En 2013, Guillermo del Toro nos sorprendía con PACIFIC RIM, un largometraje que desafiaba a Hollywood al brindarnos lo que todos los frikis y otakus queríamos en la gran pantalla: mechas partiéndose la cara. Sí, una película americana de mechas, cuya secuela llega este 2018 con Pacific Rim: Uprising. Y no es que fuese buena o mala... es que tenía robots gigantes, y como ya dijo Hideo Kojima (小島秀夫), creador de la saga Metal Gear tras ver Pacific Rim:
"Si eres japonés y no ves esta película, es que estás loco".
Tamashii Nations, aprovechando el tirón de la secuela, nos traía toda una serie de robots en su linea The Robot Spirits, pero nuestro interés real estaba en la figura articulada que os traemos hoy. Y es que, mirando hacia la entrega original que tan locos nos volvió, lanzaba el brutalísimo:
Soul of Chogokin Gipsy Danger GX-77
Esta bestia de metal de 23 cm incluye efectos de luz, dos sets de manos intercambiables, un barco, dos espadas, dos látigos y una base para exposición... todo lo que un buen fan de Pacific Rim necesita en su estantería.
Nuestro Jaeger viene en una gigantesca caja rectangular que, alternando los tonos oscuros y un fondo de ciudad con el dorado metalizado, ofrece una maquetación elegante que al mismo tiempo se identifica perfectamente con el ambiente de la película.
Este diseño se extiende por toda la caja, la cual además vemos adornada con algunas fotografías alucinantes del Gipsy Danger que podrían colar por fotografías de la película, en las que podemos verle luciendo tanto sus efectos de luz como sus accesorios.
Si extraemos los contenidos, nos encontramos con unas bandejas en cuyo interior encontramos nuestro preciado Jaeger.
Soul of Chogokin Gipsy Danger GX-77
Visto el packaging pasamos a echar un vistazo a esta impresionante pieza de la linea Soul of Chogokin. Realizado principalmente en una combinación de Die-Cast y PVC, el titánico robot ha sido retratado con una fidelidad alucinante, conservando cada pequeño detalle en su nueva forma de 23cm.
Cada número grabado en la armadura del Jaeger, cada linea de pintura, cada engranaje, cada pistón... Todos los detalles han sido representados en esta adaptación del Gipsy Danger. El nivel de detalle es simplemente impresionante, algo que hemos visto pocas veces incluso en una linea tan detallada como la Soul of Chogokin.
A esto por supuesto hay que sumarle que se trata de una figura articulada, lo cual gracias a la estructura del robot queda muy disimulado, sin romper su apariencia en el film en ningún momento, aunque en el caso de Gipsy Danger encontramos algunos puntos duros que nos impiden algunas colocaciones.
Sin embargo, el cuidado que se han tomado con las mismas es alucinante, hasta el punto en que utilizan las propias placas que recubren al robot para simular el de los pistones del Jaeger... ¡Observad!
Visto el detalle del Gipsy Danger, pasamos a uno de los aspectos más llamativos, y es que nuestro robot incluye un total de siete pilas de botón que permiten que el reactor de su pecho, entre otros, se ilumine con una variedad de tonos al pulsarlo. Estas luces tras variar se quedan en el color ambar hasta que pasa un tiempo antes de apagarse.
Por supuesto, el festival de luces no termina aquí. Cuatro de las pilas mencionadas sirven iluminar el par de antebrazos alternativos que nos permiten equipar a Gipsy Danger con sus armas de fuego, dispuesto a pulverizar Kaiju.
Además, sus antebrazos normales pueden equiparse con dos armas de antebrazo, siendo estas las dos espadas o los dos látigos. El resultado es brutal.
El elemento más ansiado, no obstante, es el barco. Para todos los que hemos visto la película, el momento en el que Gipsy Danger agarra el barco del puerto y lo utiliza contra el Kaiju como si fuese una katana es uno de los más sobrados y espectaculares, que nos hicieron brillar los ojitos como a niños pequeños. Pues el barco de marras también se incluye, lo cual termina de completar a nuestro Jaeger.
Para terminar de revisar a Gipsy Danger, solo nos queda verlo con su base incluida, una negra estándar con su nombre para poder lucirlo en nuestra estantería como una pieza de colección.
Sin lugar a dudas, nos encontramos ante un pedazo de figuron que los fans de la película sabréis disfrutar. Yo como uno de ellos, os aseguro que con esto en la mano, se me cae la baba.