Antes de proceder con el habitual análisis del tomo y como es habitual, hablemos un poco de la serie para poneros en situación, Kuroko no Basket (黒子のバスケ Kuroko no Basuke) es un spokon de baloncesto obra del mangaka Tadatoshi Fujimaki (藤巻 忠俊) que comenzó a publicarse en 2008 en la revista Shūkan Shōnen Jump de la editorial Shūeisha y finalizó este 2014 constando de 30 tankoubons recopilatorios en total.
Tras esto el manga tuvo una secuela en la revista Jump Next con EXTRA GAME, continuando justo después de la final de la Winter Cup.
Gracias al éxito obtenido durante su publicación, el aclamado manga fue adaptado en su totalidad en tres temporada anime a manos de Production I.G, emitiéndose desde abril de 2012 a junio de 2015 con un total de 75 episodios (sin contar OVAs especiales) emitidos en las cadenas japonesas MBS, Tokyo MX y BS11.
En estos momentos han sido anunciadas cuatro películas recopilatorios de dicho anime, siendo la cuarta la adaptación de Extra Game.
Toda un largo historial a la que nuestro territorio se ha sumado con la publicación por parte de IVREA del manga original, permitiéndonos disfrutarlo al fin de una manera digna.
El equipo de baloncesto de la Secundaria Teiko era conocido por contar con la Generación de los Milagros, cinco jugadores de talento legendario que los hizo destacar por encima de todos los demás equipos. Tras graduarse los cinco genios se separaron en diferentes academias de bachillerato, dispuestos a brillar de forma independiente con sus legendarias habilidades individuales.
Sin embargo la Generación de los Milagros contaba con un sexto miembro fantasma, un jugador que decidió marchar a la poco conocida secundaria Seirin para demostrar a sus anteriores compañeros que su baloncesto individual y egoísta era erróneo.
Tetsuya Kuroko, el sexto miembro fantasma, encontró en el Seirin a un equipo repleto de valiosos compañeros... y entre ellos a Kagami Taiga, una orgullosa bestia del baloncesto aun sin pulir que podría ser la luz de su sombra.
Juntos realizaron una promesa: derrotar a la Generación de los Milagros y convertirse en el mejor equipo de Japón.
Este volumen da inicio en los últimos minutos de la última parte del partido que enfrenta al Kaijo contra el Fukuda Sohgo en la Winter Cup, lo cual llevará a Kise a hacer frente a Shogo Kaizaki, uno de los anteriores genios que formaban parte del Teiko antes de la Generacion de los Milagros y, a todas luces, un tipo despreciable... pero que posee una habilidad de copia incluso superior a la suya, ya que además elimina en sus rivales la posibilidad de utilizar las técnicas copiadas.
Esto lleva a nuestro idol y modelo deportista a llevar sus habilidades a su máximo rendimiento: utilizar las copias de las técnicas de la Generacion de los Milagros; una proeza que solo puede usar por tiempo limitado pero que le lleva mucho más allá de sus posibilidades.
Tras dar por finalizado este partido, llega uno de los enfrentamientos más esperados...
Así es, al fin podemos ver en las páginas de Kuroko a Seijūrō Akashi, capitán de la antigua Generacion de los Milagros y actualmente capitán y base del Instituto Rakuzan, entras a la cancha para hacer frente ni más ni menos que a uno de sus antiguos compañeros: Shintarō Midorima del Shutoku.
Hasta ahora hemos visto en acción a todos los miembros de la antigua Generacion de los Milagros excepto a su capitán, al cual parece ser que todos los demás miembros respetan y temen... y en el enfrentamiento entre el Rakuzan y el Shutoku nos queda bastante claro el porqué: Akashi no es solo un sociópata, si no un genio que va mucho más allá de sus anteriores compañeros, dotado de una habilidad e inteligencia sobrehumanas además de un secreto que se oculta en sus peculiares ojos.
Pero por si esto fuese poco, en la alineación del Rakuzan se encuentran además tres de los cinco Reyes sin Corona, completando un equipo repleto de bestias imparables.
El Shutoku al completo y muy en concreto Midorima se encuentran ante unos rivales prácticamente imposibles de batir, un partido que, nada más empezar, parece más que perdido incluso contando con los infalibles tiros de Shintaro.
Pero aun a pesar de esto, el espíritu de equipo que Midorima ha ido desarrollando a lo largo de toda la colección - siendo probablemente el personaje que más ha evolucionado de todo el reparto - le ayudarán a seguir adelante, haciendo frente a lo imposible sin flaquear ni un solo segundo.
¿Logrará resistir frente al Emperador?
En este volumen finalmente Tadatoshi Fujimaki nos deja catar al que será el BOSS FINAL de Kuroko no Basket, ya escapándose por completo de lo que podrían ser de forma lejana y muy dramatizada habilidades de baloncesto para meterse de lleno en la fantasía: Un rival imposible cuyos ojos y habilidades sobrehumanas tiran de culo al suelo a jugadores y lectores por igual.
Esto lleva a nuestro idol y modelo deportista a llevar sus habilidades a su máximo rendimiento: utilizar las copias de las técnicas de la Generacion de los Milagros; una proeza que solo puede usar por tiempo limitado pero que le lleva mucho más allá de sus posibilidades.
Tras dar por finalizado este partido, llega uno de los enfrentamientos más esperados...
Hasta ahora hemos visto en acción a todos los miembros de la antigua Generacion de los Milagros excepto a su capitán, al cual parece ser que todos los demás miembros respetan y temen... y en el enfrentamiento entre el Rakuzan y el Shutoku nos queda bastante claro el porqué: Akashi no es solo un sociópata, si no un genio que va mucho más allá de sus anteriores compañeros, dotado de una habilidad e inteligencia sobrehumanas además de un secreto que se oculta en sus peculiares ojos.
Pero por si esto fuese poco, en la alineación del Rakuzan se encuentran además tres de los cinco Reyes sin Corona, completando un equipo repleto de bestias imparables.
Pero aun a pesar de esto, el espíritu de equipo que Midorima ha ido desarrollando a lo largo de toda la colección - siendo probablemente el personaje que más ha evolucionado de todo el reparto - le ayudarán a seguir adelante, haciendo frente a lo imposible sin flaquear ni un solo segundo.
¿Logrará resistir frente al Emperador?
En este volumen finalmente Tadatoshi Fujimaki nos deja catar al que será el BOSS FINAL de Kuroko no Basket, ya escapándose por completo de lo que podrían ser de forma lejana y muy dramatizada habilidades de baloncesto para meterse de lleno en la fantasía: Un rival imposible cuyos ojos y habilidades sobrehumanas tiran de culo al suelo a jugadores y lectores por igual.