En dicho volumen ECC Ediciones presenciamos como el Flash a Wally West, el protagonista de esta historia, ve su derecho a portar este nombre en entredicho con el regreso de entre los muertos de su tío, Barry Allen, englobando los originales Flash núms. 73-83 USA y Flash Annual núms. 5-6 USA. Todo un arco imprescindible que surgió dela mente del gran Mark Waid, a quién hallamos en estas entregas en compañía de los dibujos de Greg LaRocque, Mike Wieringo, Travis Charest y Phil Hester.
416 páginas a todo color recopiladas en un espectacular cartoné secuela de Nacido para Correr que ningún fan de Wally West debería dejar escapar.
416 páginas a todo color recopiladas en un espectacular cartoné secuela de Nacido para Correr que ningún fan de Wally West debería dejar escapar.
Nuestra historia nos sitúa justo tras la caída de Flash ante el Anti-Monitor durante Crisis en Tierras Infinitas, cuando el manto del velocista cedió al que hasta entonces había sido Kid Flash. Wally West vistió el rojo y se convirtió en héroe local de Keystone City y miembro de la Liga de la Justicia de América.
El presente volumen nos presenta varias historias en las que vemos aparecer conceptos como el peligroso Consorcio o el truculento regreso de Frankie Kane, ex-novia con poderes magnéticos del velocista que le daría más de un dolor de cabeza gracias a sus problemas mentales en su relación con Linda.
Pero sin lugar a dudas lo más destacable es la trama que le da título al volumen, y que abarca desde The Flash 73 a The Flash 79, seis números en los que veríamos como a modo de un muy especial regalo de Navidad, el difunto Barry Allen regresaría de entre los muertos sin conocer el motivo. Unb regreso de lo más misterioso que provocaría que hubiese dos Flash al mismo tiempo en las ciudades gemelas.
Claro que no todo son alegrías, ya que pronto este inesperado regreso comienza a jugar en contra de Wally West, cuando ve como parece haber algo mucho más oscuro en el fondo del corazón de Barry...
Su identidad como el nuevo Flash se irá poniendo en entredicho, hasta ser aplastado por un nuevo celoso y egoísta Barry que parece querer ser e único que poderte esa antorcha.
Pero cuando Wally West caiga de su estatus de gracia y se suma en la desesperación, el resto de usuarios de la Fuerza de la Velocidad regresarán para presentar batalla a este nuevo Barry Allen malvado.
No solo el mítico Jay Garrick, si no el propio Max Mercury y Johnny Quick se alzarán del retiro para plantarle cara al antiguo héroe de Central City en una auténtica guerra de veloces.
Pero ni todos ellos serán suficientes, y Wally West deberá alzarse el barro para luchar contra sus propios miedos y limitaciones y, de una vez por todas, tomar el mando de Flash como nunca antes lo había hecho.
Una trama de lo más interesante en la que vemos como West se consolida como el héroe que merece ser, a lo largo de una trágica aventura en la que no solo tendrá que enfrentarse al rostro de su maestro, si no que su carrera le llevará ha hacer frente al que fuera el mayor enemigo de este, el terrible Flash Reverso.
Sea como fuere, llevar el manto de Flash nunca fue fácil, y más cuando toda una galería de vilanos heredados quieren hacerte la vida imposible: La época de Wally West fue dura, pero tuvo un buen maestro en Barry Allen.
Mark Waid (Hueytown, Alabama; 1962.) Todo un erudito del cómic de superhéroes, Waid renunció a su cargo de editor en 1992 para emprender una extensa etapa como guionista de Flash que muchos seguidores del Velocista Escarlata no han olvidado.
A esta siguieron numerosos proyectos entre los que se encuentra la imprescindible Kingdom Come, una reivindicación de los justicieros tradicionales dibujada por Alex Ross. Actualmente, compagina sus labores en Boom! Studios con colaboraciones con otras editoriales.