Aquí estamos un día mas con otra de nuestras reviews de manga shojo, género que va abriéndose paso en nuestra lista de reviews y que poco a poco va consiguiendo grandes éxitos y cosechando muchos fans. Así pues el volumen que hoy traemos en las manos ha sido editado por Ivrea, quienes se lanzaron a la piscina con esta serie de manga shojo clásico que hoy os presentamos gracias a la mangaka Io Sakisaka.
El volumen recibe el nombre de Amar y ser amado, dejar y ser dejado, obra cuyo titulo original es Omoi, Omaware, Furi, Furare, serie que actualmente se encuentra en publicación gracias a la editorial japonesa Shueisha contando por ahora con 6 volúmenes recopilados. Como se puede esperar este manga nos presenta un shojo muy clásico que une el Slice of Live con los romances, y es que no hay nada mas idílico que el amor en el instituto según nos los cuentan los japoneses.
En cuanto a la edición que nos presenta Ivrea es como suele ser habitual un calco de la japonesa. El formato es en tankoubon pequeño con las páginas en blanco y negro, presentándonos la historia de dos chicas muy diferentes con un concepto del amor de lo mas opuesto.
Amar y ser amado, dejar y ser dejado:
Las protagonistas de esta historia son dos chicas de instituto muy diferentes entre si, que en un día muy importante para ambas coinciden y se conocen del forma más curiosa posible.
Yuna es una chica soñadora, tímida y muy romántica, enamorada del concepto del amor mas que de alguien en concreto. Esta esperando a que llegue su principe azul y es incapaz de hablar con otros chicos que no sean su amigo de la infancia Kazoumi.
Por otro lado encontramos a Akari, quien a diferencia de su amiga tiene los pies en la tierra, es una chica segura de si misma, práctica y que cree que el romance no es algo que suceda así sin más, si no que el amor se tiene que buscar hasta encontrar al chico adecuado.
Pese a sus diferencias entre ambas nacerá una dulce amistad al ser capaces de apoyarse entre ellas y suplir la una lo que le falta a la otra. Pero como en todo buen manga shojo aquí también nacerán extraños romances que complicaran ligeramente las cosas.
Yuna caerá rendida ante Río el atractivo hermano de su amiga Akari. Este es un ligón sin igual, atractivo, galante y considerado con las mujeres, a quienes hechiza gracias a su rostro angelical cual Príncipe de cuento de hadas o en este caso de manga shojo.
Mientras que Akari se sentirá atraída por Kazoumi, quien resulta ser el amigo de la infancia de Yuna y eI único con el que la tímida chica a capaz de hablar.
Sin embargo para suerte de Akari, Yuna nunca a sentido nada por su amigo de la infancia, por lo que le dejara el terreno llano a la extrovertida chica, que verá en el una posible pareja gracias a la actitud abierta del muchacho.
Gracias a esta curiosa dinámica ambas se apoyaran en sus respectivas relaciones aunque no coincidan en la idea del amor que tiene la otra, ahora queda por descubrir si esos chicos tan diferentes entre si no solamente sienten lo mismo que ellas, si no si sus perspectivas sobre el amor encajan con las de las chicas.
Así pues este primer tomo nos deja claro el tipo de historia que vamos a encontrar de ahora en adelante. Dos chicas muy diferentes que afrontan la idea del amor de formas diferentes, sin intentar convencerse entre sí o con rivalidades absurdas, simplemente apoyándose entre ellas como buenas amigas.
Este es pues el eje central de la historia y su mayor punto fuerte, porque romances escolares hemos visto muchos y se necesitaba dar un pequeño giro de tuerca a la historia para que no resultara demasiado manida.
Por suerte esta autora es capaz de traernos los mejores romances y de presentarnos personajes atractivos que encajan de maravilla con el argumento consiguiendo que sintamos cariño hacia ellos en un único tomo.
Personalmente Yuna me parece adorable y me sabrá bastante mal que caiga de su nube de manga shojo para darse cuenta de lo que es el amor en toda su crudeza, pero bueno, eso es algo que todavía tenemos que descubrir!
En cuánto al arte del manga, este mantiene el estilo característico de la autora con personajes femeninos de rostro dulce, chicos atractivos y escenarios escolares, nada que elogiar en concreto ya que se mantiene todo dentro de la tónica de la dibujante.
Aunque no podemos negar que el arte de Io Sakisaka resulta un pequeño placer para la vista al contar con líneas suaves y composiciones sencillas que no abarrotan las viñetas sino que las hacen fluir de forma armónica con el ritmo de la historia.
En conclusión, estamos ante un manga sencillo, dulce y con personajes adorables que te caerán bien desde la primera viñeta, todo lo que un shojo necesita vamos. Como pequeño extra me encanta que no cuente con rivalidades en el amor entre las dos protagonistas, por fin una amistad como las normales, claro que si! Ahora a esperar a que llegue el segundo tomo para descubrir como se las apañan estas dos chicas con sus respectivos sentimientos.