamada 2Chome, autora poco conocida por esta zona pero que nos sorprende con este volumen en el que se habla de la libertad sexual y de los fetiches con mucha mas soltura de la habitual.
El tomo como tal se nos presenta con un sencillo formato en rústica con sobrecubiertas, con un tamaño de 19 x 13,5 cm. en cuyo interior encontraremos 178 páginas en blanco y negro que nos harán sudar con su calor gracias al alto contenido sexual que contiene, por lo que está claramente marcado como volumen +18.
Si me llevaras a una isla desierta
Comenzamos comentado que el tomo cuenta con dos historias diferenciadas y autoconclusivas, por lo que nos encontramos dos juegos de personajes.
Por un lado se encuentra la pareja de Akagi y Ichimori, dos estudiantes de bachillerato que siempre se han seguido con la mirada aunque nunca lo hayan confesado. Un día Akagi acompañando a Ichimori por el colegio tiene un accidente causado por este segundo que le deja sin opción de poder volver a practicar deporte, por lo que Akagi consternado le propone ceder a sus deseos a modo de compensación. Su relación avanza con truculentos pasos hasta que un día Ichimori la rompe y dejan de verse.
Desde entonces Akagi se ha sentido culpable por lo que pasó, hasta que seis años más tarde Ichimori se presenta ante él con una sonrisa de oreja a oreja y se instala en su casa durante una temporada. Junto con el resurgir de un amor del pasado.
Por otro lado los protagonistas de la segunda historia son Hisakuni y Akiho un jefe y su secretario, aunque mas que secretario parece asistente personal al tener que acatar y cumplir todas las ordenes que le solicita Hisakuni. Sin embargo esta relación tan extraña no lo será para ellos dos ya que la amistad que los une ya tiene muchos años y ha ido derivando en un deseo secreto que les llevará a los dos a extraños derroteros.
Curiosamente en este manga, con un corte mas adulto y no únicamente por las escenas sexuales, nos encontramos 4 personajes que no tienen tanto miedo a su sexualidad como suele ser lo habitual, si no que a lo que temen es a dejarse llevar realmente junto a su pareja y asustarla o de algún modo.
Este concepto no suele estar demasiado presente en este tipo de mangas, ya que algunos incluso dan por sentado que al tratarse de una pareja homosexual los roles de amo y vasallo suelen darse por sentados, pero precisamente por explorar ese concepto de la forma que lo hacen el manga tiene un punto mas gracioso y ase aleja levemente de la monotonía.
Lamentablemente al tratarse de un tomo autoconclusivo no tenemos mucho mas donde exprimir, ya que las relaciones aunque se desarrollan en las páginas seguramente tendrían mas encanto en tomos mas largos, pero de esta forma nos queda el concepto original por encima del resto y también es agradable de leer.
En cuanto al apartado gráfico este resulta correcto, sin ser de lo mas brillante pero tampoco viéndose soso. Sus fondos son escasos pero los personajes plasman muy bien sus emociones y no solamente en el rostro, por lo que el manga se nota mas satisfactorio.
Como hemos comentado anteriormente está marcado como un volumen para mayores de 18 años, nota importante a tener en cuenta porque las escenas de sexo se repiten de forma habitual a lo largo del volumen y tampoco queremos que nadie se asuste al abrir el tomo. Escenas que por cierto resultan ligeramente repetitivas y un poco ortopédicas.
En conclusión, el tomo para estar formado por dos historias cortas es muy entretenido y fácil de leer, los personajes resultan muy carismáticos y queda claro que los morenos siempre son las lanzados.