El proyecto llamado Before Watchmen recogió bajo su techo la friolera de ocho series limitadas - un total de 37 entregas - , cada una de ellas protagonizada por uno de los vigilantes protagonistas de la serie, situándolos en un momento previo de la historia principal.
Hoy abordamos la miniserie de Ozymandias, quién fuere el villano y la mente maestra tras el final del universo Watchmen, cuya miniserie fue llevada a cabo por dos auténticos titanes de la novela gráfica: Len Wein y Jae Lee.
Antes de Watchmen: Ozymandias constó de seis entregas, las cuales ahora ECC Ediciones recoge en este cartoné de 160 páginas a todo color, en compañía de una galería de portadas y otros extras suculentos.
Antes de Watchmen: Ozymandias
Del panteón de personajes de Watchmen, Ozymandias debería ser el más odiado ya que en la historia original que todos queremos y conocemos, él es el culpable la muerte de millones de personas. Lo que hizo terminó salvando al mundo, pero sigue siendo un acto despreciable y el fin no justifica los medios. Pero por más que odiemos a este melagómano, eso no significa que no nos encontremos ante una obra magnífica.
La serie está escrita por el editor del Watchmen original, Len Wein, quién nos deja claro que no es alguien ajeno a guionizar cómics, y menos aun tras la experiencia de trabajar con los grandes Moore y Gibbons en la obra original.
Su trama comienza con la explosión que tiene lugar al final de Wathcmen, y a partir de ahí da un salto hacia el pasado, dónde exploramos los orígenes que convirtieron a Adrián en lo que sería. El autor nos sorprende al crear al carisma de este personaje desde su más tierna (o no tan tierna) infancia, una etapa de la vida de Adrian que, de hecho, es mi preferida a título personal de toda esta historia. A partir de ahí, el viaje de Adrián continúa, convirtiéndose en una historia realmente buena y agradecida de leer.
A lo largo de la narrativa podemos ver claro que Wein domina en su relato las voces interiores de todos los personajes, orquestándolos de forma excelente; por ejemplo, cuando toma el mando de Veidt sus pensamientos encajan perfectamente en el arquetipo del personaje de la historia original. También se las arregla para hacer que todos los demás personajes de la historia sean muy memorables, incluso si solo aparecen fugazmente en una viñeta, respetando la mitología de los mismos.
El punto más flojo de este cómic es, sin lugar a dudas, la repetición de varias páginas respecto del Watchmen original, viñeta a viñeta. Francamente, este contenido sobra en su mayor parte, y es un poco extraño ver los párrafos exactos repetidos en plan copy / paste.
El arte de Jae Lee es increíble. Su uso de sombras y todos los pequeños detalles dentro de cada viñeta se convierten en algo fascinante, lo cual combinado con los colores de June Chung crean una sintonía que realmente me ha encantado. Esto además se propaga al diseño de las páginas, que ofrece un sistema asimétrico de narración secuencial que marca la diferencia con el resto de colecciones de Antes de Watchmen.
Antes de Watchmen: Ozymandias
La serie está escrita por el editor del Watchmen original, Len Wein, quién nos deja claro que no es alguien ajeno a guionizar cómics, y menos aun tras la experiencia de trabajar con los grandes Moore y Gibbons en la obra original.
Su trama comienza con la explosión que tiene lugar al final de Wathcmen, y a partir de ahí da un salto hacia el pasado, dónde exploramos los orígenes que convirtieron a Adrián en lo que sería. El autor nos sorprende al crear al carisma de este personaje desde su más tierna (o no tan tierna) infancia, una etapa de la vida de Adrian que, de hecho, es mi preferida a título personal de toda esta historia. A partir de ahí, el viaje de Adrián continúa, convirtiéndose en una historia realmente buena y agradecida de leer.
El punto más flojo de este cómic es, sin lugar a dudas, la repetición de varias páginas respecto del Watchmen original, viñeta a viñeta. Francamente, este contenido sobra en su mayor parte, y es un poco extraño ver los párrafos exactos repetidos en plan copy / paste.
El arte de Jae Lee es increíble. Su uso de sombras y todos los pequeños detalles dentro de cada viñeta se convierten en algo fascinante, lo cual combinado con los colores de June Chung crean una sintonía que realmente me ha encantado. Esto además se propaga al diseño de las páginas, que ofrece un sistema asimétrico de narración secuencial que marca la diferencia con el resto de colecciones de Antes de Watchmen.
