Ivréa daba carpetazo al 2017 por todo lo grande con el lanzamiento en su catálogo de un manga que merece el adjetivo de clásico por todo lo alto, un imprescindible para todos aquellos otakus veteranos y una lectura obligatoria para todos aquellos que aprecien el manga con historias de calidad.
Hablamos de GUNNM (Hyper Future Vision GUNNM 銃夢), un manga que se popularizó por estos lares como Alita, ángel de combate (sobrenombre que podemos ver bajo su logo) traducción del Battle Angel Alita con el que se dio a conocer en todo occidente.
Yukito Kishiro es el responsable de este referente del cyberpunk, habiendo publicado este manga entre 1991 y 1995 en la revista japonesa Business Jump y recibiendo una adaptación en dos OVAs bastante lamentables en el 93. Esta serie terminaría de repente debido a unos problemas del autor en su noveno tomo, para continuar años más tarde en forma de su secuela GUNNM: Last Order que ahora publica Planeta Cómic y cuenta con diecinueve volúmenes, y planteando su capitulo final en GUNNM: Mars Chronicle, serie que esta abierta en Japón desde 2014 y ya cuenta con 3 tankoubons.
Y por cierto, ahora le van a dedicar una película que pinta terrible.
Con este largo historial a sus espaldas, ahora Ivréa nos ofrece este mito del manga en un formato tankoubon de lujo, con unas portadas en cuyos ojos podemos encontrar tintas plateadas e incluso páginas interiores a color, además de con una traducción impecable en la que encontramos los nombres originales de los personajes, algo que, de verdad, es de agradecer.
Con esto entre manos, echamos un vistazo a los primeros volúmenes para conocer a nuestra amada Gally. ¡Al turrón!
GUNNM: Alita Angel de Combate
En una ciudad basurero, muy por debajo de la misteriosa ciudad espacial de Salem, el ciber-doctor Daisuke Ido hace un extraño hallazgo: la cabeza desprendida de una joven cyborg a la que decide dotar de un cuerpo solo para descubrir que ha perdido todos sus recuerdos.
El doctor decide llamarla Gally, ofreciéndole una nueva vida en la terrible ciudad en la que ellos sobreviven, pero pronto se da cuenta de que Gally no va a ser la niña inocente que el esperaba; y es que a pesar de que es un amor de chica, una guerrera parece habitar en su alma, algo que queda claro cuando demuestra poseer de manera subsconsciente conocimientos sobre la legendaria escuela de artes marciales conocida como Panzer Kunst.
Gally, decidida a encontrar su lugar en el mundo, se apunta a ejercer como Ido de Hunter, lo que viene a ser una cazarrecompensas de los bajos fondos.
En un lugar donde no hay justicia, pero lo que la gente hace por sí misma, Alita decide rastrear y eliminar a los que se aprovechan de los débiles.
Desgraciadamente para ella, esta nueva carrera la llevará de cabeza a enfrentarse a Makaku, un cyborg enloquecido que necesita comer cerebros para poder mantener a ralla su dolor con las endorfinas.
El monstruoso ser al que hace frente Gally no solo le plantea un enorme reto, si no que demuestra que el cuerpo inicial que le había proporcionado Ido es demasiado frágil para poder sobrevivir en este mundo, y a pesar de lograr hacerle huir, termina reducida a un montón de escombros.
Así es como Ido, renunciando a mantener a Gally protegida, le otorga un cuerpo nuevo y poderoso, el Berserker.
Equipada con un cuerpo mucho más poderoso, contemplaremos una primera saga repleta de acción en la que nuestra heroína hará gala de unas habilidades portentosas, enfrentando a un despreciable ser para lograr defender al débil.
Pero en esta primera y épica caería veremos que no es oro todo lo que reluce, y el autor nos sorprenderá con una moraleja de dos caras en la que se mostrará que quizá los malos no son tan malos, y los buenos no son tan buenos... Logrando transmitirnos una escala de grises bastante diferente de la esperada en el planteamiento inicial.
A partir de aquí veremos una notable evolución, al ser los personajes y su evolución quienes vayan guiando la historia ofrecida, lo cual podemos ver claramente en el segundo arco de la trama, en el que Gally da un paso en su vida sentimental bastante importante al enamorarse de Yugo, un muchacho que a priori parece una buena persona con el sincero sueño de lograr ir a vivir a Salem y salir de este vertedero.
Pero para poder cumplir este sueño, Yugo se dedica a saquear columnas vertebrales de cyborgs... un negocio bastante poco limpio y muy perseguido por los Hunters que pondrá en absoluto jaque a la pareja.
Una historia más que nos vuelve a mostrar la crueldad de este universo...
Es muy probable que clásicos como Blade Runner influyeran a Yukito Kishiro en la creación de este mundo, pero el mangaka rápidamente logra crear un entorno único en sí mismo: La lejana ciudad de Salem es un cráter flotante donde los ricos viven sobre los pobres, que han visto sus huesos arrojados a un montón de chatarra.
Sin duda, una joyaza que solo mejora página a página y que a aquellos a los que os guste el cyberpunk de calidad, os entusiasmará.